Capítulo 18:La reconciliación

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Inma

Estuve una hora esperando a que algún doctor viniera a verme, quería ver a Daniel, al final Alexander apareció, me hizo un chequeo rápido y me dijo que estaba bien, me ayudó a levantarme y me volví a vestir, al salir de la habitación, Carolina se levantó rápidamente para abrazarme, me dijo que Daniel no había despertado aún, ella había estado hablándole pero no se despertó, me guio hasta su habitación y volvió a sentarse, al abrir la puerta se me partió el corazón al ver a Daniel así, cerré la puerta y caminé hasta la cama, me senté casi al lado de Daniel y vi como dormía, tenía una venda en la cabeza y que su bíceps estaba vendado, no sabía que Daniel estaba así de fuerte, pero ese no era el motivo de porqué estaba ahí, estaba ahí para hacerle compañía.

No sé qué me pasó, si fue el impulso o mis emociones, pero le besé en la frente y luego lo besé en las mejillas, sin querer dejé una marca de pintalabios en su cara y me reí, estaba mono así.

- Por favor Daniel, quiero que te despiertes, no quiero perderte, no ahora cuando ya estábamos bien-dije en un hilo de voz.

Agarré su mano y apoyé mi cabeza en la cama, estaba muy cansada, había sido un día intenso.

Ni siquiera supe cuando me había dormido hasta que sentí una mano acariciando mi mejilla, parpadeé sorprendida al ver que Daniel me miraba con una sonrisa, le devolví la sonrisa y volví a agarrar su mano.

- No has tenido a todos preocupados-dije triste.

- ¿Todos?-preguntó Daniel confundido.

- Tu madre está aquí-dije informándole.

- Seguro que os habéis puesto al día-dijo Daniel.

- Más o menos-dije riéndome.

- ¿Qué pasa?-preguntó Daniel riendo.

- Tu cara ahora es divertida-dije entre risas.

Vi como Daniel se miraba al espejo y me miró con una cara graciosa mientras nos reíamos.

- Voy a limpiarte la cara-dije sacando un papel.

- No me la iba a limpiar yo-dijo Daniel divertido.

Fui quitando cuidadosamente los restos del pintalabios de la cara de Daniel, él me miraba intensamente, su mirada me ponía un poco nerviosa la verdad, cuando tiré el papel a la papelera, Daniel cogió mi mano y la acarició lentamente.

- Gracias por haberme salvado antes, pero no tendrías que haberlo hecho-dije seria.

- Tenía que hacerlo, no quería verte con una bala-dijo Daniel.

- No quiero perderte Daniel, me preocupé mucho por ti-dije seria.

- ¿Tuviste otro ataque de pánico?-preguntó Daniel preocupado.

- Lo tuve, y me desmayé-dije seria.

- ¿Tan preocupada y nerviosa estabas?-preguntó Daniel sorprendido.

- Si, porque tenía mucho miedo de perderte-dije seria.

Daniel subió mi mano un poco más y puso mi mano en su mejilla, lo acaricié lentamente, sentí cosquillas por la pequeña barba que llevaba.

- He decidido perdonarte, quiero empezar de cero, dejando el pasado atrás, pero habrá que tener cuidado-dije mirándola.

- Me parece bien, gracias por esta nueva oportunidad, no te fallaré-dijo Daniel contento.

- Descansa, vendré a visitarte todos los días-dije despidiéndome.

- Espero estar recuperado del todo para poder verte-dijo Daniel.

- Seguro que ya estás bien-dije contenta.

Cerré la puerta, podría irme a casa tranquila sabiendo que Daniel está bien, Carolina se levantó al verme.

- ¿Cómo está?-preguntó Carolina.

- ¿Cómo sabes que ya está despierto?-pregunté sorprendida.

- Llevas mucho rato ahí, y también porque vienes con una sonrisa enorme-dijo Carolina.

- Pues está bien, ya estoy tranquila-dije feliz.

- Voy a ir a verlo, ahora quiero que vayas a casa y descanses mucho-dijo Carolina.

- Lo haré, vendré a visitarlo mañana-dije feliz.

- Te veo mañana-dijo Carolina abrazándome.

- Habrá que quedar algún día de estos, ha pasado mucho tiempo sin vernos-dije abrazándola.

- Cuando quieras-dijo Carolina feliz.

Me despedí de ella y salí del hospital, tuve que volver en tren para Info+ para coger mi coche y volví a casa.   

Adictos al Pecado (Inma y Daniel 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora