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Apenas he podido seguirle el ritmo al partido.

Estoy en mi móvil. Veo uno que otro video de los partidos anteriores de la universidad. Intento familiarizarme con los nombres y las posiciones de los jugadores del equipo varonil de hockey universitario de la BSU.

Apenas puedo concertarme en eso cuando no estoy dando brincos en mi asiento cuando los jugadores se estampan a toda velocidad contra las vallas frente a nosotros.

Jake me "tranquilizó" comentando que el vidrio que utilizaban para las vallas era tratado de forma especial. Dijo que el vidrio templado era más resistente que el cristal normal y que, por eso mismo, era difícil para los jugadores romperlo, aunque no imposible.

Wow, que consuelo...

Lo que ven mis ojos es brutal. ¿Qué no se suponía que era un juego amistoso?

Los cuerpos masculinos alcanzan velocidades que creía imposibles. Todos se ven enormes con sus uniformes especiales y aun así logran lucir ágiles y se mueven hasta con gracia, con control total de sus palitos y del disco negro que usan para anotar puntos.

La brutalidad del contacto físico entre los miembros de los equipos me tiene perpleja. ¿Cómo pueden aguantar tremendos golpes?

Sin lugar a duda, los jugadores de hockey estaban hechos de algún material diferente al resto de los humanos comunes y corrientes, como lo era yo.

Me costaba un poco comprender lo que estaba sucediendo, pero Leslie y Jake me explicaban de vez en cuando.

Según Leslie, nuestro equipo está perdiendo. Los Halcones de Evergreen se las han ingeniado para meter un montón de goles. Según Jake la mayoría los ha metido el capitán de Evergreen, el tal Brooklyn Henderson. Dice que es muy bueno, que nuestra defensa es de las mejores y, aun así, se las ha arreglado para burlar a cada uno de nuestros defensores.

El público corea algunas cosas que no entiendo.

Sigo buscando información sobre el equipo universitario. Quiero hacer esto bien y la única manera de hacerlo es empapándome de tanto como pueda con información al respecto.

Jake está ocupado tomando fotos del partido y Leslie presta tanta atención como puede y graba de vez en cuando notas de voz en su móvil.

No estoy mirando hacia la pista cuando los altavoces chillan.

El público grita alterado y hay una pausa.

—¡Dios, esto es increíble! — chilla Jake buscando los mejores ángulos para disparar con su cámara.

Alzo la vista solo para encontrarme con que el juego está en pausa y los doce jugadores se amontonan en un punto cercano en la pista. Los árbitros se abalanzan hacia el puño de varones que parecen discutir en la pista.

Están peleando.

Dos jugadores se ponen bastante físicos y agresivos mientras el resto... ¿trata de separarlos o unirse a la pelea?

No entiendo de que va esto, pero me pongo de pie y me acerco al cristal para ver mejor.

El público está vuelto loco.

—¿Qué está pasando? — inquiero para mis acompañantes —¿esto es parte del juego?

Leslie y Jake están tan atentos y atónitos como el resto.

—Esto — señala Jake con una sonrisa —, es la razón por la que todo el mundo esta aquí.

La pelea se está poniendo fea y apenas pueden contenerlos.

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