🦋Epílogo🦋

12.6K 1.4K 106
                                    

¡Siempre fue Lascivia!
Jimin

Jamás estuve tan seguro de algo en mi vida, como ahora, Jungkook está parado frente a mi con un ramo de rosas rosas, pidiéndome perdón por hacerme enojar, esta mañana me enoje porque se fue y se cambió de habitación dejándome solo con los niños, ya se que Kyomi es insoportable, pero la tenemos que soportar los dos, no yo solo.

Aún estamos en Hawaii, realmente es nuestra última noche aquí, no me enoje tan literalmente, pero amo cuando me compra rosas y se pone cariñoso, osea, él ya lo es, pero se pone mucho más meloso cuando piensa que estoy enojado.

Las demás personas a nuestro alrededor nos miran con curiosidad, saben que es puro drama, jamás me enojaría por algo tan simple, pero soy el rey del drama y todos aquí lo saben.

— Bebé, por favor —. Súplica una segunda vez.

Nuestra hija se cruza de brazos furiosa y pone los ojos en blanco, estoy orgulloso de mí mini copia.

—Creia que yo y Omer somos tus bebés, pero siempre es papá nunca nosotros, que llorón.

—Callate mocosa, es tu culpa, vete a dormir.

Meredith se ofrece a dormir con los niños está noche y ellos aceptan para jugar con mi hermano, mi padre no dice nada, ya que nunca tiene mucho tiempo de pasar con los gemelos, ambos se van llevándose a los niños con ellos.

Jungkook extiende su mano hacia mi y la tomo a la vez que sostengo el ramo de rosas y él empieza a caminar sosteniendo mi mano con nuestros dedos entrelazados.

—¿A donde me llevas?—. Pregunto

—A un lugar donde pueda hacerte mío hasta el amanecer, ¿alguna objeción?

—Ninguna...

Continuamos caminando tomados de la mano hasta llegar a un pequeño kiosco, hay una mesa enorme en medio y unas velas decoran el lugar, está bastante alejado de los demás, y además hay una pequeña piscina justo al lado, coloco el ramo encima de la mesa y subo en ella, abro las piernas cediendo el paso a mi esposo quién no lo duda y se coloca en medio y acaricia mis piernas antes de mirarme con lujuria y empezar a besar mis labios.

Nuestras lenguas juegan en el interior de nuestras bocas, sus manos acarician mi piel con desesperación y sube a mis nalgas donde me da un apretón de culo, suelto un suspiro sintiendo mi polla palpitar al tiempo que duele de lo dura que está, desabrocho los pantalones de mi hombre mientras él quita los míos con desesperación, nuestras respiraciones se vuelven pesadas y sus quejidos placenteros me ponen el libido por los cielos. Une su polla con la mía y sostiene ambas longitudes con su mano y empieza a masajearlas a la vez, muerdo su labio inferior y tiro de él con ímpetu sintiéndome excitado por la fricción que crean nuestros miembros frotándose uno contra el otro.

—Ahhh, Jeon—. Gimoteo apretando las nalgas por las sensaciones que me da.

—¿Lo hago bien?, Nene.

—Si—. Digo y muerdo su oreja arrancándole un gruñido.

—¿Si qué?—. Pregunta apretando uno de mis pezones por encima de la tela.

Se lo que quiere escuchar y no pienso hacer que supliqué por ello.

—Si, mi amor—. Contesto y él ríe, aumenta la velocidad en los movimientos de su mano.

Pasión Clandestina [ +21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora