Pasión Clandestina [ +21]

🦋 Capitulo 39🦋

¡Corazones rotos y reencuentros!
Narrador omnisciente

Dos semanas después...

Han pasado quince días, quince largos y tortuosos días en los que Jimin no paro de intentar contactar a Jungkook sin obtener respuesta y al día número catorce de rindió dando por hecho que su relación se fue a la mierda y jamás podría recuperarla, culpando se a si mismo cada noche, tarde y día por lo que sucedió el día del evento.

Charly al igual que Jimin se encuentra en la casa de Emma Hastings, y tampoco ha querido salir de su habitación sintiendo vergüenza y tristeza, se siente culpable porque se culpa por lo que está pasando el chico al que solo quiere como un hermano mayor y al mismo que jamás le haría daño estando en sus cinco sentidos.

Por otro lado tenemos a Emma, quien preocupada por no tener idea de lo que está sucediendo con su hijo, después de intentar obtener respuesta de él y no lograrlo se comunicó con el gobernador y ambos decidieron actuar a su manera.

Al día siguiente del evento, después de dieciséis largos años, Gabriel volvió a ver al Jungkook que hace años no veía, ese que no duda en correr a sus brazos y pedirle ayuda, ese mismo que se encierra en su apartamento y se alcoholiza hasta el punto de perder la consciencia, realmente le alegra que su preciado hijo lo busque y le muestre uno que otro sentimiento más prefiere no ver eso si viene acompañado de lágrimas y un corazón roto.

Hace exactamente cinco días que Jungkook regreso al trabajo, no le dio explicaciones a nadie y contrato a una nueva secretaria que tiene que soportar sus repentinos cambios de humor y su borrachera por las noches.

Ninguno de los tres están bien, Mikael Hastings actuando como el esposo perfecto se encuentra en Rusia buscando una forma de aniquilar a los enemigos de su esposa sin que lleguen a tocarle un pelo porque toda Italia se consumiría en llamas y él mejor que nadie lo sabe.

—Tenemos que hablar—. Dice Emma con frialdad entrando al cuarto que le dio a su hijo, este simplemente limpio sus lágrimas y asintió con la cabeza, no queda nada de ese chico feliz y animado que había antes, Jungkook lo animaba a ser así, y por eso se llevó su felicidad consigo.

—Habla—. Le dice sin ánimos.

—Cielo, si no me dices que pasa no puedo ayudar, no sé cómo hacerlo, dime qué pasó por favor—. Súplica una vez sabiendo que sería la última.

—No paso nada, estoy bien—. Dice y ella asiente con la cabeza, da dos toques en la puerta y dos de sus hombres entran en la habitación.

—Traiganlo—. Ordena y los hombres sostienen al chico quien patalea porque no quiere salir.

Lo suben al asiento trasero de un auto donde también se encuentra Charly con el rostro cubierto por una capucha negra, los sollozos de la chica son leves y bajitos, pero aunque su pecho se estruja Jimin prefiere ignorarla y seguir con sus propios lamentos.

Gabriel camina por los pasillos de la empresa de su primogénito y acomoda su saco antes de entrar sin siquiera tocar la puerta.

—¿Y los modales?, ¿Te limpiaste el culo con ellos o qué?

—Necesito que le pongas un stop a esto hijo, estás sufriendo, Jimin también está muy mal, hablé con Emma y ella me dijo que...