Entendido, Profesora 2: EL INTERCAMBIO

Capítulo 5. VALENTINA ALTAMIRANO

Valentina Altamirano:

__ Necesito que me revises los informes de los casos entregados ayer, por favor.

La chica era una practicante, llevaba menos de un mes en la empresa. No lo suficiente como para que yo me aprendiera su nombre.

__ Por supuesto, señora Valentina.

__ Y por favor necesito la relación de casos del mes pasado para hoy. Estos días quiero que estés muy atenta, te encargo mucho esas dos cosas.

La chica lleva la mano a la frente en posición militar.

__ Un ojo al gato y otro al garabato, señora Valentina, entendido.

Mi nariz se arruga en un gesto de confusión total. ¿Qué acaba de decir? No he entendido nada.

__ ¿Qué?

__ Que estaré al pendiente de todo, señora.

Sigo sin entender el lenguaje folclórico de la gente de bajo poder adquisitivo.

Así que sólo asiento con la cabeza y la dejo ir al pequeño escritorio que le tengo asignado dentro de mi oficina.

Esto de tener una practicante conmigo me hace bien, ¿Cómo no acepte estudiantes antes? Se esfuerzan mucho y no cobran un peso.

Aunque claro, a ella si le pago porque verla llegar en bicicleta desde el otro lado de la ciudad me causaba mucho conflicto. Ahora sigue llegando en bicicleta pero al menos tiene un sueldo y mi conciencia esta tranquila.

Desde que la empresa de mi madre pasó a ser mía tuve que abandonar mucho de mis planes originales. Entre ellas el cambio más significativo fue abandonar medicina y estudiar leyes para entender todo lo que sucedía en este medio.

Me estaba esforzando tanto, cada día, para que el imperio que mi madre creó se mantuviera de pie.
Había tenido que sacrificar muchas cosas, pero al menos hasta ahora he logrado acostumbrarme a mi nuevo mundo. He logrado equilibrar mi vida, entre mis estudios, mi trabajo y mi esposa.

Mi esposa.

Tony ha sido mi principal apoyo en todo esto. Ella fue quien estuvo conmigo los días en que mi humor estuvo por los suelos al tener que abandonar la carrera que amaba. Pero también es quien se queda conmigo hasta largas horas de la noche examinando los casos de la oficina. Es quien se pone un pasamontañas en la cabeza y actúa de "acusada", es quien se coloca sobre el estante de la cocina y con una cuchara golpea una sarten para decir "orden en la sala".

Es quien me ayuda a estudiar para cada examen, quien parece un maniquí sin vida y silencioso cuando mis clases en línea comienzan. Es la persona que más me ama en el mundo y a la que más le interesa verme triunfar.

Ella sabe lo extremadamente importante que es para mi manejar la firma como mi mamá lo hubiera hecho. Ella es todo lo que tengo, mi única y verdadera familia.

El pitido de un reloj me distrajo de los documentos que me encontraba leyendo, la practicante revisó la agenda y me anunció mi siguiente actividad.

__ Tiene la junta con los hermanos Vicencio, señora.

__ Entendido. Quédate aquí, por favor haz lo que te indique y no permitas que nadie entre a la oficina mientras no esté.

Ella asiente repetidas veces.

__ ¿Ni siquiera su padre?

__ Sobre todo mi padre, no lo quiero ver aquí.

Ella asiente de nuevo y la veo regresar a sus actividades.