𝐂𝐡𝐚𝐩𝐭𝐞𝐫 𝐨𝐧𝐞Sheccid se encontraba en un auto rumbo a su nueva casa mientras escuchaba música y observaba el paisaje a través de la ventana, no le agradaba del todo la idea de mudarse, pero ya no había marcha atrás.
Estaba sumida en sus pensamientos hasta que su madre le habló.
—Cariño, ya llegamos -avisó bajando del auto.
La chica suspiró quitándose los audífonos y abriendo la puerta del coche para empezar a ayudar a bajar las maletas que se encontraban en el auto y entraba a aquella lujosa casa; su padre era un importante empresario, así que el dinero nunca fue un problema.
La casa era excesivamente espaciosa para tres personas, pero a sus padres siempre les había gustado hacer notar su buena posición económica, así que simplemente subió las escaleras hacia el segundo piso y escogió la habitación que se le hacía más cómoda, dejó su maleta en el suelo y se limitó a sentarse al lado de la misma, observando su alrededor e imaginándose en dónde iría cada cosa, eso hasta que su madre apareció en el umbral de la puerta.
—Shey, iremos a ver algunos muebles para la casa, ¿quieres venir? -preguntó y me dió una dulce sonrisa.
La oji marrón se lo pensó por unos cortos segundos para finalmente responder con un asentimiento de cabeza mientras se levantaba del suelo, tomando su teléfono en el acto.
—¿Tardarán mucho? Es que quiero ir a Dior a comprar unas cosas -le informé observando su teléfono mientras caminaban escaleras abajo.
—Supongo que sí, la mayoría de cosas del hogar se quedaron en la anterior casa, ¿tienes la tarjeta?
—Sí, aquí está -señaló su bolsillo —¿A qué hora llega el camión de mudanza? -preguntó volteando a ver a su madre.
—Debería estar aquí a eso de las 6 de la tarde.
—Ah, está bien -respondió con simpleza y subió al coche en dónde ya se encontraba su padre.
No tardaron mucho en llegar al centro comercial, entraron al mismo y sus padres se dispusieron a buscar el almacén de muebles, mientras la joven tomaba su propio rumbo buscando lo que quería. Entró en el almacén de Dior y empezó a ojear algunas cosas para ver qué llevar, pero simplemente se decidió por un gloss, rubor, un perfume y uno que otro labial.
Mientras pagaba recordó un bolso Gucci que había visto en Instagram, así que después de salir de ahí empezó a buscar el almacén de Gucci, pero al ser nueva en la ciudad estaba algo desorientada, hasta que unas chicas se le acercaron.
—¡Hola! Hace un rato te vimos salir de Dior y desde ahí estás algo perdida, ¿necesitas ayuda? -me preguntó amablemente una linda chica con rasgos asiáticos.
—Ah.. sí, gracias por ofrecerme tu ayuda.....? -hizo una pausa para que la chica se presentase.
—Kym Chang Cohen, y ellas son Megan y Anya -las otras dos chicas sonrieron como saludo.
—Gracias, Kym, ahora ¿podrías enseñarme en dónde está el almacén de Gucci? -cuestionó tímidamente.
—Claro, ven, es por aquí -se posicionó a su lado para guiarla. En el transcurso del camino se entabló una agradable conversación, y cuando llegó y compró el bolso que había estado buscando, fueron a un puesto de Starbucks para tomar algo.
—¿Y si vamos a dar una vuelta por el parque? Para que conozcas más la ciudad, Sheccid -preguntó repentinamente la de rasgos asiáticos.
—Claro, sólo le avisaré a mi mamá -las demás asintieron así que la castaña solo tomo su teléfono para escribirle a su madre y que la misma le avisara a su padre.
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Mamá 💕
Ma, voy a salir con unas amigas
a dar una vuelta.
15:33 ✓✓Está bien.
15:34 ✓✓___________________________________________
—Bien, ya le avisé, vamos -les informó para emprender camino hacia la salida del lugar.
El camino no fue muy largo ni muy corto, recorrieron los alrededores del parque y finalmente terminaron sentándose en unas bancas que habían por ahí, charlaban e intercambiaron Instagram y números de teléfono. Seguían hablando con normalidad hasta que alguien interfirió.
-Perdón si no es lo que esperaban. 🥲
-Nuevamente, si estoy mal en algo, lo que sea, CORRIJANME
-Perdón por la edición tan chafa (otra vez)
-Y eso, mañana hay nuevo cap aquí y video en tik tok. 😀
-Val ♡
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𝗦𝗵𝗲 𝗗𝗿𝗶𝘃𝗲𝘀 𝗠𝗲 𝗖𝗿𝗮𝘇𝘆 | 𝘈𝘯𝘥𝘺 𝘎𝘰𝘭𝘥𝘧𝘢𝘳𝘣
Fanfiction𝖣𝖾𝗌𝗉𝗎𝖾́𝗌 𝖽𝖾 𝗎𝗇𝖺𝗌 𝗌𝖾𝗆𝖺𝗇𝖺𝗌 𝖽𝖾 𝗁𝖺𝖻𝖾𝗋𝗅𝖺 𝖼𝗈𝗇𝗈𝖼𝗂𝖽𝗈, 𝖿𝗂𝗇𝖺𝗅𝗆𝖾𝗇𝗍𝖾 𝗌𝖾 𝖼𝗈𝗇𝗏𝖾𝗇𝖼𝗂𝗈́ 𝖽𝖾 𝗊𝗎𝖾 𝗁𝖺𝖻𝗂𝖺 𝗊𝗎𝖾𝖽𝖺𝖽𝗈 𝖿𝗅𝖾𝖼𝗁𝖺𝖽𝗈 𝖽𝖾𝗌𝖽𝖾 𝗊𝗎𝖾 𝗅𝖺 𝗏𝗂𝗈́ 𝗉𝗈𝗋 𝗉𝗋𝗂𝗆𝖾𝗋𝖺 vez, 𝗌𝗂𝗇�...