Solitario en esta esquina me encuentro, moviendo el joystick presionando los botones con destreza, aplicando un preciso combo ante la pantalla. Killer Instinct se ha convertido en mi último refugio, un mundo donde pierdo la noción del tiempo y de la soledad que me rodea. ¿Es que acaso nadie más encuentra atractivo este juego?
Sí, es cierto que tiene similitudes con Mortal Kombat en el apartado visual, pero yo buscaba algo nuevo, algo diferente, y terminé cautivado por este título. A veces me pregunto si a Akira le gustaría jugarlo. Pero, ¿cómo podríamos jugar juntos si nuestros horarios chocan de manera tan desafortunada?
Mi mente vuela hacia Akira, la extraño mucho. Quiero decirle cuánto la extraño, pero... bueno, eso sería un poco vergonzoso, ¿no?
Mi madre me contó que habló con la señorita Moemi sobre su desaparición para reducir su castigo, espero que haya hecho un buen trabajo con eso.
Mis días de descanso donde se supone que debería divertirme ya no son tan emocionantes sin ella a mi lado. Esto es deprimente. ¡Te extraño, Akira! Pero claro, eso es algo que nunca diría en voz alta.
Respiro profundamente, tratando de calmar mis pensamientos. Estoy solo aquí en mi cuarto, nadie vendrá a retarme, parece que los otros juegos son más atractivos para los demás que esta joya oculta. Bien, lo haré, sin titubeos.
- ¡Te extraño, Akira! -grito sin contenerme, sabiendo que nadie me escuchará.
De repente, siento unos brazos rodeando mi cintura. Mi cuerpo se tensa y mis manos se alejan automáticamente del mando.
- ¡Spinal! ¡No!
Mis ojos siguen la caída de Spinal en la pantalla, y aunque solo es un ROUND perdido, es la primera vez que soy derrotado desde que comencé a jugar. Todo gracias a este ser que me impidió defenderme adecuadamente. Maldito seas, juro que cuando voltee sufrirás las consecuencias.
- Me las pagarás.
Giro hacia mi atacante, con los puños apretados y listo para contraatacar. Pero entonces la veo. Ella está sonriendo, mirándome, y vuelve a rodear mi cintura con sus brazos, sujetándome con fuerza. Me quedo allí, paralizado, con los brazos alzados como un idiota, tratando de procesar lo que está sucediendo.
- Akira.
En la pantalla, Spinal cae una vez más. Esta vez será la última, aunque, ¿acaso eso realmente importa en este momento?
- ¿Estás aquí, de verdad?
Es una sensación extraña, una reacción ante su presencia después de tanto tiempo. La última vez que nos vimos fue una noche en la que apenas pudimos jugar debido a las circunstancias. Jiiya la llevó rápidamente a casa para evitar que Moemi la regañara. Eso fue hace dos semanas. Se siente tan bien tenerla aquí.
Akira, con apenas unas pocas partidas, ya se estaba destacando en el juego, dominando a Sabrewulf de una manera impresionante. Su talento natural me sigue sorprendiendo, siento un poco de envidia si soy sincero conmigo mismo.
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Sólo te quiero a ti
Romance¡Hola! Esta será una reescritura de mi primera historia, con el mismo nombre, optaré por mejorar obviamente la narrativa y quizás agregué unas cuantas cosas para darle un ambiente diferente al Fanfic original que si bien no la consideró mala pienso...