°•Contigo a mi lado•° Shinichiro y tú

°•Capitulo 16•°

{la declaración}

-quiero novio- se quejó mi amiga mientras veíamos a Wakasa jugar un partido.

Yo dejé de atender al partido para escucharla a ella y verla a los ojos.

-y yo, no te jode- puse una sonrisa irónica.

-esque... Todo el mundo tiene novio y yo estoy aquí sola- se echó para atrás para quedarse tumbada en el césped mientras miraba al cielo.

-hola? Que estoy igual que tú- moví la mano para que me tuviese en cuenta.

-sisi, tu también... pero por lo menos tienes a alguien a quien quieres, yo ni eso- yo suspiré y rodé los ojos.

-no sé yo que es peor, si no tienes a nadie estás tranquila, si lo tienes estás todo el día comiendote la cabeza- volví a mirar al frente, ninguno había marcado gol.

-pues por lo menos tienes algo con que comértela- después se quedó un silencio.

-ay... Yo quiero a Shinichiro-kun- suspiré con pesadez.

-ay... Yo quiero novio-suspiro con pesadez a la vez que yo.

-que tu quieres a quien?- escuché la voz de alguien muy conocido detrás mía, haciendo que pegase un salto en mi sitio.

Era Kakucho.

-AY!- grité cuando lo escuché de repente. Que vergüenza por Dios.

-hola Kakucho- saludó mi amiga.

-hola Aoi- saludo de vuelta.

-q-que haces aquí Kakucho?- pregunté con claro nerviosismo.

-nada, te he visto ¿A quien dices que quieres?- preguntó de nuevo, con cara seria, pero no la de siempre, la seria enfadada.

-yo? Jajaja... A nadie ¿A quien voy a querer si no es a ti?- le sonreí con los ojos cerrados y nerviosa perdida.

-a Shinichiro, o eso me ha parecido escuchar- me sonrió intentando disimular su cabreo.

-claro... Esque yo he dicho eso porque... Ehm... Lo quiero como amigo, mucho mucho- obviamente se me notaba que mentía, Kakucho lo sabía.

-kaori- me miró serio.

-que lo quiero mucho como amigo, es muy buen chico... Simpático, agradable, muy mono...- se me salió una sonrisa tonta de enamorada, pero cuando vi la cara seria de Kakucho se evaporó.

-¿Desde cuándo te gusta?- me preguntó con el mismo tono monótono que siempre.

-desde hace ya un tiempecito- intervino mi amiga.

-y no me lo cuentas? Muy bien- se hizo el dramático dándose la vuelta para irse.

-espera Kakucho!- me levanté de donde estaba sentada para ir tras el pero alguien me frenó.

Me giré cuando noté a que una mano me agarraba la muñeca. Era Wakasa ahora, mañanita ajetreada.

-kaori-