Cuando una persona tiene tanta presión encima, deja de disfrutar todo lo que hace a pesar de amarlo, me di cuenta de esto cuando conocí a Oikawa.
Me di cuenta de todo el estrés y sufrimiento que acarrea cada vez que tiene un partido importante y todo lo que puedo hacer es apoyarle.
Hoy Oikawa tiene partido y aún que él no lo sabe voy a ir a verle. Estoy vestido con una sudadera negra, unos vaqueros y una gorra para que no puedan ver mi cara.
Llevo aproximadamente diez minutos sentado en las gradas, estoy nervioso y la gente que hay a mi al rededor también. Todos esperan que Oikawa lo haga increíble, estoy tan orgulloso de él.
Aproximadamente cinco minutos después entran los dos equipos para ponerse a estirar. Oikawa parece bastante tranquilo o al menos eso es lo que intenta aparentar porque su postura es tensa.
Empieza el partido y ambos equipos muestras su gran nivel en la pista, lo están dando todo. Oikawa falla un par de saques, cosa que es bastante rara en él, seguro que es por los nervios. Su equipo intenta levantarle el ánimo y yo desde muy dentro de mi le estoy dando todo mi ánimo y apoyo posible.
El Aoba Josai gana el primer set y todos los que estamos en las gradas, incluyéndome, lo estamos celebrando como si hubieran ganado el partido.
Empieza el segundo set y veo a Oikawa cada vez más tenso, esto me está dando mala espina, me gustaría bajar allí y abrazarle.
El partido continúa, están bastante empatados con este segundo set, le toca tirar a Oikawa y vuelve a fallar, pero esta vez cae de rodillas.
Yo me levanto de golpe para verle mejor.
¿Le está dando un ataque de nervios?
Veo que tras unos segundos Oikawa se va y sale corriendo, yo escucho a todo el mundo cuchichear y dar sus opiniones de mierda.
"Que exagerado"
"Solo quiere llamar la atención"
"Menudo marica"
Salgo de las gradas en busca de Oikawa, le escribo un mensaje pero no me contesta, le llamo y tampoco me contesta.
Me voy corriendo a los vestuarios y allí le veo en una esquina encogido tratando de recuperar el aire.
- Oikawa...- le digo bajito.
Este al escuchar mi voz levanta la cabeza sorprendido.
- K-kageyama...y-yo n...no puedo- dice angustiosamente mientras se agarra el pecho.
Me acerco a el rápidamente y le pongo una mano en la boca.
- Cariño, respira por la nariz- le digo con voz dulce- Vamos, respira conmigo, a mi ritmo ¿Vale?
Le ayudo a recuperar el aire, parece algo más calmado, pobrecito.
Le abrazo cuando creo que ya está mejor.
- ¿Me viste?
- Sí.
- Hice el ridículo...- dice mientras se echa el pelo hacia atrás- no deberías de haber venido ¿Por qué no me lo dijiste?
- Oikawa, realmente eres estúpido- su cara de desconcierto por mis palabras me hizo mas gracia de lo que imaginé- yo he ido a ver a mi novio jugar porque lleva angustiado por un puñetero partido desde hace dos días, mi novio lo ha dado todo ahí fuera y no ha podido dar más por la puta presión que le ponen siempre, así que no, mi novio no hizo el ridículo, mi novio luchó todo lo que su cuerpo le permitió- le dije seriamente.
Las lagrimas de Oikawa se volvieron a acumular en sus ojos y sin que yo pudiera evitarlo comenzó a llorar como si fuera un niño pequeño. Yo me senté junto a él y le acune como a un niño hasta que se calmó.
- Me gusta que me llames cariño y que digas que soy tu novio- dice con la voz entrecortada.
- A mi también me gusta...- le digo acariciándole el pelo.
¿Durante cuánto tiempo más vamos a tener que seguir escondiéndonos?
- Los de tu equipo...¿Ellos lo saben?- me pregunta Oikawa.
- Em...solo se lo confirme a Tsukishima y a Yamaguchi...ah y a Ashai que lo adivinó y con el resto del grupo no he vuelto a hablar por miedo.
Se hace el silencio.
- Ellos tienen que aceptarnos- dice Oikawa rompiendo el silencio.
Yo me quedo en silencio pensando, nadie me ha dicho nada aún, supongo que me están dando espacio, pero realmente siento miedo o nervios o a lo mejor es una mezcla de todo...
Oikawa se levanta del suelo y me ayuda a levantarme a mi también dándome la mano.
- ¿Puedo besarte?- me pregunta poniendo sus manos en mis mejillas.
Afirmó con la cabeza y el posa sus labios contra los míos, le adoro, es en todo lo que puedo pensar ahora mismo, adoro su cuerpo, su cara, sus labios, su personalidad, como me trata y como confía en mí, simplemente le adoro.
Nuestros labios comienzan a moverse a una gran velocidad, no me había dado cuenta de lo mucho que añoraba esos labios.
Nuestro beso es húmedo y caliente, nuestras lenguas chocan constantemente y Oikawa parece realmente enfocado en su tarea de recorrer cada lado de mi boca con su lengua.
Oikawa pone una de sus manos en mis caderas y yo le rodeó con ambos brazos al rededor de la cintura, quiero tenerlo cerca, quiero que se quede conmigo y que entienda que a mi lado el va a estar bien.
Me separo un momento para conseguir algo de aire.
- Oikawa, tus compañeros no tardarán en llegar deberíamos de parar- digo con la voz entrecortada intentado conseguir aire.
- Tienes razón pero no quiero separarme de ti- me dice apoyando su cabeza en mi hombro- por cierto...gracias y perdón- Oikawa se separa de mi al ver mi cara de enfado cuando le oigo decir perdón- gracias por estar conmigo y estar tragandote mi mierda a pesar de que no tienen nada que ver contigo y perdón por solo saber llorar como un niño pequeño- me dice Oikawa, él está completamente rojo, y sus ojitos están hinchados después de haber llorado tanto, que mono es...
- No te tienes que disculpar...eres mi novio y voy a estar contigo siempre ¿me entiendes? Si-em-pre y me da igual si te enfadas conmigo o cualquier cosa...simpre estaré contigo sin importar el dolor.
¡Fin del capítulo!
¿Qué os a parecido?
Siento que últimamente solo escribo drama JAAJAJ
Perdonarme chicos, las clases me quitan las ganas de vivir y tengo que desahogarme 😞🤘Realmente adoro a estos dos, siento que se entienden taaaaaaan bien :')
En fin ¿Demasiado drama verdad? Tranquiiiiilos todo va a salir bien 😈
¡Si os ha gustado no olvidéis comentar y votar sin miedo!
Nos vemos dentro de cuatro días 😈
ESTÁS LEYENDO
Nuestro Tiempo ~ Oikage
FanfictionDespués de perder el partido Kageyama se dirige al baño para aclarase las ideas, pero nunca pensó que Oikawa iría allí para pasarselo bien... Tal vez no lo saben pero están enamorados. Tal vez tienen miedo. Tal vez sienten mucha presión. O simplemen...