XX

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No, no fue su culpa que me demore, solo me dio un mini bloqueo, ya volvimos con las actus <3

PERO SIGAN COMENTANDO O ACTUALIZO DE AQUI A MEDIO AÑO 👹👹👹

Besitos

.

Ni-ki, quien había estado quedándose despierto para estar al pendiente de un dormido y enfermo Sunoo, al final si concilio el sueño, hace mucho que no descansaba tan bien.

Pero, la razón de su despertar no le agradaba para nada, despertó por escuchar toser a su omega, quien empezaba a respirar un poco entrecortado y rápido.

-Sunoo- dijo viendo mejor su rostro, viendo que este estaba sonrojado por la fiebre, sus mejillas, nariz y un poco de su frente estaban teñidas, también había comenzado a sudar.

Preocupado se levantó, con cuidado de no despertarlo, pero al hacerlo, Sunoo comenzó a temblar, así que se apresuró a agarrar la medicina y un vaso de agua.

-Ni-ki...- él plan del alfa había fracasado, Sunoo despertó.

-En un momento te pasaré un antigripal, te vas a sentir mejor- habló pasándole un vaso de agua y dos pastillas, luego de eso colocó la avena a calentar, Sunoo no había comido nada hasta ahora.

Mientras Sunoo estaba sentado en la cama, veía a Ni-ki caminar de aquí a allá colocando el calefactor y sacando ropa más cómoda para Sunoo, junto a poner a hervir un té de manzanilla.

-No te preocupes tanto, solo es un poco de gripe- Sunoo habló.

-No me gusta cuando no estas bien- se sentó a su lado suspirando -no me gusta cuando algo está mal, en especial contigo- acomodó su cabello, viendo que su fiebre había bajado un poco.

-¿Puedo hacer algo?- preguntó Sunoo mirando a Ni-ki.

-Siempre- respondió con una sonrisa y cuando vio cómo Sunoo se sentó en sus piernas y lo abrazó desde ahí, sus temblorosas manos se guiaron a su cintura y se aferró con ambos brazos a él, hundiendo su rostro en la curvatura de su cuello.

Luego de aspirar un poco su aroma, Ni-ki se separó unos cuantos centímetros hasta volver a chocar miradas.

-Sigo enfermo- Sunoo de nueva cuenta supo a dónde iba todo.

-Solo ahora, eso no me importa- y sin esperar respuesta, unió sus labios, de manera delicada, para luego profundizar un poco más.

Sintió cómo Sunoo empezó a mover sus labios, de un lado a otro, tratando de tomar el control de manera muy inexperta.

Sunoo si había tenido su primer beso antes, pero no es como si lo haya disfrutado, en este momento, sentía que la sensación que estaba sintiendo en ese momento, nunca sería superada.

Estaba equivocado.

Cuando Ni-ki sujetó su cintura y bajó un poco sus manos a sus muslos, impidiéndole alejarse, tomando el control, la sensación cambió.

Los labios de Ni-ki se movían tan bien sobre los suyos, sentía que iba a derretirse en ese momento.

Sus manos viajaron de sus hombros hasta la nuca de Ni-ki, sin intenciones de querer separarse.

-Abre los labios- Ni-ki ordenó con una voz suave y grave.

Sunoo lo hizo de inmediato.

En estas situaciones, ser dominado por el alfa no estaba nada mal.

Y cuando lo hizo, pasaron menos de dos segundos antes de sentir algo nuevo, húmedo que trataba de dejar su sabor en toda su cavidad bucal.

Cuando la lengua de Ni-ki encontró la de Sunoo, empezó una pequeña danza, sin lucha sobre tomar el control, Sunoo se la había otorgado en totalidad a su alfa.

Y de pronto, cuando sus cuerpos ya estaban rozando uno con el otro, el sonido del microondas hizo que ambos parasen.

-Tienes que comer- Ni-ki plantó un beso rápido en su mejilla  antes de levantarlo y dejarlo sentado en la cama.

Trajo la avena que estaba un poco (muy) caliente, puesto que estuvo ahí por tres minutos.

-Tendrás que cambiarte de ropa, no quiero que empeores.

Sunoo estaba por decir "sí" pero luego recordó algo, Ni-ki estaba a su completa y total disposición.

-¿Puedes cambiarme de ropa?- usó una voz suave, esperando que sea suficiente.

-¿Quieres que yo... t-te saque y te ponga esta ropa?- no sería la primera vez que le saca la ropa a alguien, pero es la primera vez que sus manos empiezan a temblar de sólo pensarlo.

-Si quieres, puedo sacarme yo la ropa- empezó a desabotonar su camisa.

Ni parecía que era más virgen que un santo.

Sunoo nunca hizo más que besar de picó a alguien, mucho menos pensar en tener relaciones, desde lo que pasó con su padre  esos pensamientos ni se aproximaban a su cabeza, le daba miedo de tan solo pensar en eso o recordarlo.

Pero cuando Ni-ki tocó sus muslos en medio del beso, no se sentía nada mal.

Vio cómo Ni-ki no podía apartar la mirada de su pecho desnudo y no se atrevía a tocarlo hasta que él dijera que podía hacerlo... para ponerle la otra ropa, claro.

-¿Me puedes colocar la otra?

-Sí...- levantó la camisa viendo que aún tenía la etiqueta de compra y desesperado por ponérsela, con sus manos rompió la cuerda de esta.

Podría haber sonado algo raro, pero Sunoo podría ver a Ni-ki romper etiquetas todo el día, eso fue muy... atractivo de alguna manera.

De manera delicada lo pasó por los brazos de Sunoo, abotonando al final.

-Falta el pantalón- Dijo Ni-ki antes de separarse.

-¿Quieres que--

-Yo lo hago- aún con sus manos temblando, desajustó el elástico de su prenda inferior, bajándolo, rozando suavemente sus muslos con sus dedos.

Aunque trató, no pudo apartar la vista de esos suaves y lechoso muslos, parecían tan... deliciosos.

Pero jamás tocaría a ese lindo omega sin que este se lo pidiese o le diese permiso.

Acomodó el cuerpo de Sunoo para poder colocarle el otro pantalón.

No sabía porqué estaba tan nervioso por haber hecho eso, si había tocado a varios omegas antes, si a todos trataba tan mal cuando los veía desnudos, pero cuando miraba solamente los ojos de ese lindo chico al frente de él, podía sentir cómo el nerviosismo se apoderaba de él, teniendo miedo de dañar su pequeña y hermosa complexión, viendo cada parte de él con una sonrisa.

Déjame amarte.





























Cami~

GENTLE - SunKi♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora