GENTLE - SunKi♡

XXX

Que rápido llegaron a los 200 comentarios.

Como ustedes fueron rápidos, yo igual lo seré 👺👺👺👺

PERO SIGAN COMENTANDOOOOO👹👹👹👹👹👹👹👹

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Sunoo salía de su habitación, eran las 8:30 am y no tenía clase hasta en la tarde, adormilado y con el rostro recién lavado y humectado fue a la cocina para prepararse el desayuno.

Algo estaba diferente, algo olía diferente.

Cuando entró a la cocina, vio a Ni-ki volteando un hotcake con varios ya hechos a un lado, también vio una canasta casi llena y cables que conectaban hasta el jardín.

-Buen día- Dijo Sunoo sin entender lo que pasaba.

-¡Ah!-Ni-ki se asustó, se suponía que Sunoo debía haber despertado en media hora, donde ya todo estaría listo.

-¿Pasa alg--

-Perdón- fue lo primero que dijo Ni-ki -yo... ah... en verdad no se cómo hacer esto- se acercó a él -perdón por no haber pensado en lo que tu querías cuando compré las Hamburguesas y perdón por pensar que era un efecto secundario del celo, sé que estuvo mal decirlo, siquiera pensarlo también estuvo mal.

Ni-ki había ensayado esas palabras toda la noche y esa mañana mientras cocinaba lo demás.

-Amo tu comida, cuando compré las Hamburguesas pensé en darte un descanso, pero no pensé que tu querías seguir haciéndolo- tomando un gran suspiro de aire miró sus ojos y dijo -quiero comer tu comida hasta el día en que tenga que morir, cada día, de cada semana, de cada año, de toda mi vida, quiero seguir comiendo lo que tu me preparas.

Se agachó hasta hacer una reverencia de 90 grados.

-Por favor, perdóname, esto no va a volver a pasar.

Sunoo se quedó en silencio, dejó de esperar una disculpa y pensó "¿tengo que dejarlo pasar?" Anoche cuando le dio el chocolate caliente y ahora, verlo así, oh, en verdad le gustaba Ni-ki.

-¿Qué preparaste para mí?- Sunoo dijo con una gran sonrisa en sus labios.

-Pancakes con refresco de naranja, también hice pastelitos y fresas con choco--

Cuando levantó su vista de la reverencia, lo primero que recibió fue a Sunoo abrazando su cuello, con sus labios sobre los suyos.

-Eres un tonto- Sunoo dijo cuando se separó del beso -un tonto tan lindo- se aferró al abrazo que tenía con Ni-ki.

-Ay, por favor, no vuelvas a dejarme de hablar, estaba por morir- Ni-ki abrazó la cintura de Sunoo, levantándolo del suelo, el omega vestido con una remera olgada y shorts cortos por el calor y Ni-ki con una remera negra y buzo del mismo color, con un delantal encima.

-Vamos a desayunar.

-Preparé algo- aún sin soltarlo, lo llevó al patio, donde había una casa de acampar y afuera de esta un casi preparado mantel de picnic -¿Te gusta?

-Sí, me gusta- miró a Ni-ki -en verdad me gusta.

Ni-ki, cuando pensó en hacer un picnic, tuvo la opción de hacerlo en un parque de la ciudad, con árboles más grandes que en su jardín pero luego pensó en Sunoo, este se cohibia cuando había mucha gente, no quería que su lindo chico se sintiera incómodo.

Y Sunoo solo pensaba.

Que tonto más lindo.

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-¿Practicaste?- Sunoo preguntó ya casi acabando los Pancakes.

-¿Se nota?- sonrió -estos son mi quinto intento, los primeros... fueron un asco- miraba a Sunoo comer tan tranquilo, con una sonrisa, a su lado.

Pasaron un rato más ahí, Sunoo estaba entre los brazos de Ni-ki, eso le daba una seguridad indescriptible y eso era lo que más le gustaba.

Entonces, Sunoo, creyó que era momento de decirle.

-Ni-ki- dijo el omega.

-¿Si?- respondió el alfa.

-¿Es cierto eso de que siempre quisiste una familia?- tomó la mano del alfa para jugar con sus dedos.

-Sí...

Ah... talvez sí es por el celo.

Sunoo sintió sus ojos llenarse de lágrimas, ayer, en la mañana, se hizo una prueba de embarazo, solo por si a caso.

-Ni-ki... yo no puedo quedar en cinta...

La prueba que se hizo, salió negativa.

Aún cuando su taza de fertilidad era alta, la más alta juntando el rut de Ni-ki, no pudo quedar en cinta.

-¿Ah?

-Yo soy estéril, Ni-ki- empezó a llorar, esta vez sintiéndose totalmente inútil para Ni-ki, se sentía vacío, sin nada que ofrecerle al alfa. -Lo siento...

-¿Porqué te disculpas?- preguntó Ni-ki tomando sus manos que cubrían su rostro.

-Y-yo... no p-puedo darte una familia...- lloraba tratando de cubrir su rostro, pero Ni-ki se lo impedía.

Ni-ki se quedó en silencio un momento, era verdad que quería tener un hijo o hija, pero familia podían ser solo dos personas y Sunoo era toda la familia que él necesitaba, él lo era todo.

-Tu eres todo lo que necesito- besó su frente -no importa lo demás, no me importa nadie más, tú eres mi todo.

-P-pero--

-Tu eres la única familia que yo necesito.

Y entonces Sunoo se refugió en sus brazos, él en verdad quería un hijo o hija, era su más grande sueño.

Sunoo se sentía estúpido, llorando por algo que ya sabía desde hace tiempo, ¿Porqué seguía llorando por algo que no podía arreglar? ¿Porqué se sentía tan inútil? ¿Porqué se sentí tan inservible? ¿Porqué se sentía insuficiente?

-Tú eres todo- Dijo Ni-ki -todo lo que yo alguna vez quise y querré eres tú, tú, tú y tú, eres como un sueño hecho realidad, eres y siempre serás tú, todo lo que yo tengo te pertenece a ti, tú eres lo más importante en mi vida.

Esas palabras, esas que le hacían pensar "me quiere, no importa qué" llegaron de repente.

-Así que no llores, verte triste, es como si le quitaran los colores a las flores.

Entonces en medio de lágrimas, Sunoo soltó una risa.

-En verdad eres el tonto más lindo de todo el universo.

Ni-ki le dedicó una sonrisa mientras lo tenía en brazos.

Entonces sonó el teléfono de Sunoo.

Ni-ki vio el teléfono y quién iba llamando.

-Ah, es Heeseung Hyung.

-¿Dónde conseguiste ese teléfono?

Cami~