XIII

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Sigan comentando perras preciosas 👹👹👹

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-Esta noche no podré llegar a cenar- Ni-ki avisó mientras desayunaban -tengo una pequeña reunión.

-Oh, bueno, talvez vaya a casa de Jungwon entonces- le sonrió.

-Claro que si- acomodó sus platos.

-Ni-ki- Sunoo habló -¿Crees que puedas enseñarme a conducir?

-Claro.. pero ¿para qué?- llevo sus platos al lavavajillas.

-Siento que siempre estoy molestando a Jake porque tengo que ir a clases en la mañana y en las tardes y luego debo volver... siento que esta cansado.

-Jake es madre, Sunoo, no lo obligué a hacer lo que hace, lo hace porque le gusta ser útil en su casa, pero tienes razón, deberíamos darle unas vacaciones ¿no crees?- revolvió un poco su pelo.

-Sí, quiero que vaya a ver el mar junto a Maki y Sunghoon, necesitan un descanso.

-Son una bonita familia.

-Sí, lo son...- suspiró y de pronto una duda creció en su cabeza -Ni-ki, ¿Puedo saber sobre tu familia?

-Ah...-Ni-ki se quedó pensando un poco, hace tanto pero tanto que no hablaba de esto.

-Si no quieres igual está bien- Sunoo pensó que había tocado un tema equivocado por el silencio que Ni-ki mostró.

-No, está bien, te contaré más de mi, para que me conozcas mejor.

Se acomodó un poco, suspirando, talvez tendría que cambiar unas cosas para que Sunoo no sospeche nada de su trabajo.

-Crecí con mi madre, mi padre y mi hermana mayor- empezó a contar -Papá era... malo- miraba el suelo mientras contaba -Todos vivíamos bajo las reglas de papá, mi hermana una vez se olvidó la llave de casa y tocó la puerta, ese fue la primera advertencia de lo peor, dejó a mi hermana afuera, por dos días, ella fue a casa de una amiga a pasar esas dos noches y cuando volvió, papá hizo como si nada hubiera pasado.

Sunoo escuchaba todo atentamente, por el lenguaje corporal de Ni-ki, sabía que era difícil para él.

-Mi papá comenzó a consumir bastante alcohol y un día golpeó a mi hermana, mi madre quiso defenderla pero la empujó contra la pared- suspiró -mamá siguió soportando los golpes por al rededor de tres meses, hasta ahí yo tenía doce años y mi hermana quince, éramos nosotros dos... solo nos teníamos a nosotros... al menos eso pensaba yo- tragó saliva -un día, luego de una discusión con mi papá, mi hermana esa noche de fue de casa y me dejó una nota diciendo que volvería por mi en tres días.... la esperé cuatro años y nunca volvió.

Sunoo escuchaba mientras veía el labio inferior de Ni-ki temblar.

-Siempre pensé que le había pasado algo malo- rió bajo -pero descubrí que se fue con su novio a Venecia y no tenían tiempo para mi- no podía mirarlo a Sunoo mientras hablaba -un día no pude soportar ver a mi mamá tan triste y tan agotada por todo lo que mi papá le hacía... así que trate de defenderla, aunque yo curaba sus heridas... era la primera vez que me puse en medio de mi padre y ella...

Un pequeño silencio se apoderó del comedor.

-Esa noche mi papá me golpeó hasta dejarme inconciente y cuando desperté, mamá había muerto- ahora debía mentir -papá trató de ahorcarme cuando mi a mi mamá, pero escapé de casa... fue entonces cuando empecé a trabajar, no tengo carrera universitaria, pero... ahora... trabajo en una empresa.

Le era tan difícil hablar de eso.

-Pasaron muchos años pero... aún estoy tan... decepcionado de mi mismo... por no haber podido proteger a mamá...

-Ni-ki...- Sunoo se paró hasta estar al lado de Ni-ki -eras solo un niño... nada de eso era tu culpa y tampoco podías controlarlo...- lo abrazó, estando él parado y Ni-ki sentado, haciendo que el rostro de Ni-ki choque con su pecho.

Ni-ki se quedó quieto por un momento, hace tanto pero tanto tiempo que no había sentido los latidos de un corazón en su oído, sonrió y sujetando la cintura de Sunoo en un abrazo, hundió su rostro en la curvatura del cuello del omega, descansando ahí unos eternos minutos.

Tu calidez logra descongelar mi mundo.

Al separarse, Ni-ki miró a Sunoo unos cortos segundos y el omega solo le dedicó una suave y dulce sonrisa, con duda en sus pensamientos, besó suavemente la frente de Ni-ki, viendo los alegres ojos contrarios después de hacerlo.

No hubo palabras ahí, solo un impulso del alfa, un pensamiento que le decía.

BESALO.

Toda su cabeza se lleno de esa palabra, y en al rededor de un segundo y medio, hizo chocar sus labios, sin movimientos, sin empujones, sin lujuria, sin dobles intenciones

Era solo un choque de labios, entonces ¿Porqué estaba sintiendo tantas cosas? Ni siquiera sabía el nombre de la mayoría de emociones que sentía, pero si sabía algo, estaba extremadamente feliz.

Soy tan estúpidamente débil ante ti...

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-Gracias por traerme- Sunoo sonreía a Ni-ki.

Después del beso, ambos se miraron unos segundos hasta que la alarma de Sunoo sonó, ya era hora de ir a clase y Ni-ki le ofreció llevarlo.

-No es nada, q-que te vaya bien hoy- estaba tan malditamente nervioso que hasta estaba tartamudeando.

-A ti igual... nos vemos más tarde- y antes de salir del auto, besó la mejilla contraria y escapó hasta el interior de su universidad.

El japonés solo sonrió y gritó en sus adentros.

¡¿Porqué tienes que ser tan lindo?!









3/?
















Cami~

GENTLE - SunKi♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora