Capitulo 38

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Al final el viaje resulto ser más agotador de lo que pensé que podría ser, para empezar, no podía hacer ningún tipo de entrenamiento o mejor dicho el entrenamiento que podía llevar a cabo era demasiado limitado.

Debido a esto tenia demasiada energía contenida en mi cuerpo sin forma de gastarla, no me quedo otra que recurrir al entrenamiento mental como forma de pasar el tiempo.

"¿De verdad estas entrenando así? Me parece que solo estas durmiendo"

El único problema es que cada vez que comienzo a sentirme a gusto con el entrenamiento mental, que sinceramente no es diferente a meditar, hay alguien que viene a distraerme cuando más concentrado estoy.

"¿No tienes nada mejor que hacer, Bulma?"

"Lo sabes mejor que nadie, en esta casa móvil no tengo nada que hacer salvo cuando algo se rompe"

"Entonces ve a ver si no hay algo que tengas que reparar"

"Obviamente no hay nada que arreglar ya que has estado demasiado tranquilo"

Mi rostro se crispo cuando escuche lo que Bulma dijo, no podía negar que ella tenía razón. Ella no tiene mucho que hacer aquí en la casa móvil, ella podría manejar, pero todos los que sabemos nos turnamos para eso.

Además de que todo lo que tuvimos que arreglar de la casa móvil resulte ser yo quien lo daño, principalmente fue por errores míos al medir la distribución del espacio, por suerte fueron cosas que se podían arreglar, pero aun así decidí no intentar entrenar mi cuerpo mientras siguiéramos aquí.

Esto ha hecho que Bulma tenga menos cosas que hacer para pasar el tiempo, esto ha hecho que ella se aburra como una ostra todos los días.

Al final me vi obligado a acompañarla durante el resto del día, ya que cada vez que volvió a estar en una posición de meditación ella me interrumpía.

Esto fue algo que se repitió todos los días que estuvimos viajando hacia la torre de Karin, sinceramente me sentía bastante complacido cuando vi la torre y la aldea ubicada en su base.

Esta aldea era a la que pertenecían los amigos de Goku, Bora el guardián de la torre y su hijo Upa, aunque eso sería en la historia del universo original de dragon ball.

Cuando estuvimos a algunos kilómetros de la torre, a una distancia que cualquiera habría sido capaz de ver que algo se acercaba a la aldea, los habitantes de allí se reunieron para interceptarnos.

Al frente del grupo había un hombre de piel bronceada, con grandes músculos tonificados y que media aproximadamente dos metros de altura. Vestía unos pantalones que creo estaban hechos de cuero, y tenía atada a la cintura una tela que parecía una especie de taparrabos, además tenia pintada con líneas rojas su rostro.

Si tuviera que adivinar ese hombre era el guardián de la torre de Karin, Bora.

Aunque Bulma y su madre se mostraban algo preocupadas, Tenshinhan y los demás estaban en calma, sobra decir que yo estaba igual que ellos.

Quien conducía era Yamcha, quien obviamente no tenía intención de detener la casa móvil hasta estar más cerca de la torre, pero nos vimos obligados a detenernos a unos 100 metros del grupo de Bora.

Bora había arrojado una lanza que se clavó en el suelo justo frente a nosotros, o sería mejor decir que Yamcha se detuvo justo antes de que nos diera a nosotros.

"Supongo que no son muy amigables, ¿No lo creen?"

Yamcha trato de aligerar el ambiente con un comentario medio en broma, pero yo estaba viendo esto desde otra perspectiva, Bora y su gente protegían la torre, y por cómo estaban las cosas en este mundo es seguro decir que esta forma de reaccionar era de esperar.

El Destino Alterado: Una Nueva HistoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora