Day off pt2

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El cielo del atardecer que en otros momentos se vería lindo estaba tapado por muchas nubes oscuras. Llovió un poco al mediodía y amenazaba con volver a largarse así que Lisandro y Julián se sentaron donde el techo podría cubrirlos.

Julián tuvo que reunir mucha valentía para decidir sentarse de frente al defensor, habría preferido que estén uno al lado del otro pero de todas formas tendría que verlo a la cara en algún momento así que...

Él sabía que estaba nervioso obviamente, pero no se percató de lo mucho que se notaba. Quiso jugar con sus dedos pero cuando vio sus manos estaba temblando. Sintió un poco de vergüenza y quiso esconderlas en el bolsillo pero Lisandro fue más rápido y las tomó para agarrarlas con fuerza.

Ese simple gesto logró calmarlo un poco, aprovechó para liberar sus pulmones de todo el aire que tenía contenido.

Luego de unos minutos el delantero habló.

—Es sobre Antony —empezó, tratando de enfocar su atención en las manos de ambos.

Licha arrugó un poco el entrecejo porque ahora, estaba más perdido que antes. Hubiera entendido si el menor nombraba a Cristian pero la mención del brasileño lo agarró desprevenido.

—vos dijiste que con él no funcionó porque estaban en situaciones diferentes ¿no? O algo así —alzó la vista, encontrando la mirada confundida de Lisandro.

—sí, dije que fuimos muy rápido y no estábamos en la misma sintonía —habló tratando de mantener la calma, no le gustaba ver a Julián tan nervioso.

—desde que lo dijiste estuve pensando en nosotros... porque si contamos los días-

—¿Sentís que vamos muy rápido? —interrumpió Lisandro pero se arrepintió enseguida porque no quería cortarle el hilo al menor —perdón, seguí.

—un poco sí —contestó bajito.

Licha quedó en silencio, pensó en soltar la mano ajena porque lo que escuchó no era tanto comparado a lo que su cabeza lo llevó a imaginar, ¿Julián le estaba poniendo un freno?.

Supuso que era el karma por haber herido (sin intención) al brasileño que tanto amor le había entregado en su momento.

Cuando aflojó su agarre, Julián se alertó.

Lisandro antes de hablar nuevamente, soltó un suspiro. Necesitaba calmar la tormenta que estaba desatándose en su interior.

—¿Querés que volvamos a ser amigos solamente? —preguntó inseguro, temiendo de la respuesta que podría darle Julián.

—no, no entendiste —negó rápidamente y se acercó un poco más —No sé cómo explicarlo, tengo miedo de que yo esté entendiendo mal todo, porque si con él sentiste que iban rápido ¿Qué pasa si conmigo también lo sentís? ¿Cuál es la diferencia? —preguntó rápido, alterándose un poco.

El menor habló tan apurado que a Lisandro lo mareó aunque en eso también interfería el hecho de que su cabeza no dejaba de pensar en que podría perder a Julián en cualquier momento. No podía pensar con claridad.

—la diferencia es que estoy enamorado de vos —contestó luego de pensarlo unos segundos, en el fondo se sentía enojado por tener que hacer esa confesión en un contexto tan extraño.

Julián no supo cómo responder, se sentía avergonzado por haber hecho tanto drama.

Cuando bajó la cabeza Lisandro agregó:

—Quería esperar un tiempo más para preguntarte si querías estar conmigo porque no quiero presionarte, yo siempre te visualicé como un futuro novio ¿tenías dudas de eso? —preguntó suave Licha, apretando el agarre de sus manos. Su cabeza comenzaba a doler.

Lo que quieras //Julián Álvarez, Lisandro MartínezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora