Capitulo14

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Chishiya

Lo vi hablando con un hombre de más o menos de su edad sabia que estaban discutiendo ya que eso se llegaba a notar a leguas el  único problema es que no podía escuchar mucho, estaban hablando en susurros y para mi mala suerte yo me encontraba a una distancia en la que ni podía ver el rostro de la otra persona viendo con algo de duda al momento en el que se separo del hombre con brusquedad mientras que el contrario se encontraba temblando tal y como una liebre, efectivamente tuvieron una discusión y Niragi lo amenazo, típico de él.

A la hora de acercarme cuando tuviera una buena distancia y procurar que no viniera nadie o nos vieras me acerque a él tocando así ligeramente de su hombro para que me mirara.

--¿Todo bien? -pregunté.

--Si... más o menos, solo olvídalo. -por su actitud podía deducir que tuvo la discusión por algún rumor, prefiero no insistir en eso. --¿Encontraste todo?

--Mjm, aunque no pude conseguir muchas vendas.

--No importa, algo es algo. -al momento de acercarnos a la playa él dio un ligero suspiro. --¿Quieres que te acompañe a tu habitación?

-negué a su oferta junto con un ligero sonidito. --Tengo que esperar a Kuina, pero gracias.

Él lo entendió más el hecho de que ya empezaban a llegar las personas así que tampoco podríamos estar tan juntos si queríamos mantener eso en secreto así que le entregue los medicamentos para tomar caminos distintos.

Pasaron unas dos o tres horas y ni siquiera veía a Kuina por ningún lado intentaba mantenerme neutro pero con solo estar buscando con la mirada era más que obvio, llegando a encontrar a Ann para acercarme a ella.

--Ann. -la llame ella solo me miro. --¿Y Kuina?

--Crei que estaba contigo.

--¿No fue contigo a los juegos?

--No, creo que ella fue con los militares. -carajo. 

--Esta bien, gracias.

Si Kuina esta muerta me mato. 

Pasaron un par de horas más me encontraba apoyado en la pared de siempre mientras que la seguía buscando con la vista sin siquiera encontrar ningún rastro de ella el cual ya me empezaba a preocupar ¿y como no? Si ella es mi mejor amiga prácticamente como mi hermana, Niragi se puso al lado contrario de la pared haciendo un ligero sonidito para que supiera que estaba solo.

--¿No aparece?

--La llevo buscando hace unas cinco horas ¿no la has visto?

--Ni siquiera a los militares con los que fue... ¿quieres que le pregunte al sombrero?

--Si, por favor.

--Iré a buscarlo después vuelvo contigo, debes de estar tranquilo a lo mejor solo se retrasaron.

O están muertos.

Maldita Kuina le dije que se cuidara y ahora me hace esto, Dios.

Escuche a los pocos minutos un carro estacionarse junto con un par de voces enderezándome un poco con la esperanza de verla entrar, quitándome un peso de encima al verla sana y salva aunque con un par de rasguños y golpes buscándome con la vista por lo que rápidamente me acerque. 

--Kuina. -la llame para que al menos me viera.

--Chishiya. -se veía cansada, era muy obvio.

--No sabes el susto que me hiciste pasar ¿te duele algo en especifico?

--Mmh, solo los golpes que tengo pero nada grave. 

--¿Estas segura?

--Lo estoy no te preocupes por mi ¿podemos ir a la habitación? Necesito descansar.

Tus ojos dicen NiragixChishiyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora