EL CIGARRILLO FUGAZ (En Proceso y Edición)

22. Un detalle significativo.

—¡Tía Julia! —exclamó el muchacho con una gran alegría— ¡Me alegro que estés bien!

—¿Por qué estoy aquí hijo? ¿Y tu padre? ¿Qué pasó? —interrogaba la mujer con una confusión indescriptible

—Tía... Tranquila... Ya te cuento todo... Pero primero deben revisarte para ver como estas...

En ese instante el hombre salió a toda velocidad a recepción encontrándose con varias enfermeras que atendieron con urgencia a Julia.

Wladimir automáticamente llamó a Antonio dándole la gran noticia mientras regresaba a la habitación de su tía.

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El reloj punteaba las cinco de la mañana, su tic-tac resonaba con fuerza en la tranquilidad de la habitación. Paula emergió del sueño con un dolor de cabeza punzante y una sacudida de incomodidad que la rodeaba como una manta pesada.

Su mente combatía por acordarse los detalles de la noche anterior, pero tan solo el recuerdo de Wladimir ayudándola a acostarse y su reconfortante mano entrelazada con la suya, seguida de un beso suave en su frente antes de dejarse llevar por el sueño, la transportó a aquel bello momento envuelto en una calidez inigualable

Al levantarse de la cama con cautela, sus ojos se posaron en el velador donde reposaba una nota escrita con letras cuidadosas junto a una tableta de chocolate, un regalo inesperado que irradiaba una delicadeza que llegó directo a su corazón.

"Tuve que regresar nuevamente a la clínica"

"Apenas acabe mi turno, volveré"

"Disfruta mi dulce favorito parecido al sabor de tus labios"

Con cariño

Wladimir...

Al acabar de leer la nota la sonrisa de la chica se aumentó de manera evidente olvidando por un momento todo lo que la atormentaba.

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Después de colocarse su labial favorito y llevar consigo algunas pequeñas pertenecías, Paula tomó la decisión de salir a despejarse paseando por la Plaza del Teatro y dando una vuelta en el mercado central.

Aunque sabía que debía reportarse con su mamá lo más pronto posible, primero quería recuperar un momento de estabilidad, para darle un alivio a su familia de que lucía bien, a pesar de todo.

Mientras se perdía en medio de toda la multitud mañanera de aquellos lugares, meditaba sobre todo lo que le había sucedido el día anterior intentando acomodar todas sus ideas en su cabeza.

Aunque todos sus pensamientos al principio estaban teñidos por el pánico y la ansiedad que le produjo verse como desaparecida en televisión nacional e internacional, parte de ella sentía un alivio inconmensurable.

Un alivio que le devolvió las ganas de seguir viviendo con más fuerza, al saber y finalmente entender que jamás fue abandonada por su familia. Quienes más bien, la buscaban sin descanso... Dia y noche, dispuestas a dar su vida por ella si fuera necesario.

Y ahora la añoranza de volverlas a ver tal, que no podía esperar más... Después de este momento de paz y reflexión buscaría la manera de contactar con su madre y hermana.