—Respondan por qué caminamos en círculos, dentro de un bosque que se ve tenebroso, aun siendo de día, desde hace como dos horas —dijo Joseph cansado, quien iba de último a comparación de sus amigos mientras caminaban siguiendo un sendero que solo Ginny conocía.
—¡No seas llorón, Jojo! —exclamó Eric, quien iba detrás de Efraim y de Ginny—. Además, solo llevamos una hora caminando.
—¡La hora más larga de mi vida!
—¿Quién diría que siendo uno de los mejores en el entrenamiento te cansas con una caminata en el bosque? Claro, como no está Cristina para que la impresiones...
—¡Oye, oye, que yo no bromeo con Mary!
—¿Quieres que cuente las veces que lo has hecho? Porque entonces nos llevaremos aquí mas de una hora.
—Calumnias.
—Si tienes hambre, Jojo, en mi mochila está la comida que preparaste esta mañana para este recorrido —intervino Efraim, casi lanzándole la mochila a su hermano.
—¡Verdad! Se me había olvidado.
Era día sábado, y como habían programado, estaban investigando los posibles lugares en donde se reunían los mortífagos, empezando por el más sencillo: el que estaba cerca de la casa de Ginny. La pelirroja se concentraba en el camino y el bosque que los rodeaba. Apenas escuchaba las charlas de sus amigos o se fijaba si estos le seguían el paso. Conocía el bosque como la palma de su mano, porque ahí pasó gran parte de su infancia. Los fines de semana sus hermanos la llevaban al Lago y recorrían esos mismos senderos por si querían llegar más rápido al pueblo muggle cercano, solo como espectadores.
Por ello estaba bastante bien ubicada, al contrario de sus amigos, que se guiaban gracias a ella porque el mapa que llevaba Efraim era bastante confuso. Aun así, Ginny no podía encontrar la ubicación de la casa de reuniones de los mortífagos.
—Por allí queda el lago que ya vimos. —Pensó en voz alta, señalando hacia el frente. Luego se giró en su puesto a la derecha—. Por allá queda la madriguera y tras esa colina está la casa de los Lovegood.
—¿Y qué hay por allá? —Efraim le señaló la dirección que pasaba por en medio de la casa de los Lovegood y el lago.
Desde donde se encontraban solo podían ver como el bosque se seguía extendiendo, cubriendo las colinas de más allá.
—No lo sé —respondió Ginny—. No he ido nunca en esa dirección.
—Pues por ahí se reúnen los mortífagos, según la dirección y el mapa de los Malfoy.
—¿Seguro que no te equivocas?
—Tengo memoria eidética, Ginny, es decir, que puedo recordar cada detalle del mapa en mi mente. Solo escribí las direcciones para que ustedes también tuvieran una guía, por si acaso. Sé que en esa dirección se marcaba un punto rojo.
Ginny le creyó, así que inició la marcha para cubrir el área vacía en el bosque, justo en medio de la casa de los Lovegood y el lago. Esa parte del bosque se volvía más espesa y oscura, gracias a los altos arboles que no dejaban pasar demasiada luz del sol. Daba la impresión de que estaba oscureciendo cuando apenas llegaba el mediodía. Ginny se dio cuenta de que los caminos por esa zona también se hacían menos visibles y supo que era una ubicación perfecta para reunirse los mortífagos.
Aunque, resultaba bastante riesgoso estar tan cerca de las casas de miembros activos de la Orden del Fénix.
Los chicos y Ginny siguieron avanzando hasta que la colina tras la casa de los Lovegood no fue visible y los arboles frondosos terminaban en una especie de claro, con una vieja cabaña aparentemente abandonada en medio. El sol que ahora podía brillar en su máximo esplendor hizo notar la forma tan vieja y desgastada en la que estaba la madera de la cabaña, las ventanas tapadas con tablones y se notaba que ninguna tenía cristal, y eso sin mencionar la puerta que se había salido de sus bisagras y se quedó semi abierta, colgada de lado.
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Su Debilidad [Harry y Ginny]
FanfictionGinevra Weasley, fue enviada por sus padres a Estados Unidos cuando tenía 14 años, muy a pesar de que por fin pudo entablar una amistad con Harry Potter, el chico del que siempre estuvo enamorada. Una año y medio después de la desastrosa batalla de...