Un Hijo De obito ||•obikaka•||

Capítulo 11

Esta vez se encargo de quedar totalmente desnudo. Obito desviaba la mirada, tratando inútilmente de no caer en la tentación.

—Bakashi, no creo que... —Las manos de kakashi en sus pectorales lo sacaron de su balbuceo. Vio el rostro sonriente del peli-plata. Habia picardia en sus gestos—. Kakashi...

—Relajate, obito. —El Omega desplegó su aroma—. El estrés no nos esta ayudando.

—Pero...

—Necesito que cierres los ojos. —Pidió el Omega. Obito dudo—. Por favor. No avanzaremos sino confías en mí.

El uchiha tardo unos segundos en cerrar los ojos. Cuando lo hizo, al instante, sintió la suavidad de los labios de kakashi. Retrocedió, pero kakashi lo abrazo por el cuello.

—¡Mgh! —obito tomó la cadera del Omega y trató de alejarlo—. Ka... Kakashi...

El Omega introdujo su lengua en la boca del alfa. Obito dejó de resistirse para jalar con sus manos la cintura ajena y pegarlo a su cuerpo.

Ambos estaban devorandose. Obito tomó el mando en el beso, dejó que kakashi recorrerá su cuerpo con sus manos ansiosas, mientras que las de él permanecían estáticas.

—Tócame... —kakashi mordió su labio inferior—. Hazlo, obito.

Ante la orden del Omega, obito bajo sus manos a los glúteos bien proporcionados de kakashi. Los manoseo, los separó y los acarició. Su Alfa estaba enloquecido con su aroma, su piel, su rostro, su mirada.

Obito estaba enloqueciendo por kakashi.

— kakashi... — obito alzó los brazos cuando kakashi le sacó la camiseta. Volvieron a enredarse como si el simple hecho de estar un poco separados fuera una tortura.

Con extrema facilidad, obito lo cargo por las piernas y en un choque brusco lo recargo en la cama. Kakashi jadeo ante la agresividad.

—Soy tuyo, obito. — kakashi mordió el cuello del Alfa queriendo marcarlo como su propiedad—. Y tu mío.

Obito dirigio los dedos de su mano derecha a la entrada anal del Omega mientras desplegaba la testosterona pesada y adictiva.

Kakashi respiraba caliente, aspiraba con necesidad, necesitaba de ese Alfa, necesitaba tenerlo entre sus piernas y que hiciera un desastre de él.

— obito... — kakashi tomó su rostro y lo obligó a verlo a los ojos como era costumbre—, mi Alfa.

Obito perdió la noción después de eso.