Con los ojos puestos sobre el pizarrón, Sasuke fingía concentración de manera casi profesional, era muy común en él aburrirse y comenzar a sumergirse en su mundo. Su cabeza yacía apoyada sobre su mano, que su a vez estaba sosteniéndose sobre su codo encima del pupitre dónde estaban sus hojas.
Suspiró con pesar al ver en el reloj de su diestra que todavía faltaba bastante para salir. Con un movimiento silencioso se levantó del pupitre y seguidamente se dirigió hacia la salida.
- Necesito ir al baño - informó a su profesor, el cuál respondió con un asentimiento indicándole que podía retirarse.
Ese día, el sol estaba bastante intenso a pesar de encontrarse en invierno. Era molesto, si se lo preguntaban. Caminó por los pasillos iluminados cálidamente con pereza yendo hacia el área de los baños.
Ese día estaba particularmente aburrido, en comparación a muchos otros que tampoco fueron muy interesantes que digamos. En realidad, Sasuke podría admitir que hacía algunos que se encontraba en una especie de crisis, que le provocaba encontrarse desanimado con sus proyectos, entre otras cosas. En ese momento no sabía exactamente a qué se debía, pero estaba seguro que más adelante podría solucionarlo.
Sus ojos divisaron muy cerca de la entrada al baño, la puerta del galpón con las cosas de limpieza, rodeado de mesas y sillas encimadas, que le habían sido de ayuda para disimular su misión de vigilancia el día anterior. Al recordar los acontecimientos, su mente tuvo una pequeña idea. Por lo que, en lugar de entrar a los baños se encaminó hacia el salón de la pelirrosa, pues sentía curiosidad de que se encontraría haciendo en ese momento.
Yendo en diagonal hacia su destino, recordó la incómoda conversación que tuvo con la chica que en ese momento tenía en la mira. Durante el resto del día anterior, se había quedado pensando en la confesión de ella... y le resultaba bastante raro.
Una persona que se esfuerza tanto, no puede terminar tan mal. En un momento había llegado a la conclusión de que ella había mentido, para auto compadecer su inaptitud, pero al momento de escucharla no había sentido ni por un segundo que estuviera mintiendo.
En ese preciso momento, Sakura se encontraba totalmente sumida en una lectura de un enorme libro que tenía en sus manos. Sasuke apreció lo delicada que eran las mismas, estaban bien cuidadas, tenía varios anillos plateados, y estaba parcialmente cubierta por la manga de un suéter gris que traía puesto. Se veía intensamente concentrada como para notar su presencia, o como para notar cualquier cosa a su alrededor.
Solo la vio salir por fin de las letras, cuando el también pudo oír la voz de Kurenai alzarse para dar una notificación.
- Como saben, dentro de poco tengo que armar un informe para dejar sentado el avance de cada uno en lo que lleva del año. No tengo las suficientes notas de todas para cerrarlo, es por eso que voy a tomar un examen para aquellos alumnos que necesiten rellenar.
Algunos murmullos se hicieron oír.
- De acuerdo, hay cinco alumnos que precisan de esto así que presten atención cuando diga sus nombres porque no los voy a volver a decir. Cada uno es responsable de su situación - Nadie más habló, por lo que la mujer prosiguió -. Ino Yamanaka, estás bastante mal hija, no voy a mentirte, pero eres lista. No vayas a desperdiciar ese potencial.
Un discurso bastante típico, pensó él azabache mientras oía atentamente desde su posición. Estaba seguro que mencionaría el nombre de la pelirrosa.
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THE LINE | +18 | Sasusaku [En Emisión]
Fiksi PenggemarAU. ❌ Leer aclaraciones y advertencias!¡ ❌ Fanfic por completo de mi autoría. SINÓPSIS: La línea que separa el amor de la obsesión. La línea que distancia sus destinos. La línea de espacio antes de caer al precipicio. Es tan fina como frágil. ____...