26/02/22
Desperté con un dolor tumbando mi cabeza. Mire a mi alrededor y vi a Gabriel junto a mi, y su mano estaba en mi cintura. Trate de salirme pero no pude.
—No dejare que te vayas—me dijo sin abrir los ojos.
—Me tengo que ir— dije en voz baja.
—Entonces te llevare yo a casa— abrió los ojos— que lindo verte por las mañana.
—Levántate y vamos— le di un golpe en el brazo y sonreí.
Gabriel no demoro mucho en despertar por completo. Se levanto de la cama.
—Buenos días hermosa— se acercó demasiado a mi.
—Bueno días guapo— con una mano tome su mentón— vámonos— lo moví de un lado a otro.
Gabriel solo de forma llamativa y me siguió.
Cuando por fin estábamos en el auto, él conducía, coloco una mano en mi pierna.
—Te desapareciste un rato— me miro unos segundos — ¿Dónde estabas?
Tuve un flashback, los besos que me dio Pedri, lo que sentí cuando lo hizo.
—El lugar era grande, me perdí— esta vez no mentí.
—Melina, se que es poco tiempo que nos conocemos pero— se quedó en silencio unos segundos— ¿Qué somos exactamente?
—Esto se lo debes decir a todas luego de salir con ellas— me mire pon un espejo.
—Lo digo en serio— nos detuvimos en un semáforo— ¿Qué soy para ti?
—Eso te lo tienes que preguntar tu, ¿Qué soy yo para ti? ¿Una amiga? ¿Una amiga con derecho? ¿Tu amante?— conectamos miradas— si me preguntas ahora mismo no sabría definirlo, nos besamos y tenemos ganas, pero ¿Quieres tomarte el tiempo de conocerme o solo es momentáneo?
—Quiero conocerte— siguiendo conduciendo— y ver que puede suceder más adelante.
Ese "ver que puede suceder más adelante" ya lo conozco.
—Esta bien, que sea así entonces— concentré mi mirada en el camino, ya estábamos cerca.
—Bueno entonces ¿te parece si te invita a cenar hoy?— detuvo el auto.
—Me parece que estaría bien, pero debo organizar unas cosas para mañana— conectamos miradas— por esta vez lo pasamos para otro día.
—Esta bien, pero solo por esta vez— me iba a bajar hasta que me tomo del brazo— ¿tan rápido te quieres ir? — se comenzó a acercar a mi.
Me quedaba mirando sus ojos y se me venia a la mente el beso con Pedri. Gabriel no demoro mucho en unir nuestros labios, un beso algo apasionado, correspondí pero mientras mis ojos estaban cerrados solo pensaba en Pedri.
—Nos vemos mañana, Vargas— dijo a penas nos separamos.
—Nos vemos mañana, Gabriel— baje del auto y me metí al departamento
Al entrar al departamento vi a la parejita.
—Buenos días a todos— dije al entrar.
—Hola preciosa—me saludo Angie.
—Hola Meli— me dijo Pablo que estaba al lado de Angie.
—A dónde van?— dije curiosa.
—A pasear un rato— me dijo Angie— queremos salir.
—Pero siempre con cuidado—dijo Pablo tomando su mano.
—Claro, no quiero que toda la prensa española este acosando a Angie— sonreí— vayan a divertirse.
ESTÁS LEYENDO
EL DESTINO NOS UNIÓ POR UN MOTIVO| pedro gonzález
RomanceEl destino une a las personas por un motivo, teniendo una conexión excelente , pero muchas veces en una historia de amor siempre existen dificultades. Esta es la historia de Melina Vargas, una estudiantes de arquitectura, y Pedri González, un jugado...