Dormí profundo y quién no lo haría después de ese cóctel, pero se me hacía tarde para ir al trabajo, me arregle rápido para salir.
— Ale, ¿Qué haces aquí? —tenía una cara de confusión.
— Mateo, hola, disculpa llegué tarde.
— Pero si tú no trabajas hoy, es más, te dieron una semana de descanso obligatorio.
— Pero por qué si ya estoy bien.
— No importa, son políticas del hospital, ve a tu casa descansa, aprovecha de salir con amigos o ten una cita.
— Ahm, vale, no lo había pensado.
Si no he salido con nadie desde … ¿Desde cuándo?
Una semana… que haré yo con una semana libre… no recuerdo cuándo fue la última vez que tuve tanto tiempo libre. ¿Y si limpio el apartamento? Pero está limpio, tal vez ¿remodelar? Termine remodelando el apartamento, viendo tres series completas y solo habían pasado tres días, ya no encontraba qué hacer, el cuarto día salí a caminar y prácticamente hice un maratón, por lo mismo el quinto ni me pare de la cama al sexto se me ocurrió algo, ¿Y si voy a visitar a Máximo? La verdad me dió mucha ansiedad y terminé no haciéndolo pero al otro día no lo pensé y fuí.
Este lugar no ha cambiado nada
— Buenas que se le ofrece.
— ¿Julio? ¿Eres tú?
— Ale, wow tanto tiempo, vienes a visitar a Máximo.
— Exactamente ¿Está entrenando a alguien o está en la oficina?
— Ahm entonces…
— Ale qué alegría verte de nuevo.
— Zuemy otra vez qué curioso el destino.
— No lo creo, vienes por lo de Máximo ¿Cierto?
— Zuemy, no sabe nada. —la cara de Julio no era buena.
— ¿Saber que?
— Vamos a la oficina, Dori te explicará. —casi con lágrimas en los ojos lo dijo.
— Ale qué alegría verte, Máximo se alegra mucho.
— Mamá, no sabe.
— Dori, estos dos no me quieren decir que pasa. —ya mi tono era de angustia.
— Ale, lo que pasa es que Maximo ha estado enfermo y recibimos noticias del médico que lo atiende. No cree sobreviva está semana.
— ¿¡QUÉ!? —sentía el mundo caerse encima.
— La verdad no le hemos dicho a Máximo, queremos que pase unos últimos días alegres. De verdad se que es difícil pero si puedes no hacerlo notar cuando lo veas, solo verte se alegrará y pues si te ve mal no creo lo pase tan bien.
Me derrumbé, Máximo fue como un padre para mí y me estaban diciendo iba a morir además que fingiera que todo estaba bien antes de verlo. No podía dejar de llorar, me dejaron solo y fueron a ver a máximo mientras me quedé solo en la oficina llorando controladamente tratando de detener el llanto pero no podía, Dori fue varias veces a ver si ya estaba bien pero solo empeoraba. Después de unas hora ya cerraron las canchas y fue a buscarme Zuemy.
— Ale, vamos te acompaño a tu casa.
— Está bien. —no podía decir frases largas sin llorar.
Llegamos a mi apartamento y seguía en mal estado.
— Tienes a alguien te acompañe. —tenía un rostro de preocupación muy evidente.
— No, estoy solo.
— Está bien, estoy aquí ahora.
*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*
Buenas mi gente bella de Wattpad, pues la historia no sé hoy no hay palabras bonitas.
Vamos bien con #Fictober23 la frase de hoy "Está bien, estoy aquí ahora"
Y ya saben si les gusto voten, comenten y nos vemos mañana.
ESTÁS LEYENDO
El juego de mi vida
General Fictionuna historia dramática de la salvación y perdición de Ale nuestro personaje principal que encontrará una familia en su equipo pero la vida no lo preparo para lo que tenía que afrontar, ¿podrá su nueva familia ayudarlo?