11.

541 41 2
                                    

En cuestión de segundos Jungkook ya estaba delante de su esposo, lo tomó del ante brazo con fuerza, y Jimin cerró unos segundos los ojos, por la sorpresa y el miedo que poco a poco se apoderaba de él.

—¿Así que te gusta andar de chismosito con mis suegros, no? — cuestionó y apretó más su agarre en el brazo de Jimin.

—No... Jungkook... y-yo - la voz de Jimin es inestable, y él tiembla un poco en su lugar - Te juro q-qué yo no les dije nada, mi amor. Lili te escuchó y, ya sabes que los niños son muy sinceros y no tienen filtros... ella les dijo lo que escuchó, pero yo se los negué! Te lo juro! - decía con evidente desesperación en su vocesita.

Jungkook soltó una carcajada. Y su rostro volvió a ser serio poco después.

—¿Me crees tan estúpido? Te puedo creer lo de que ella les dijo lo de que te llame "prostituta"cuándo me enoje contigo la otra vez, pero, ¿Me vas a decir que Lili también les dijo lo del supuesto "golpe" que te di? ¿eh!? - alzó la voz y atrajo de un jalón en cuerpo de Jimin al de él, teniéndolo a sólo centímetros de su rostro.

—N-no... yo... yo trate de ocultarlo, pero ellos lo notaron. Pero, yo les dije que había sido un accidente. Aunque no lo fue... sí me golpeaste... — murmuró lo último, pero Jungkook lo escucho. Lo soltó y se alejó un poco de él, y puso una mano en su propia cadera, mirando con desdén a Jimin desde su lugar.

—Eres un exagerado. No te golpeé, simplemente te di un manotazo... Además, tú me provocaste en un primer lugar. No conforme con salir vestido cómo un fácil a esa reunión fuiste y bailaste con él estúpido de Kim, y además me gritaste ese día fuera del cuarto de la niña... todo fue tu culpa — Dijo Jungkook, obviamente justificando sus acciones y además minimizando su maltrato hacia su esposo. Haciéndose la víctima y culpando a Jimin.

—Pero... tú dijiste que nunca me volverías a lastimar días antes - dijo Jimin por lo bajo. Con dolor y desilusión en su voz.

—Pues, sí. Pero, yo pensé que serías un buen esposo. Yo siempre he sido un buen esposo contigo Jimin. Pero tú sólo te fijas en mis errores y no en los tuyos. Siempre me quieres hacer ver cómo él villano de esta película. Y no, tú tampoco eres perfecto — expecto Jungkook. Logrando su respuesta objetivo, haciendo qué Jimin se sintiera culpable de todo, una vez más.

Los ojitos de Jimin brillaron y, una lágrima brotó de uno de sus ojitos de iris grises.

—Tienes razón... tú no eres el único que se equivocó. Yo también debí avisarte que ese día que iría con mi mejor amigo. - dijo Jimin, a punto del llanto — pero, pensé que no sería un gran problema. Lo siento - Dijo.

Jungkook le sonrió un poco. Y lo atrajo a él en un abrazo fuerte. Beso su cabello, con ternura. Jungkook era una cosa muy extraña, podía ser tan malo como la carne de cerdo, y tam bueno de repente como un pan de Dios. Trató de consolarlo.

—Te perdonó, mi amor. Ya no recordemos eso, de acuerdo? -dijo y Jimin asintió aún en sus brazos - Te voy creer lo de que todo fue un mal entendido hace rato con mis suegros y que tú realmente no les dijiste nada, ¿Okay? Pero sólo con una condición — dijo con dulzura.

—¿Cuál condición? — dijo Jimin. Mirándolo ahora a los ojos.

—¿Perdonarás mis errores de esposo, y seguiremos siendo la familia feliz de siempre, mi amor? - pidió el azabache, y Jimin asintió. Sonriendo.

De repente le robó un beso tímido a Jungkook. Alegre.

—¡Por supuesto, mi amor! ¡Ambos perdonemos nuestros errores y sigamos adelante juntos! - dijo feliz y un tanto eufórico.

Jungkook asintió, Jimin era tan fácil de manipular a su antojo y de hacer feliz. Jimin estaba a sus pies. O eso pensaba Jungkook.

Jungkook de repente recibió una llamada, se alejó un poco de Jimin y miró al número telefónico, un poco nervioso.

—¿Quién es, amor? ¿No vas a atender la llamada? - preguntó curioso Jimin.

Jungkook asintió y paso saliva discretamente.

—¡Claro! Dame un momento, ¿De acuerdo? - pidió y se alejó unos metros de Jimin para atender la llamada.

A Jimin le pareció un poco rara su actitud, y discretamente trato de escuchar lo que Jungkook hablaba por teléfono.

—¿Qué quieres, Lisa? Estoy en casa... te dije muy claramente que no me marcarás hasta que llegará a la oficina de vuelta - dijo Jungkook por línea molesto, pero en un tono bajo, tratando de que Jimin no lo escuchará. Aunque Jimin se hizo el distraído en su propio celular, sí escucho todo.

—Uy, qué genio. Pensé que... tal vez te gustaría repetir lo mismo de ayer... - dijo la pelirroja por el otro lado de la línea telefónica, en un tono seductor y burlón s su vez.

"¿Repetir qué? De qué habla?" Se preguntó Jimin al escucharla con dificultad, pero escucharla al final de cuentas.

—Pues pensaste mal... Eso fue un error. No debió haber ocurrido nunca - dijo el azabache aún en tono bajo que Jimin por eso y por la distancia que les separaba apenas y le entendí algo. La risa de Lisa se escuchó desde la otra línea. Jungkook noto que Jimin no están tan lejos de él y se fue a la cocina a terminar la llamada.

—Pues eso no decías ayer en la noche... pero bueno. Está bien. Supongo que el señor ni está de humor ahora mismo... Así que, te hablaré mas tarde o mejor aún, mañana en el trabajo. Nos vemos, cariño - dijo Lisa y colgó. Jimin no logró escuchar lo último, pero aún así empezó a dudar.

Jungkook terminó la llamada y, regresó a donde estaba Jimin con una leve sonrisa y un poco de incomodidad.

—Mi amor, era mi padre... nada importante, sólo quería saber algo de una junta qué habrá mañana - mintió - Y, cambiando de tema, te traje una sorpresa, pero está en mi maleta que está en cocina... ¿Quieres saber de qué se trata? — Cambio de tema ágilmente. Jimin nunca había dudado de su esposo anteriormente, pero... en ese momento sentía que Jungkook le estaba ocultando cosas, más porque pillo su mentira. No había con su padre cómo le dijo.

Hablo con Lisa. Lo que no sabe es sobre qué... tenía ganas de preguntarle, pero dudaba que Jungkook le dijera la verdad. Así que simplemente de momento decidido ignorar esa intuición y asintió a las palabras de su esposo. Lo siguió a la cocina y abrió un paquete que su esposo le había entregado.

Era un collar de oro. Con las iniciales de Jungkook de dijes. "Jk".

Jimin sonrío, un poco extrañado por el extraño obsequio, pero feliz.

Jungkook le ayudo a ponérselo.

—¿Te gusta, mi amor? — Preguntó.

—Sí. Es muy bonito... aunque, ¿Por qué tus iniciales? — no pudo evitar preguntar.

—Bueno, lo mandé a hacer de ese modo porque quiero que siempre me tengas en tu mente y qué, los demás sepan de qué tienes dueño ya — afirmó en un tono un poco bromista al último. Y dió un casto beso en el cuello de Jimin.

Jimin sonrío un poco incómodo.

Lo cierto es que, en realidad lo único que le interesaba a Jungkook es que Kim Taehyung lo viera. Quería restregarle de cualquier manera que Jimin es suyo. Únicamente de él. Pero obviamente nunca le diría eso a Jimin. Su lindo esposo.

...

Toxic [Jikook] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora