Cosas de la vida.

Capítulo XV

Capítulo XV:

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COSAS DE LA VIDA

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La playa.

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Sasuke.

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No podía dormir. Escuchaba sus gemidos cada vez más fuertes, parecía que estaba en mi propia habitación. Apreté la almohada sobre mi rostro y me levante de mi cama.

Los suspiros de Sakura se hicieron aún más audibles cuando pase frente a la habitación de mi hermano.

Baje a la cocina y me serví un vaso de leche. Me senté en el mármol de la mesada de la cocina mientras lo tomaba. Eran las tres de la mañana, las clases habían acabado hacía dos semanas y ella había empezado a venir dos noches por semana a torturarme.

―Sasuke―

―No enciendas la luz―

Ella alejo su mano del interruptor e ingreso a la cocina en penumbras. Llevaba una remera holgada color negro que suponía sería de mi hermano mayor, se sentó a mi lado sobre la mesada de la cocina sin despegar los ojos de mí, yo le alcancé el vaso de leche y sentí la electricidad recorrer mi cuerpo cuando nuestros dedos se rozaron unos segundos.

―¿Qué haces aquí en la oscuridad? ― Me preguntó en voz baja y se llevo el vaso a los labios.

La realidad era que no solo no podía dormir porque mi hermano se estaba cogiendo a mi mujer en la habitación de al lado sino porque hacía una hora y media había consumido medio gramo de cocaína. Yo no le conteste solo clavé la vista en la puerta de la cocina esperando que Itachi entrara en cualquier momento. Fue ella quien se acercó a mi, se bajo de la mesada de la cocina ubicándose entre mis piernas y dejo el vaso de leche a medio terminar a un costado.

―¿Mi hermano no te deja satisfecha? ― Me burle observándola a los ojos.

Ella se acercó más a mí, apoyo sus manos en mis piernas y acaricio mi nariz con la suya.

―Yo jamás llego al orgasmo con tu hermano―

No tuvo que decir nada más. Porque no alcanzó a volver a abrir la boca cuando le había metido la lengua hasta la garganta. Me baje de la mesada sin dejar de besarla, apreté mis manos en su cintura apegándola mas a mi y la obligue a sentarse sobre la mesada. Mis manos se metieron por debajo de la remera quitándole la ropa interior de prisa y me acomodé entre sus piernas, pase una mano por su espalda baja apretándola más a mi y con la otra mano la tome por la nuca para que nuestros rostros quedaran casi pegados. Sakura sonrió pasando una mano por mis hombros y la otra apretó mi brazo que la tenia tomada de la cintura, envolvió mi cadera con las piernas acercándome mas a ella.

―Aun te puedes arrepentir― Le di la última oportunidad.

―Solo cógeme, Sasuke―

 Y la penetre. Yo no usaba condón con ella.

Sakura gimió muy fuerte y puedo jurar que toda la casa la escucho. No me importo que Itachi bajara en ese momento, ni siquiera me importo que mi padre o su esposa nos vieran.

Yo lo único que quería era hacer acabar a Sakura Haruno.

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