Límite Corrompido

CAPÍTULO 6

-Kwang: Déjame pedirte un último favor, ayúdame a entrar a trabajar al nuevo club de lo que sea.
No esperaba una respuesta inmediata, pero solo soltó una carcajada tan fuerte que llamo la atención de las personas que pasaban.
-Jaeil: ¿Qué piensas hacer así?, aparentemente estas bien pero te veo más demacrado de lo que recuerdo. Necesitas mucha energía para entrar a la boca del lobo y parece que no la tienes, su unión es más fuerte de lo que pensaba o más bien es que ¿te sientes endeudado?. Huye ahora que puedes y empieza una nueva vida, tu querido hermano va a estar más que bien por lo menos ya no tendrás a nadie que te estorbe.
-Kwang: Dejémonos de sentimentalismos y mejor dime que quieres a cambio.
-Jaeil: Esta bien respeto tu decisión entonces que te parece ser mi informante, sospecho que está planeando algo más grande de lo que dice. Déjame hacerte una última pregunta todo tu esfuerzo que vas a poner en esto ¿va a valer la pena?
Recuerdo que me puse de pie y con una mano en mi bolsillo aguantando no romperle la cara por su insolencia, respondí con una mirada ardiente en mis ojos.
-Kwang: Te aseguro dos cosas, la primera Daewhi va a regresar a mi lado y la segunda vas a tener lo que necesitas. No pienses de más mejor de agradecimiento te voy a dar un consejo, cuida tú también a esa persona especial o lo perderás como yo.
-Jaeil: ¿Enserio? Hasta donde se no tengo una persona especial.
-Kwang: Si te sigues engañando el que pierde tiempo valioso eres tú no yo. Seguimos en contacto.
Salí de ahí con un aire que me rozaba la cara era tan reconfortante recuperar la balsa que sentía perdida, me pregunta si esta era la segunda oportunidad que tanto pedía pero creo que era demasiado pronto para celebrar.
El tiempo para prepararme era corto, Shide se movía más rápido de lo que había pensado la nueva información que había obtenido era que sacaría a Hyun junto con otros tres en un mes a más tardar por enfermedad. Vendí el departamento en donde vivíamos, eran tantos recuerdos que teníamos ahí que no podía seguir soportando el dolor de abrir la puerta y extrañarlo cada vez más.
Shota me ayudó a empacar le conté ciertos detalles de lo que planeaba hacer y como era de esperar sabía que estaría a mi lado, conseguimos un buen apartamento cerca de la zona donde abriría el club, durante el día iba a diferentes lugares con tal de tener vigilada toda la zona pero su mayor actividad era de noche.
Mientras esperaba a que mi plan siguiera su curso no pude evitar recordar las veces en las que me aislaba de mi entorno, cuando Daewhi lo notaba corría a llevarme algo de comer o sacaba un pequeño dulce de su bolsillo.
Me preguntaba día y noche cuál sería su reacción al verme, ¿se pondrá feliz o me mirará con repulsión? Sé que lo abandoné y que el odia la deslealtad, pero si solo supiera la razón del porque actué así entendería que lo hice por nosotros pero el miedo se vuelve más grande cuando pienso que mi explicación no será suficiente. Me inundaban los pensamientos de pensar que jamás me perdonaría, el que me hayan tocado tantas manos le causaría asco trataba de ignorarlos pero sentía como me devoraban cada vez más.
El viento frío, las bebidas calientes, las personas con abrigos solo anunciaban el inicio de la temporada de invierno. Entre las cosas que empacamos me encontré con la maleta donde estaban sus cosas, saque su gabardina favorita me gustaba como se veía porque le remarcaba su figura y al mismo tiempo lo hacía ver elegante. Destacaba donde quiera que fuera, me la puse como excusa para cubrirme del frío pero en realidad quería oler su aroma y tener su calor cerca.