𝕊𝕆𝕃𝕆 𝕋𝕌́ ✔︎𝚈𝚞𝚗 𝙺𝚊𝚕𝚊𝚑𝚊𝚛𝚒✔︎

27

No, definitivamente no me dió la enhorabuena.

-Leah, sabes que no puedes tratar así a los clientes-

-Oh vamos Armando, a ti te ha sacado fe tus casillas varias veces-

-Tienes razón, pero con tu comportamiento lograrás que estemos en voca de mucha más gente, por lo que tendremos más ojos puestos en nosotros-

-¿No viste como se fue? Seguro ni le importó-
Armando no me respondió después de decir esta última frase, soltó un suspiro y vi como se quedaba mirándome con preocupación en sus ojos, ¿qué sabía él que yo no?

-Que sea la última vez- Dió el tema por zanjado y decidí levantarme de aquella silla en dirección a la puerta del despacho.

-¿Todo bien lubia?- Yun volvió a pasar el brazo por mis hombros cuando íbamos bajando las escaleras, nuestro turno había terminado.

-Hay algo que Armando sabe, y que no quiere que lo sepamos-

-Segulo' son tontelia' Leah, ya sabe' como eh el viejo- Le dí un suave codazo al escucharlo, no me gustaba que se metieran con Armando.

-Quizá tienes razón, son tonterías-

-Pol supuesto, Kalahali siemple tiene lazon-

-Egocéntrico-

-Y aún así me quiele-

-¿Quién ha dicho que yo te quiera?-

-Tus ojos- Casi me atraganto al escuchar eso, Yun siempre se quedaba con la última palabra.
Comenzó a reírse de nuevo al ver mi sonrojo cuando llegamos a la puerta del taller.

-No te enfade' lubia, ¿confías en mí?-

-Amm ¿sí?-

-Voy a fingil que no te he visto dudal. Al caso, sube al coche.-

-¿Me vas a secuestrar? Porque por si no lo sabes, te he derrumbado varias veces Kalahari-

-Si si si, sube al coche anda-

Media hora después estábamos en una pardera, sí, pero con vistas a casi toda la ciudad de los Santos.

-¿Este es tu plan? ¿Descuartizarme y enterrarme?- Yun rodó los ojos divertido.

-¿No puedes ser un poco lomantica?-

-¿Y tú si lo eres?-
Tiró de mi brazo hasta que quedé sentada junto a él en el césped.

-Es... precioso- Mi vista estaba clavada en el paisaje que teníamos delante.

-Hay otla cosa más bonita-

-¿Cuál? Estamos viendo toda la ciudad-
Sentí un suspiro al lado de mi cabeza, giré esta encontrándome con los ojos de aquel asiático.

-Oye Leah...-

-¿Sí?-

-No me mates por lo que voy hacel-

-¿A qué te refie- No pude terminar la frase cuando sentí el impacto de sus labios contra los míos, mi cerebro tardó en procesarlo varios segundos hasta que reaccioné para seguirle el beso.
Sus manos se aferraron en mi cintura acomodandome sobre sus piernas, coloqué mis brazos en sus hombros para pasarle las manos por el pelo.
Abrimos los ojos una vez nos separamos.

Miramos nuestras posiciones para después volver a subir la cabeza, apoyé mi frente sobre la suya, una sonrisa apareció en su rostro dibujando otra en el mío.

-Leah...-

-Callate- Esta vez fui yo la que estampe mis labios sobre los suyos, no tardó en reaccionar, comenzó a dirigir el mismo el beso y se abrió paso en mi boca, la falta de aire nos acabó volviendo a separar.

-Me gustas Leah, desde el plimel momento en el que entlaste pol las pueltas de la sede, desde que me insultaste, y desde que clavaste tus ojos en mí lubia-

-Pero, esas chicas que traías a casa Yun..-

-No me llegué acostal con ellas, lo intenté, solo pala olvidalme de ti, pero solo podía vel tu cala-

-Tú a mí también me gustas Kalahari, desde la primera absurdez que dijiste el primer día hasta la última que digas, me gustas-

-Eso significa que sí ele' mía- Una sonrisa volvió aparecer en su rostro.

-Quieto vaquero, aún no me lo has pedido- Le puse la mano en la cara cuando vi que se acercaba de nuevo dispuesto a besarme.

-¿De veldad quiele' un título pala sel mi novia?- Asentí en señal de respuesta.
Soltó uns suspiro y no pude evitar reír al ver como se ponía serio y cogía aire.

-Señolita Leah Galcia, ¿me halía el honol
de quelel sel mi novia?-

-Sí Yun Kalahari, me gustaría serlo-
Sus manos volvieron a rodear mi cintura de nuevo y nuestras bocas volvieron a unirse.

-¡PERO PASALA JUANJO, PASALA!- La voz de Jhon junto a las risas de los demás era lo que se escuchaba en el patio, había dejado de llover por lo que decidimos por fin salir un rato.

-¡Que yo puedo solo!- El recién nombrado iba directo a la portería de mi equipo, corrí en su dirección dispuesta a quitarle el balón, acto que conseguí, llevando este en dirección contraria a donde iba Juanjo, se la pasé a Emilio que estaba en mi equipo y acabó marcando.

-¡A CHUPARLA JHON!- Grité emocionada cuando vi el balón entrar en la portería esquivando al portero del que me estaba burlando.
Carcajas volvieron a resonar por el patio cuando sentí unas manos alrededor de mis caderas, en un abrir y cerrar de ojos estaba sentada sobre los hombros de mi novio.

-¡Exijo una revancha!- Tonet no aceptaba su derrota, lo que me hizo aún más gracia.

-¡Es que te lo he dicho Juanjo!- Jhon regaña al miembro de su equipo, en el momento en el que escuché su nombre, mis ojos se dirigieron a donde se encontraban.

-Jhon, vuelves a reñir a mi niño, y la que te va decir algo voy a ser yo pero cuando te deje tirado en el suelo- Mi cara volvió a ser seria y el recién nombrado me miró con el ceño fruncido.

-¿Cómo que tu niño?- Escuché la voz del pelirrojo que aún me tenía en sus hombros.

-No te pongas celoso Yun, puedes compartir a Leah- Juanjo sonrió cuando se acercó q nosotros y el asiático me ayudó a bajar.

-Una mielda, mi novia no se compalte- Mis ojos casi salen de mis órbitas al escuchar eso, se supone que aún no íbamos a decirlo, todo el patio se quedó en silencio al escuchar eso.

-E-es decil, Leah-

-¡SON NOVIOS!-

-Me debes 50 euros-

-¿No podáis esperaros dos días más?-
Burlas se empezaron a escuchar de nuevo haciendo que la sangre subiera a mi cara, me giré alzando una ceja en dirección al causante de todo esto.

-Bueno, ya lo saben, ya no hay que escondelse- Una sonrisa de angelito apareció en su rostro atrayendome a él para darme un beso que casi me marea, los demás empezaron a celebrar como si llevasen esperando esto siglos.