La pija de Wendy estaba deliciosa. Mientras mirábamos el juego lésbico improvisado por Jisoo, mi novia me cogía suavemente. Miré el reloj una vez más y decidí que ya era hora de pasar a la siguiente fase del juego.
-Bueno, ya pasaron más de diez minutos -anuncié-. Es hora de cambiar.
-Muy bien -dijo Jisoo-, como se habrán dado cuenta, para que alguna de las chicas no reciba la penalización, el único cambio posible es que Dahyun venga conmigo, Rose vaya con Yeri y Seulgi con Jihyo. Chicas, esta es su última oportunidad. Si consiguen hacernos llegar al orgasmo, ya saben cuál es el castigo.
-¿De verdad vamos a llegar tan lejos? -Preguntó Jihyo.
-El juego ya comenzó -le respondió Jisoo-, sería injusto interrumpirlo ahora. Dijiste que estabas dispuesta a probar mis métodos? Bueno, esto recién empieza. Además, no te preocupes, ahora las chicas tendrán otros diez minutos y cuando antes arranquemos, menos nos vamos a enfriar. Yo disfruté mucho de lo que hizo Seulgi, y quizás Dahyun consiga hacerme llegar al orgasmo.
-Te prometo que me voy a esforzar mucho, Jihyo -dijo Dahyun, con una de sus típicas sonrisas llenas de luz.
-Lo mismo digo -acotó Yeri-, para ser tu primera experiencia, hiciste un excelente trabajo. Me gustó mucho. Es muy posible que Rose me haga acabar.
-Mejor -dijo-. Porque quiero ganar.
-¿Y tú qué dices, Jihyo? -Preguntó Jisoo-, siendo honesta ¿creés que estás cerca de acabar?
La concha de la aludida estaba muy mojada, en parte por la saliva de Rose; pero se notaba que también había muchos jugos sexuales.
-Sinceramente, no. Rose hizo un excelente trabajo, no me puedo quejar. Realmente tiene talento para esto... pero a mí me cuesta mucho llegar al orgasmo.
-Ya veo, por eso recurres a métodos alternativos cuando necesitás acabar. Y ojo, no te estoy juzgando, a mí me parece genial que lo hagas. Aunque no por los mismos motivos que tú. Para ti es una forma de, no sé... no contaminarte con pensamientos sucios, y por eso necesitás acabar lo más rápido posible. Y yo pienso que una mujer debe buscar su satisfacción sexual. Llegar al orgasmo siempre debe ser una meta a tener en cuenta. ¿Ves? Aunque opinemos diferente, en el fondo coincidimos.
-Agradezco que hagas el esfuerzo para ver las cosas desde mi perspectiva -dijo Jihyo-. Yo voy a intentar verlas desde la tuya, aunque eso me cueste horrores.
-Se nota que eres una mujer con pensamientos muy estructurados -dijo Jisoo-, sé que no te va a resultar fácil cambiar la filosofía, y no pretendo eso. Me basta con que, al menos por hoy, no interrumpas mis métodos.
-Está bien. Te prometo que no voy a interrumpirlos. Hoy haremos lo que tú digas. Creo que te lo debo, por la forma en la que te traté. Sé que no estuvo bien de mi parte insultar a tus amigas. Como líder, yo jamás permitiría que alguien diga semejantes barbaridades de mis compañeras.
-Ja, decir Barbaridades de Dahyun... -dijo Lisa entre risas-. ¿Lo entienden? Barbaridades... de Dahyun.
Todas la miramos sin siquiera inmutarnos. El sentido del humor de Lisa es tan básico que solo a ella le hace gracia.
-Vayanse a la mierda -dijo, ofuscada. Luego se cruzó de brazos.
-Mejor sigamos con el juego -dijo Jisoo-. Antes de que empieces, Dahyun, cuéntame ¿qué hizo Jihyo para ayudarte a acabar?
-A ver, Jisoo, te pido que no lo tomes como una interrupción. Entiendo que deba responder con la verdad, pero... me pone incómoda que le preguntes sobre ese tema en específico.