Ambiente

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La fiesta estaba sumamente ruidosa Applejack se encontraba pérdida en sus pensamientos observando la fiesta y lo descontrolada que se había vuelto. "¿Como la directora Celestia podría catalogar esto como fiesta sin meterse en absoluto en lo que hagan sus alumnos? ¿Confía en Pinkie? yo no podría dejarle a esa chica una noche entera para hacer un descontrol, mucho menos la Intitucion. Pero cierto que esa señora no viene hasta mañana, tampoco hace mucho por si escuela. están todos borrachos." - Pensó Applejack irónicamente haciendo muecas de disgusto.- Ella estaba aturdida, desorientada de vez en cuanto entraba para que sus amigas no se preocuparan pero en esos minutos que entraba ya no quería estar más, el ambiente era horriblemente pesado, ese calor que transmitía el lugar era tensioso. Sin pensar que algunos alumnos llevaban de contrabando alcohol, eso si no se permitía, las clases empezaban más tarde el primer día pero aún así tenían clases y era algo de sanciones llevar algo que no estába permitido pero... "Quienes somos para juzgar."- Dijo en su cabeza. -

Al entrar para hidratarse, Applejack pudo notar cómo todas sus amigas estaban en situaciones sumamente incómodas, desconcertadas y muy sobrenaturales de ellas. Twilight estaba con Pinkie estando ella tomando, sabia que no duraría ni una hora luego de eso. Rainbow también lo estaba, auque le incómodo verla a ella a los besos con el deportista de cabello azul. Rarity estaba coqueteando con un chico a las indirectas y Fluttershy ya se había ido hace rato de la fiesta.
La granjera suspiro agotada y se dirigió hacia las dos primeras nombradas.

- Twilight, que hora es? - Preguntó la granjera rascandose la frente.

- Las... - Levanto su brazo mirando con los ojos chinos su muñeca. - ¡Las 3! - Exclamó alterada mirando con grandes ojos a Applejack. - ¡Por Celestia, no voy a dormir nada!. - Exclamó nuevamente colocando sus manos en su boca impresionada. - ¡Me tengo que ir! - Sacó finalmente.

La rubia solo río y asintió viendo salir corriendo a su compañera chocando con muchas cosas en el camino.

- ¿Quieres? - Saltó a decir una Pinkie con alegría colocando un vaso con alcohol en frente de la vista de Applejack.

- ¿Que es? - Preguntó la granjera con curiosidad observando atentamente el líquido del vaso.

- Sidra... - Siguió diciendo con una sonrisa y mirada pervertida la fiestera.

- La mia es mejor de seguro. - Sacó Applejack agarrando el vaso ofrecido haciendo una risa de satisfacción y mirando ganadora a su compañera.

- ¡¿Haces sidra?! - Saltó Pinkie impresionada escupiendo la bebida de su boca.

- Sip, de manzana. - Applejack río. - La mejor. - Dijo victoriosa agitando el vaso con sidra de su mano.

- ¡Necesito probarla! - Los ojos celestes de la esponjada chica se extendieron empezando a brillar. - Y se que a Dashi también le encantaria. - Dijo emocionada.

Applejack había probado un poco del líquido ofrecido y no solto ninguna mueca de disgusto, estaba aceptable.

- Si, cuando puedo les traigo. - Dijo terminando de un sorbo la bebida.

- Pinkie solo la observó con satisfacción y río suavemente. - ¿Y esa? - Sacó entre risas agitando y tomando un sorbo de la bebida que ella tenía en su mano. - ¿Que tal está? - Dijo coqueta.

- Está aceptable. - Ella río. - ¿Le pusiste algo? - Preguntó con curiosidad la rubia dejando caer su cuerpo contra la pared cruzándose de brazos.

- Amm, la verdad no lo se. - Dudo por unos minutos Pinkie y giro su mirada a la mesa con las bebidas. - Pero si te interesa tienes más que esa. - Sonrió y siguió tomando de su vaso. - Veo que si te gusta el alcohol. - Sacó pícara.

- Applejack río carismática y dijo. - Si, pensabas que no? - Preguntó bufando sarcásticamente caminando hacia la mesa de las bebidas.

- Pues, si, parecer ser normal. - Dijo Pinkie apoyando su brazo en la mesa mirando los movimientos de la rubia.

Applejack solo se río a carcajadas y se sirvió un poco más de sidra. - Uuh, esto tiene de exceso de alcohol. - Exclamó haciendo una mueca de asco después de oler el vaso.

- Fuu, si acá se pasan con el alcohol. - Dijo riendo la peli-rosa mirando fijamente los movimientos de la granjera.

- Demasiado. - Applejack tomó un sorbo grande de sidra y se apoyó en la mesa.

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Las dos chicas habían desviado su mirada observando a la deportista que estaba con sus secuaces, todos en un rincón riendo con sus chistes malos y tomando como locos.

- Seguro ellos son los que trajeron el alcohol, no? - Dijo sin desviar la mirada de el grupo.

- Sip. - Pinkie asintió dejando su vaso vacío sobre la mesa. - Yo auque tome y tome no me pongo ebria, tengo soporte. - Dijo lo último con orgullo la fiestera.

- Applejack río y desvío su mirada hacia la peli-rosa. - Yo también tengo soporte, pero no saca la resaca. - Siguió a decir cruzándose de piernas aún apoyada en la mesa con un brazo y tomando el vaso con el otro.

Pinkie río y asintió ferozmente haciendo que las dos chicas se rían.

La noche paso rapido luego de varios shots y varias risas genuinas de las dos chicas, sin decir la graciosa escena que hizo Pinkie al gritarle a todos los de la fiesta que se fueran a dormir que tenían que levantarse temprano para limpiar su desastre, eso había sido verdaderamente chistoso.
A pesar del notorio y extraño mareo que sentía la rubia camino con dificultad hacia su habitación abriendola y dirigiéndose hacia su cuarto cayendo rendida en la cama.
A los minutos después entró Rainbow Dash suspirando frustrada y con dificultades para caminar y hablar, que se dirigió hacia la cocina lavándose la cara con agua fría, quedado pelpleja mirando el lavamanos. Camino hacia su cuarto y al igual que la otra cayó rendida.

Los suspiros del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora