Pareja de oro-RAGONEY

4. 2017/2018-Raoul

Aunque en este universo El chico de la ventana tiene 5 temporadas y no una como el fic, hay spoilers de la trama y el epílogo :)

2017/2018. Raoul

Con el estreno de "Libertad", casi no tuve tiempo de pensar en mi primer y único encuentro con Agoney. Debido al caché de Mario Casas, la productora nos llevó de gira por las principales cadenas de televisión. Si encendías la tele en cualquier canal donde pusieran entrevistas a hora punta, probablemente estuviera yo hablando de mi primera película, con la compañía de mi coprotagonista. Para El Hormiguero fue él solo, pero casi me alegro. En aquella época, habría sido demasiada presión.

Nunca me quejaría, porque fue un final de octubre y noviembre lleno de trabajo, de darme a conocer y de dar a conocer la película, pero dedicaba mis escasos huecos libres a pensar en él, en cómo me había sentido con solo una charla en un banco mientras comíamos pipas.

Si en la sencillez estaba el amor, yo creía haberlo encontrado.

Con el paso de las semanas, empecé a usar las noches en hoteles para verme entrevistas de Agoney. Empecé con las de «La Marca», su última película. Me descubrí a mí mismo sonriendo como un idiota y bajando por toda la información que encontraba sobre él.

Entonces, descubrí una entrevista antigua, la de su primera vez en El Hormiguero, junto con otros dos chavales más mayores y Nerea. Tuve que revisar que se trataba de él. Era obvio que tendría que ser más joven, pero la falta de barba y la cara aniñada me sorprendió.

Lo siguiente que hice fue ponerme «El chico de la ventana». Hasta ahora, todo lo que sabía de la serie era por mi hermano mayor, que sí que había visto la serie por el canal internacional, y por la prensa. Necesitaba ver de primera mano qué tenía de especial.

—¿Qué haces? —Pegué un bote sobre el asiento del tren, ocultando la pantalla de la tablet—. Uy, qué sospechoso es que me lo apartes. ¿Veías porno? Porque no deberías, está feo.

—Nerea... —Me quemaban las mejillas, pero conseguí tranquilizarme—. ¿No te han dicho que a veces eres demasiado cotilla?

Se lo pensó, mirando al techo con una uña rascándose la barbilla.

—No me gusta el adverbio "demasiado" —comentó—. Soy cotilla con lo que me interesa, espero que me perdones. ¿Qué veías tan concentrado con auriculares? Habla por esa boquita.

—Me he enganchado a tu serie —admití, con voz diminuta—. Nunca le había prestado mucha atención, pero ahora que me he puesto..., es muy buena, para ser antigua. Y tú lo haces genial para ser tan pequeña...

—Ocho años recién cumplidos cuando empezamos a grabar. —Se sentó a mi lado, con una sonrisa brillante—. Pero todo el mundo dice que aparentaba los seis que se suponía que tienen mis personajes.

—Totalmente. —Eché un vistazo a la pantalla, donde una pequeña Nerea hablaba, sentada en la encimera, con su hermano mayor—. Y hacer de dos personajes..., wow.

—Un talento infravalorado. —Me guiñó un ojo—. Es muy divertido, la verdad. Lindsay Lohan no tiene ni idea de lo que es interpretar a gemelas durante casi seis años. Voy a por ella.

—Para alcanzarla solo te falta hacer las pelis adolescentes que se conviertan en iconos —bromeé.

—Voy a por ello. —Se cruzó de brazos—. Tengo un par de propuestas para grabar el año que viene, en cuanto acabemos con esta promo firmo y me pongo a ello.

—Joder, qué suerte...

—¿Tú qué harás cuando acabemos con esto?

Repasé mis últimas conversaciones con mi representante. Habíamos tenido pocas, pero quería meterme en la lista de varias premieres donde creía que Agoney iba a aparecer para que nos siguieran echando fotos juntos. Se había obsesionado con esa idea y no la dejaba ir.