capítulo 21

761 64 4
                                    

∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝∝

En la mansión Malfoy.

Lucius llegó molesto a su habitación directamente, se quitó la ropa y se dio un baño. Al salir se puso el primer traje que encontró y salió a la sala de estar donde ya lo esperaba su diario y una taza de té como de costumbre.

Narcisa no estaba en casa, ella salía con su amante y había noches que no llegaba o incluso días, pero no era de su importancia, el hizo lo mismo durante mucho tiempo.

Se dispuso a leer su diario y dar unos cuantos sorbos a su taza de té cuando alguien llamaba a la puerta, Dobby atendió el llamado, al abrir la puerta notó que estaba el profesor Severus Snape, le pidió que esperara un momento para anunciar su visita, pero él entró y fue donde Lucius.

Severus. –se puso de pie y lo invitó a sentarse. – no sabía que salías tan tarde del castillo, ¿gustas té?

El pocionista le contestó con un gesto y se sentó donde se le indicó.

Lucius. -se acomodó en el sofá y lo observó detenidamente de pies a cabeza. -he querido preguntarte algo desde ese pequeño "malentendido" en la oficina del director.

¿malentendido? -contestó y al par bajó su taza de té. - ¿A qué te refieres?

Te vi a ti con Corvus. -resopló intentando disimilar sus celos de solo recordarlo- en una situación un poco delicada.

Una sonrisa perversa salió de Lucius, dejó su té en la pequeña mesa de centro junto con su diario y sin mostrar alguna otra reacción contestó firme.

Soy un Malfoy, Severus. -se echó hacia atrás dejándose caer en el sofá. -Yo la vi primero y creo que lo justo es que ella sea mía.

Por la mente de Snape pasaron muchas torturas que estaría encantado de hacerle, pero lo mejor sería saber que tanto es lo que ha pasado entre ellos.

Lucius, te recuerdo que tú eres un hombre casado. – se colocó al borde del asiento. -y no solo eso, ella es la mejor amiga de tu hijo, sería tu hija por la edad que tiene.

Pero no lo es, Severus... -contestó con malicia. -pero dime, ¿A qué viene todo esto? -levantó una ceja y cruzó los brazos.

Aunque sus padres tengan toda su confianza en ti, yo no confío en tu ni un poco. -su rostro sin expresiones solía intimidar a los demás, pero nunca funcionó con Malfoy.

El rubio se levantó de su asiento, dio unos cuantos pasos por el salón y cuando volvió su vista Severus estaba de pie.

Oh pero que cosas digo... -vaciló un poco. -a ti te interesa ella. -lo miró. - ¿no es así?

¿Cómo podría yo acercarme a mi propia alumna? -ironizó levantando la voz un poco.

Bueno, no sería la primera vez... -replicó Lucius burlándose de él. - ¿oh acaso ya olvidaste a esa chiquilla que, aunque estaba enamorada de ti me prefirió a mí?

Severus recordó a la chica, una buena estudiante y bruja que prometía ser una excelente magizoologa, pero sus padres al saber de sus andadas con Lucius, se la llevaron y no volvieron a saber nada de ella.

¿Acaso crees que alguien de verdad podría fijarse en alguien como tú, Severus? -se rió un poco. -Ni siquiera tu mejor amiga, Lily Evans, se quedó contigo porque prefirió estar el odioso de James.

Sin previo aviso el pocionista le lanzó un "petrificus totalus" haciendo que cayera al suelo de golpe, se acercó para verlo y le quitó el cabello de la cara.

Preferí mil veces verla feliz con alguien que casarme con ella a la fuerza y tener un hijo al cual no le tengo ningún tipo de afecto. – se remangó la camisa y le dio un puñetazo en la nariz. -y una cosa más, aléjate de t/n o de lo contrario te arrepentirás de siquiera intentarlo. – dejando a Lucius en el suelo, desapareció y llegó a la sala común de los Slytherin.

Ya era algo tarde, pero él siempre caminaba sin prisas y cauteloso. Unos pequeños ruidos salían de la habitación de Corvus así que se quedó frente a la puerta sin hacer ruido.

Eran risas de los chicos que estaban viendo unas fotografías de Draco y de t/n cuando jugaban en los jardines de la mansión Malfoy, Harry comía un poco de los dulces que trajo mientras que los demás seguían sacando sus viejas fotos.

Snape de pegó un poco más a la puerta, pero t/n notó su sombra debajo de la puerta, sin decir nada se levantó mientras Draco y Harry seguían viendo esas fotos.

No cabe duda que eres muy guapo desde niño, Draco. -dijo Harry y acarició su mejilla.

¿Tú lo crees? -le respondió con una sonrisa, le dio un pequeño beso en la nariz.

Claro que sí. -contestó y su rostro se sonrojó.

Al llegar cerca de la puerta, Snape sintió que alguien se acercaba y en segundos desapareció, cuando ella abrió la puerta ya no había nadie.

Volvió donde estaba y continúo viendo las fotos, la noche pasó muy amena y aunque no pasó su cumpleaños con sus padres como ella lo quiso, sabía que el fin de semana pediría permiso para ir a verlos. Estaban por dar las 5 de mañana cuando Draco y Harry pensaron que ya era tiempo de irse a sus habitaciones,

Espero hayas disfrutado tu cumpleaños. -dijo Draco al mismo tiempo que la abrazó

Te agradezco por todo, - se soltaron y t/n lo tomó de las manos. -de verdad agradezco que hayas estado aquí. -estiró una mano para pedirle la suya a Harry. -igual no sé qué haría sin ti, eres el mejor del mundo

No agradezcas t/n, te cuidaremos siempre. -le contestó Harry dedicándole una sonrisa.

Bien. -exclamó Draco. -Es hora de irnos Harry. -le estiró la mano, para Corvus ya no era una sorpresa así que los acompañó a la puerta del cuarto y cerró la puerta después que salieron.

T/n fue hacia su cama no sin antes ponerse su pijama, un short de seda blanca y de igual manera una camisa. Levantó sus almohadas que estaban en el suelo, se acomodó en la cama y con una sábana encima y al poco tiempo se quedó dormida.

Pasaron unas horas más y un olor delicioso la despertó, entre abrió sus ojos y notó que no estaba en su habitación. Rápidamente se sentó en la cama la cual tenía sábanas de seda negra y una almohada muy cómoda.

Sweet temptation (Severus Snape x T/N)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora