Plan B -NamMin°Minimoni-

XVI

Hoseok siempre había tenido problemas de sueño. Es decir, no sufría de insomnio ni nada parecido, sino que una vez que tocaba su cama era como si prácticamente cayera en coma.

Tenía una capacidad increíble para dormir como si fuera un bebé sin ninguna preocupación más que ser lindo y adorable. Y Taehyung siempre le había dicho que era como un superpoder, un poder inútil y estúpido, pero poder al fin de cuentas.

Sin embargo, luego de recibir esa alarmista llamada de parte de Taehyung, le fue imposible dormir tranquilo después de todo. Tae había vociferado en su oído que "el muy hijo de puta de Yoongi" lo había echado todo a perder y que Jihyo ahora sabía sobre el embarazo de Jimin.

Él ya sabía que era sólo cuestión de tiempo antes de que el desliz de Tae les explotara en la cara de esa manera. Después de todo, Jimin estaba gestando un bebé a escondidas de su familia y pretendía guardar el secreto quién sabe por cuánto tiempo más.

Razonablemente, no culpaba a Jimin por sus decisiones, aunque le parecieron desacertadas al inicio. El omega era un adulto y tenía el derecho de formar una familia en las circunstancias que quisiera, aunque parecieran una locura.

El timbre de su casa fue llamado. Hobi se levantó de la cama, abandonando por completo sus esperanzas de dormir esa noche, y caminó descalzo hasta la puerta. Ya se esperaba esta visita imprudente de Taehyung, así que abrió sin más y se sorprendió cuando los brazos del omega lo rodearon del cuello.

—¿Tae? ¿Qué pasa? —preguntó cerrando la puerta, sin embargo, no recibió por respuesta más que sollozos. Le costó un poco, pero al final, rodeó a Tae y correspondió al abrazo— ¿Estás bien?

—No —sollozó Tae en su hombro—, no estoy bien... Lo extraño, hyung. Extraño mucho a mi mejor amigo.

Hobi no pudo decir algo, porque no se le ocurrió qué, así que sólo acarició la espalda del omega y lo dejó desahogarse hasta que dejó de llorar algunos minutos después. Una vez que Tae estuvo más tranquilo, lo llevó al sofá y le ofreció pañuelos y preparar té.

—Nunca va a perdonarme —soltó Taehyung al aire y su voz sonaba tan triste que a Hobi se le rompió un poco el corazón.

—No digas eso —le puso una taza de té en las manos y le acomodó el cabello fuera de la frente—, ya verás que en poco tiempo estarán contentos de nuevo. Se conocen desde que estaban en pañales, podrán superar algo como esto.

Tae sorbió el té y dos lágrimas gruesas rodaron sus mejillas. —Porque lo conozco de casi toda la vida sé que no va perdonarme. ¡Le arruiné la vida! ¡A él y a su bebé!

Taehyung era bien conocido por ser algo... dramático, pero por primera vez, Hoseok sintió que el omega no estaba exagerando.

No tenía una relación tan antigua e íntima como la que tenían los dos omegas, pero sabía lo suficiente de cada uno como para darse cuenta de algunas cosas por su cuenta. Todavía recuerda cuando se enteró de la familia a la que Jimin pertenecía y las extrañas circunstancias familiares de Taehyung, le dio un poco de miedo, a decir verdad.

Así que sí, comprendía porque Tae aseguraba que le había arruinado la vida a Jimin. Más o menos.

—¿Crees que Jihyo le diga a su padre? —preguntó despacio, esperando la reacción asustada de Tae.

—No lo sé, ella vino a preguntarme directamente sobre el rumor de Jimin encinta. Estoy seguro de que fue Yoongi quién habló con ella. No le dije nada, pero sé que no me creyó —gimoteó sorbiendo la nariz—. Yoongi cree que es suyo, el cachorro, es por eso que asumo que Jihyo también está preocupada. ¿Entiendes qué implica eso?