RECOMIENDO PONER ESTE AUDIO CUANDO LEAIS EL CAPÍTULO CON CASCOS YA QUE MEJORA TODO. CUIDADO CON QUE NO OS ESCUCHEN

NARRA AIDA
Llegamos al cuarto rojo y Lucía me pregunta que donde están los límites, le digo que los decide ella ante esto me atrapa las manos en una cadena manteniéndome inmovilizada, al momento me tapa los ojos con uno de sus dichosos antifaces y noto como se acerca a uno de los armarios cuando vuelve me dice que cuando me sienta incomoda le diga que pare y ella parará, me genera curiosidad lo que va a hacer pero ni me da tiempo a pensarlo ya que me introduce un vibrador en mi coño, otro estimulando mi clítoris, un tercero en mis pezones y el cuarto en mi cuello. A la vez de esto noto como mis pies se elevan y unos vibradores empiezan a hacerme cosquillas en mis pies provocando que todo mi cuerpo se sensibilice. Lucía me dice al oído que si esos no eran mis juguetes favoritos pues ahora los disfrutaré, no soy capaz de decir nada ya que estoy gimiendo. A la vez noto que por todo mi cuerpo empieza a pasar un objeto bastante suave; desde mi cuello hasta mis pechos, mi estómago, coño, muslos hasta llegar a mi culo, de repente noto como un latigazo pero en vez de provocarme dolor solo me produce excitación, no puedo hacer otra cosa que gemir, vuelve a hacer lo mismo en mi otra nalga y vuelvo a gemir. Con todo el placer que siento no soy capaz de contenerme y solo puedo permitir que mis instintos primarios salgan a la luz, me vuelvo a dejar llevar a lo que me produce Lu. Me susurra al oído que los látigos aunque sean objetos destinados a producir dolor si se saben usar sirven para producir placer, me pregunta si quiero que pare pero giro la cabeza negativamente para decirle que siga. Soy plenamente consciente que me estoy dejando llevar a a todos los caprichos que Lucía quiere pero no puedo hacer otra cosa cuando mis zonas de placer están completamente excitadas por no hablar de mi clítoris que no puede mas. Lu me susurra gimiendo que no puedo llegar aun al orgasmo.
Me vuelve a dar un latigazo pero ahora siento un poco de dolor y le digo a Lucía que pare, ella en cuanto escucha eso para y me da un beso en cada nalga haciéndome volver a gemir. En ese momento me retira todos los vibradores pero sin darme cuenta a respirar empieza a chupar mis pezones, no poder ver nada hace que todo esto sea más excitante. Retira su boca de mi pezón y empieza con su dedo a seguir estimulando, de todo el placer que siento mis pezones me duelen pero es un dolor agradable. Noto como el placer ahora va desde mi pecho hasta mi centro.
Lucía dirige sus dedos hacia mi clítoris, mientras me susurra que le encantan mis gemidos y mis gritos, eso aun me hace gemir más. Me pregunta que es lo que necesito y le digo que a ella encima mía ahora mismo. Me suelta las manos y me quita el antifaz y se lanza a mis labios hasta que me tira en la cama. Veo que sus ojos están brillando por toda la excitación y me imagino que mis ojos estarán igual, me atrevo a pasar mi mano por su coño y veo que también esta excitada, ante este movimiento la oigo gemir y no puedo evitar gemir yo ante ese sonido. Me dice que chupe sus dedos a lo que obedezco, no puedo hacer otra cosa ahora mismo, estoy rendida al placer que me hace sentir Lucía.
Con cuidado se sube encima mía y cuando pienso que va a juntar nuestros coños pero al contrario me susurra que ya fue la dominante pero ahora quiere disfrutar e ir lento conmigo, hacerlo de otra manera. Me empieza dando un beso en la boca transmitiendo todo lo que siente, después va hacia mi cuello besándolo con ternura produciéndome un gemido, baja hasta mis pechos besándolos y dejando besos por todo mi cuerpo hasta llegar a mi clítoris donde con su lengua hace maravillas. Mientras que ella está jugando con mi clítoris yo estoy disfrutando del cuerpo que tiene esta mujer, escucho como gime en mi coño eso hace que no pueda aguantar más, pero antes de que llegue Lu se sube encima y con toda la calma y cuidado del mundo empieza a moverse haciéndonos gemir a las dos, después de un rato nos corremos las dos a la vez. Nada mas llegar Lucía me dice que me ama a lo que no puedo hacer otra que decirle que yo también.
NARRA LUCÍA
Al llegar a la habitación me quedo mirando a Aida, le digo que se siente y del pantalón saco una caja y se la doy, al abrirla tiene una cara de sorpresa, antes que se asuste aún mas le digo que ese anillo no es de pedida de mano, que cuando le pida que se case conmigo no lo haré así. Le explico que ese anillo es especial para mi familia y quiero que lo lleve ella. Empieza a llorar así que la abrazo y le quito las lágrimas de los ojos. Después de esto la beso y le pongo el anillo mirándola a los ojos y le digo que es todo para mí, ella me vuelve a besar y nos vamos a dormir.
Nunca pensé que alguien iba a ser capaz de sacarme de mi vida de ama pero llegó esta morena de ojos verdes que desde un primer momento no era sumisa y me fue conquistando poco a poco sin darme cuenta. Es verdad lo que dicen que a veces las hostias son lo que te hace reaccionar y en mi caso el secuestro hizo que me diera cuenta de todo. Amo a Aida con todas mis fuerzas, no podría vivir sin ella aunque lo intentara con todas mis fuerzas. Ella es mi mundo.
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¿Oscuridad y amor?
RomanceBuenas tardes, soy Lucía de la Puerta. Soy una de las empresarias más jóvenes que vais a conocer en la vida. Al contrario que mis amigas no creo que en amor, me parece la cosa más absurda del mundo. El amor solo sirve para hacerte débil y no avanzar...