ALTERCADO

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-Yo no hice nada para que ustedes...

-Eso es lo que lo hará más interesante para ti – sonrió – tendrás que pensar ¿Qué fue lo que hiciste para que el nido de serpientes más venenoso y elitista te diera toda su lealtad?

-¿Nido de serpientes?

-En realidad no estoy autorizado para decirte mucho sobre esto porque cierta persona puede disfrutar Azkaban con tal de usar las imperdonables conmigo si lo digo en voz alta, pero no sólo tienes a Draco y a mí de tú lado

-Sé que cuento con ustedes

-Sabes que nos tienes, pero no sabes lo que haríamos por ti si tan sólo lo pidieras – le guiña un ojo – sé que no estamos en épocas escolares ratoncita de biblioteca, pero el hecho de que salgas con el príncipe de las serpientes te otorga los privilegios que ello conlleva

-Blaise... creo que

-Sólo tienes que recordar que no te dejaremos caer nunca, y si quieres algo sólo tienes que pedirlo

-Blaise espera – la castaña salió corriendo a abrazarlo – gracias – murmuró dejándose envolver por los brazos del moreno – muchas gracias por estar para nosotros

-Siempre Granger – le guiñó un ojo – siempre

Con un asentimiento y el corazón más liviano, regresó de nuevo a la chimenea dejando que las llamas verdes de la chimenea la consumieran para llevarla hasta su departamento.

-¡Joder con Blaise! – escuchó la castaña mientras su aroma inundaba sus fosas nasales y la estrechaba contra su cuerpo – le debo la maldita vida ¿Cómo estás? ¿Qué te pasó? ¿Por qué te fuiste?

-Lo siento – murmuró –

-Estuviste llorando – negó y la tomó en brazos –

-Fui... a la mansión Greengrass

-¿Qué? – parpadeó perplejo – ¿Estás bien? ¿Te hizo daño?

-No

-¡Juro que si te tocó un maldito cabello...

-Draco no lo hizo – le tomó las manos –

-Pues más le vale – la atrajo a sus brazos – lo prometió, y haré que cumpla con su palabra

-Espera... espera – le tomó del rostro – ¿A qué te refieres con que lo prometió?

-Cuando... esa noche – musitó incómodo – pasó todo, me quedé en la mansión por meses, no me interesaba otra cosa, sólo quería desaparecer y dejar de sentirme como me sentía...

-Draco...

-Entonces ella se presentó hecha una furia en la mansión – niega apretando las manos a un costado – se atrevió a gritarle a mi madre – refunfuña y maldice por lo bajo recordando – ¡Mi madre!

Mansión Malfoy

(Dos años después de la liberación de Draco Malfoy)

-¡¿En dónde está?! – gritó histéricamente Astoria – No te metas en esto Cissy

-¿De verdad vas a tener esta discusión conmigo Astoria? – levanta la ceja colocándose frente a la escalera que conectaba con las habitaciones –

-Esto no es asunto tuyo Cissy... por favor

-Todo lo que tenga que ver con Draco me concierne – musitó despreocupadamente – reflexiona en lo que estás haciendo querida... no es el camino y lo sabes

-Es hora de que Draco enfrente sus responsabilidades

-No puedes venir aquí a hablarme de responsabilidades porque no eres un ejemplo a seguir como tú crees, como para que trates de dar clases de moral – entrecerró los ojos –

-¡Tu hijo... – la rubia elevaba cada vez más el tono de voz –

-MI HIJO – igualó el tono haciéndola callar – no se encuentra disponible para ti

-¡NO PUEDES SER TAN PROTECTORA CON EL! – gruñó – ES UN HOMBRE Y DEBE ACTUAR COMO TAL...

-¡EN MI CASA NO VAS A VENIR A HABLARME DE ESA MANERA NIÑITA MALCRIADA! – se irguió tanto como pudo recordándole porque ella estaba al frente de las empresas Malfoy – aparte de que merezco tú respeto por ser la dueña y señora de esta casa, que no se te olvide que yo te cambiaba los pañales mocosa insolente – siseó por lo bajo la pelinegra – 

Libertad AnticipadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora