Solo es un contrato

capitulo 31

Había salido de la oficina de freen la vi casi besarse con esa chica mi sangre hervía mis lagrimas salían al final si freen me engañaba y se acostaba conmigo de noche o mas bien ya no quiso acostarse conmigo últimamente se puso distinta quizás por eso me pidió el divorcio mis lagrimas salían mi suegra la señora Isabella era muy buena me abrazo

Isabella-hija tranquila freen te quiere

No señora su hija no me quiere y mucho menos quiere este bebe para ella será una obligación

Becky- no es asi-mi suegra me dijo talvez si te quiere solo esta

Señora no la defienda usted y yo sabemos que freen y yo estamos casadas por un trato -ella me seguía abrazando me llevo a casa ella me hizo una sopa y mhee me llevo un te pase la tarde pensando en mi bebe alas 10 de la noche llego freen se sentó en la cama

Freen- podemos hablar -me dijo

Por que fuiste ala empresa-me dijo

Freen yo estoy embarazada

Freen- que como no me jodas-te lo dije no quiero un hijo es mio esta segura

Le deje ir una cachetada-te juro que es tuyo

iremos al doctor

FREEN

El suspenso me mataba cada segundo, los milagros no existen eso es un hecho. Ojalá existiera una maldita máquina del tiempo para viajar al pasado para no cometer el maldito error. Maldita sea. Maldita calentura. Ojalá salga negativo.-ahora un hijo significa estar con Rebecca toda mi vida estoy jodida

—No, no me da gusto, Becky. Nuestras vidas se arruinaron.—las lágrimas de la castaña comenzaron a bajar de su rostro no quiero u hijo no con ella

Sí, tal vez nuestras vidas cambiarán desde este momento pero no se arruinaron, me da lastima que pienses así.—dijo llorando y tocándose su vientre aún plano

Se arruinó mi vida Becky, sabes que a mi nunca me han gustado los niños no estoy lista

Ahora te tendrán que gustar. Yo no lo hice sola.

Ella tenía razón, ese bebé también es mío, el lío en el que nos metimos es de ambas.

—¿Cuánto tiempo tienes?—pregunté

—No lo sé, me tendrían que hacer un ultrasonido para que salga que tiempo tengo.

—Bien, entonces ponte algo cómodo.—le dije y ella me miró confundida

—¿A dónde iremos?—preguntó confundida—Yo no voy a abortar a mi bebé, Freen.

—Yo nunca dije eso.—me defendí—Vamos a la clínica del centro para que te hagan ese dichoso ultrasonido y nos fijamos cuanto tiempo tienes.-me estaba estresando demasiado

—Llegamos.—habló el chófer y bajamos del auto alquilado

— Freen.—la voz de Becky hizo que detuviera el paso

—¿Qué?—pregunté

—Prométeme que no me dejarás sola en esto que no te divorciaras de mi que el crecera con ambas

No lo are ya estoy jdida no ahora sere madre

Entramos a la clínica del centro de Orlando, Becky dió sus datos para que le asignaran su turno, mientras yo miraba a las jóvenes que estaban acariciando vientre.

Sentadas, ya hasta me dolían las piernas de permanecer en el asiento incomodo y aún no pasaban a Becky.

—Becky armstrong —una señorita vestida de blanco gritó el nombre de mi esposa y atrajo nuestras miradas—La doctora Miller las espera en el consultorio treinta y tres .—ambas asentimos y ella se retiró

Ambas caminamos por los pasillos hasta encontrar el consultorio indicado. Becky se encargó de tocar la puerta seguido con un <<pase>> del otro lado.

La doctora Miller, le indicó a Becky que se recostara en la camilla a lado había un gran monitor con muchos botones, supongo que para ver al bebé. Indicó que se desabrochara el botón de sus jeans, le colocó un gel transparente sobre el vientre y ella hizo un gesto por lo frío que estaba, comenzó a pasar un pequeño aparato y la habitación se llenó de un sonido que nunca había escuchado en mi vida, si, el corazón de mi hija/o.

—Como ven, ahí esta.—habló la doctora señalando el monitor—Lo que escuchan es su corazón, se encuentra bien.

Las lágrimas de Becky comenzaron a caer, esta vez no lloraba de tristeza si no de felicidad, ella estaba muy feliz de ver al feto.-ahí supe que ella si quería ser madre talvez ella por su edad

—¿Cuánto tiempo tiene?—pregunté

—Tiene 5 semanas, felicidades.—la doctora sonrió y le limpió el gel embarrado en el vientre de Becky

—Maldita sea.—murmuré-lo que faltaba atarme de por vida a ua mujer ala que empezaba amar ahora nose que siento quizás ella si se embarazo a prosposito..................................