5. Su final.

390 46 0
                                    

yuuji lloro fríamente varios días después de ver a Sukuna, la persona que mas amaba besarse con su mejor amigo Megumi.

No quería hablar con nadie, se deprimió de sobremanera que no quería comer ni deseaba salir de su casa, en ese tiempo Sukuna no fue a verlo pero Megumi iba con frecuencia a buscarlo sin embargo Yuuji le pedía a su familia que no lo recibieran.

Su familia no tenía idea de nada ni quería que supieran sobre la relación con Sukuna, ya no quería más problemas. 

Así estuvo por unos días hasta que se dió por vencido, debía aceptar que a Sukuna ya no le importaba así que se encontraron el medio del bosque en el mismo lugar donde ambos habían consumado con un beso su relación. Se sentía nervioso al estar en ese lugar junto a el. 

Por su parte Sukuna no mostraba expresión alguna, lo miraba fijamente esperando que Yuuji soltara palabras.

Al ver a Yuuji triste y nervioso Sukuna tomo la iniciativa de hablar.


Sukuna: Pensé que me llamarías hace días.

Yuuji: Tenía que pensar algunas cosas, además mi familia me tenía ocupado.

 Sukuna: En fin, como ya pensaste y estamos aquí. Dime ¿Qué planeas hacer? 

Yuuji: (Nervioso) ¿No vas a darme una explicación? ¿Alguna excusa? Sabes que los ví, a tí y a Megumi. 

Sukuna: Sé perfectamente que nos viste ese día y lo de darte una explicación está de más, no voy a gastar saliva contándote lo que fue obvio al vernos.

Yuuji se sintió horrible al escucharlo decir eso.

Yuuji: (triste) ¿Desde cuándo Sukuna? ¿Desde cuándo has estado viéndote con mi amigo?

 Sukuna como siempre, se molestó. 

 Sukuna: No tiene mucho tiempo desde que me interese en Megumi, todo empezó desde el día en que me lo presentaste.

Yuuji: (nervioso) ¿Lo amas? 

 Sus ojos de cristalizaron y todo su cuerpo empezó a temblar, se preparaba para obtener una respuesta que probablemente le quebraria en el alma. 

 Sukuna: Me gusta ese chico y espero poder llegar a amarlo. 

Yuuji: (Llorando) Supongo entonces que a mí ya no me amas. 

 Sukuna: Así es Yuuji, ya no siento nada por tí. Ambos teníamos en mente que lo nuestro jamás iba ser posible, nuestras familias se aborrecen así que es mejor dejar todo así. 

Yuuji le escuchaba mientras sus lágrimas salían sin control de sus ojos y su rostro reflejaba el ejemplo claro del concepto de dolor. 

Sukuna: Ya no quiero perder más el tiempo, está será la última vez que nos tengamos de. Solo te pido que no molestes a Megumi con todo esto. 

Yuuji pasó de estar triste y decaído a molesto y enfadado. 

Yuujii: Te conozco bien Sukuna así que tú postura no me molesta y te prometo que no te voy a molestar pero lo que yo le diga a Megumi es asunto tuyo. 

Sukuna molestó sujeto a Yuuji de ambos hombros y lo recargó hacia un árbol. 

Sukuna: Que no es asunto mío ¿Dices? El y yo tenemos algo y te diste cuenta tú mismo así que como verás, sí es asunto mío. Y te advierto que no digas ni hagas una estupidez.

Yuuji se había impresionado ante la reacción de aquel hombre que siempre lo había tratado con delicadeza y cariño.

Eso confirmó que ya no había nada, todo aprecio de Sukuna hacia él había dejado de existir como una llama que el aire apagó. 

UN ÚNICO ANHELODonde viven las historias. Descúbrelo ahora