XII. Angels Dream

612 73 11
                                    

Taehyung no sabía donde se encontraba, pero la imagen de los árboles altos, los rayos del sol en lo alto dándole una sensación de bochorno, el sonido del agua corriendo detrás suyo en el estanque y las casas de madera frente a él eran un escenario perturbadoramente familiar.

Al igual de la sensación de dolor ardiente en su estómago y de ahogarse con algo viscoso en su interior que trepaba por su garganta haciendo que tosiera y cayera de rodillas manchando sus pantalones blancos con tierra.

Llevándose las manos a la boca es cuando nota que tiene sangre manchando en ellas.

-Realmente no me vas a mentir, ¿Verdad? Eres un mentiroso terrible.-dice una voz distorsionada. -No me dejaste otra opción Taehyung.

Taehyung mira hacia arriba y solo alcanza a vislumbrar una figura alta oscura, la luz del sol no dejándole ver bien la cara de su atormentador.

-No estoy mintiendo.-dice con dificultad, tosiendo de nuevo. La garganta le ardía, como si hubiera tragado fuego. Sentía sus miembros pesados dificultando el ponerse de pie.

-Claro que lo estás haciendo. Ibas a huir con aquel plebeyo, con un cheonmin, ibas a poner el nombre de la familia Kim en vergüenza. -escupe con furia. Taehyung trata de hablar pero un gorgoteo sale en su lugar. -Créeme me duele más a mí que a ti. Tú me orillaste a hacerlo, lo hago por tu bien y el de tu familia.

La sombra le arroja algo al suelo a lado del hombre moribundo, una flor de capullos azul violáceo de tallo largo y curvado, un Aconitum fischer. Había sido envenenado.

El cabello castaño largo de Taehyung que antes estaba perfectamente peinado se escurría por su frente y rostro, pegándose por su sudor frío. Tenía tanto frío que empezó a temblar.

-Si me hubieras escogido Taehyung, te hubiera servido hasta el fin de mis días. Le daré saludos de tu parte a aquel hijo de kisaeng que se hace llamar un cantante prodigio.- Se burla.

Taehyung sabía lo que aquel hombre sin rostro haría después, si está sombra fue capaz de envenenarlo no se quiere ni imaginar lo que le haría al otro. No recuerda nada, no sabe qué está pasando, pero si puede sentir toda esa rabia que hierve en su interior. Sus ojos se llenaron de lágrimas por la impotencia de no poder hacer nada. Había sido tan ingenuo y ahora estaba marchitándose a los pies de este sujeto.

-¡Taehyung! -escucha que alguien más grita su nombre, de nuevo la voz está distorsionada pero a diferencia del hombre frente a él no le causa rechazo -¡¿Taehyung que sucede?! -por el temblor de la voz aún lejana cree que la otra persona desconocida está llorando.

No puede ver. Su visión de está volviendo cada segundo más borrosa y oscura.

-Tú niño de oro ha llegado. Lamento que no lo suficientemente pronto como para que puedas despedirte. -dice seguido de un ruido metálico cortando el aire.

Quiere pedirle al otro que venia en camino que se vaya. Que no era seguro. Pero de su boca solo salía aquella sustancia de color rojiza con sabor a metal. Taehyung tiembla y llora en el suelo lleno de tierra. Implorando a las deidades que le den otra oportunidad de hacer las cosas bien.

—Suerte para tu siguiente vida Kim Taehyung.

Taehyung despierta de golpe, jadeando en busca de aire, con un dolor oprimiendo su pecho y sus ojos llenos de agua salada. Divisa su alrededor con pánico, el sol deslumbrante de la tarde es cambiado por una leve luz mañanera opacado por las cortinas, el suelo lleno de tierra por una superficie suave y su cabello largo ahora fuera de su cara.

Angel by the Wings  | KookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora