XVIII. The Exit

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Que pasaran tres días no era nada malo, era un tiempo válido, Taehyung solo quería ver qué tanto podía extender su tiempo con Jungkook.

Actualmente ambos estaban acurrucados en el largo sofá. Bam dormido en su cama cerca de ellos y Taehyung colocaba su cabeza en el hombro del idol. Usando sus alas como una cobija improvisada.

Jungkook deja de ver la televisión y se enfoca en las plumas rosadas a su alrededor.

—ángel—empieza Jungkook, el susodicho solo tararea en reconocimiento—Tus alas han crecido el doble de lo que recordaba.

Taehyung se ríe, jugando entre sus dedos con el dije de su collar. Jungkook se lo regresó el día después de que él regresara de su pequeña visita del cielo. Recordándole que ya habían pasado tres días y seguía sin tener ninguna intención de borrarle la memoria al idol en un futuro próximo.

—Mi energía regresó—dice. Jungkook lo mira confundido.

—No se supone que deberías, ya sabes.

—Aún hay tiempo.

—Tae, no quiero meterte en problemas.

—No lo harás—Taehyung se mueve de su posición, para sentarse a horcajadas y tomar las mejillas del menor entre sus manos, mirándolo a los ojos—es mi decisión Jungkookie, no debes de sentirte culpable por mis acciones—dice con convicción, finalizando con un casto beso.

Jungkook está perdido mirando los ojos de Taehyung brillando con un rayo de esperanza, y es un hombre débil para el ángel, lo que le hace asentir con la cabeza.

—Bien—sonríe dándole otro beso en los labios de manera rápida.

—Sabes me podría acostumbrar rápidamente a esta forma de persuasión.

Taehyung se ríe tímido. Sus alas se desplegaban hacia atrás de manera tímida. Jungkook levantó una ceja notándolo.

—Son demasiado sinceras—Taehyung lo mira interrogativo, preguntando a qué se refería, Jungkook hace un gesto detrás de él.

El ángel gira los ojos. Sus malditas alas traicioneras.

—Son una extensión de nosotros—explica simple.

El idol le lanza una sonrisa socarrona.

—No empieces.

Jungkook acerca a Taehyung y besa las mejillas.

—No se a que te refieres—Jungkook solo susurra, sus labios rozan los de Taehyung. Luego una interrogante pasa por la mente del idol y se aleja para preguntar:—¿Solo tú no tienes las alas blancas o los demás también?

Taehyung se ríe pensando que su humano estaba bromeando, al ver que Jungkook se veía realmente curioso, quita su sonrisa y le da una larga mirada al idol.

—Jungkook, ¿de qué hablas? Ya te había dicho sobre ello, incluso sabes que Jimin al igual que yo sus alas no son blancas.

—¿Quién es Jimin?

Siente como si le hubieran lanzado un balde de agua fría.

Las palabras de Jimin resuenan en su cabeza. Él había dicho que una vez que recuperara su energía Jungkook perdería sus recuerdos.

—¿Qué sucede ángel?

Taehyung no responde.

En cambio, toma el rostro del idol con el pulgar acariciando inconscientemente la cicatriz en la mejilla antes de capturar sus labios en el beso más suave. Siente el cosquilleo, desde la punta de sus dedos de los pies hasta sus labios, transmitiendo su energía a Jungkook.

Angel by the Wings  | KookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora