Introducción: Jimin

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Hola, soy Park Jimin, tengo veinte años, soy bailarín y estudio administración de empresas en KIUS, la universidad más prestigiosa de toda Corea del sur.

Nací el trece de octubre de mil novecientos noventa y cinco en Corea del Sur, Busan para ser más exactos, mis padres son chefs muy reconocidos en el mundo de la gastronomía y ambos son dueños y cofundadores de una de las cadenas de restaurantes más importantes del país y a nivel internacional, debido a eso, nos mudamos a Seúl hace siete años, pero al yo cumplir la mayoría de edad, mis padres y mi hermano menor decidieron volver a Busan, mientras que yo decidí permanecer en Seúl para comenzar mis estudios en KIUS.

La mayor parte del año la vivo en el campus, y en las vacaciones viajo a Busan para pasar tiempo de calidad con mi familia, mi vida en la universidad es realmente asombrosa, no es por presumir, pero la escuela siempre se me ha dado bastante bien, además de que mis mejores amigos están en KIUS.

En mis tiempos libres, formo parte de la compañía de baile "Hope World", una de las mejores compañías de baile en Seúl, junto a dos de mis mejores amigos, que, por cierto, uno de ellos será alumno de nuevo ingreso este año en KIUS. Los días que no asisto a la compañía, a veces los paso en las salas de baile del campus, a pesar de que no formo parte de ninguna facultad relacionada al arte, ser amigo del hijo del dueño te da bastantes beneficios que a veces es bueno aprovechar, como poder usar la sala fuera de los horarios estudiantiles. Dado a que KIUS es una universidad internacional, me vi forzado a aprender inglés una vez ingresé ya que la mayoría de las clases son en inglés, cientos de chicos y chicas de diferentes países ingresan cada año, y es divertido poder conocer a personas con culturas distintas a la mía.

Durante mi adolescencia siempre quise tener una novia, una compañera de vida, alguien que me entienda, con quien sienta una conexión instantánea y me provoque las famosas mariposas en el estómago con solo verla, creí que entrando en la universidad eso podría pasar, pero creo que la suerte no está de mi lado ya que solo he tenido malas experiencias y no paso de la etapa de "conocernos". Todos mis amigos han tenido pareja, y si bien, he salido con chicas, con ninguna he sentido esa conexión especial que tanto busco, los chicos dicen que es porque me esfuerzo demasiado en encontrarla, así que esta vez, dejaré de buscarla, dejaré que llegue a mí, solo espero que sea algo mutuo, la verdad es que no pido mucho.

Sábado 05 de marzo de 2016.

El tren se detiene y el conductor indica por el altavoz que finalmente hemos llegado a Seúl. Esté semestre me siento más emocionado que en los anteriores, por fin estarán todos mis amigos en KIUS, también me enteré de que abrirán un programa de intercambio de cada una de las facultades a la universidad más importante de cada país, así que esta podría ser mi oportunidad de probarme si soy lo realmente capaz como para ganarme el intercambio.

Una vez bajo del tren con mi maleta y bolso en mano, camino hasta dar con la acera y los autos transitando, miro a mi alrededor asegurándome de que el trabajador de mi padre se encuentre con las llaves de mi auto cómo siempre, una vez lo encuentro me acerco a él.

— Buenas tardes señor Park — dice haciendo una reverencia para después tomar mi maleta y colocarla en el maletero.

— Buenas tardes — respondo imitando su gesto.

— Aquí tiene — me entrega las llaves — que tenga buen día — dice haciendo una reverencia nuevamente.

— Gracias, igual — sonrió.

Me acerco al auto y subo al asiento del piloto, paso mis manos por el volante y me aseguro de que todo esté en orden, una vez he terminado mi pequeña inspección, enciendo el motor y comienzo a conducir.

Al llegar al campus puedo notar que hay más extranjeros que en semestres anteriores, miro como van perdidos sin rumbo alguno mientras los monitores se acercan a ayudarlos y colocan su equipaje en pequeños carritos para poder trasladarlo. Finalmente logro distinguir a dos de mis amigos y me acerco a ellos con una gran sonrisa que al instante es devuelta por ambos.

— ¿Qué tal el viaje? — pregunta Hoseok dándome un abrazo.

— Aburrido — respondo divertido — ¿tú padre te dijo algo sobre el programa de intercambio? — pregunto curioso mirando a Yoongi.

— Digamos que está preocupado en otro tema más delicado por ahora — dice burlón — tema que ya no debe de tardar en llegar — dice mirando la larga fila de autos. Lo veo confundido sin entender de qué habla, pero así es Yoongi, no puedo pedir mucho.

— ¿Ya viste alguna chica que te interese? — pregunta Hoseok picando mi abdomen con sus dedos índices al notar que me quedo mirando a las personas llegar.

— Ya basta de eso, este semestre no buscaré ni saldré con nadie — digo firme mientras contengo una risita — mi romance universitario será con los libros de estadísticas.

— Sonaste como Namjoon — dice Yoongi sin mirarme provocando que Hoseok suelte una carcajada.

Este semestre solo me concentraré en el programa de intercambio, solo tengo que esperar pacientemente y dejar que todo fluya, y bueno, que pase lo que tenga que pasar.

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