Sempiterno [Jumin Han x MC]

» Capítulo 23 ⁋

P.O.V. MC:

-¡MC, ya han llegado todos los invitados!.- Dijo Rika.

-¿El catering ya lo tiene todo preparado?.- Pregunté.

-Si, lo acabo de comprobar. Al igual que los dos reporteros a los que contactaste, ya se encuentran entre los invitados.

-¡Perfecto!. Entonces ya está todo en marcha.

-Es tu momento de decir unas palabras para inaugurar oficialmente la fiesta. Así que adelante.- Me sonrió.

Me dirigí decidida entre toda la gente hacia el escenario principal de la sala. Mis compañeros de la RFA también iban a acomodarse en primera fila para escuchar lo que tenía que decir. Intenté calmar mis nervios según estaba subiendo, había una cantidad abrumadora de gente.

-Buenos días a todos y muchas gracias por acudir hoy a nuestra fiesta benéfica.- Comencé a hablar captando la atención de todos los presentes y aplaudí después de mis palabras correspondida por el resto.- Primeramente os preguntaréis quién soy yo. Me presento, soy MC ___(t/a), una nueva miembro de esta maravillosa organización, la RFA.- Volvieron a llenar la sala con un fuerte aplauso.- Me uní a esta organización por petición de mi gran amiga Rika, fundadora de la misma. Las dos hemos querido ayudar a los más necesitados desde que éramos bien pequeñas, y en las ideas de ella siempre estuvo fundar algo, no tenía muy claro el que, para poder dar una gran ayuda. Por diversos motivos no pude unirme desde un principio, pero ahora aquí estoy dándoos esté discurso.- Me reí y el público lo hizo conmigo.- Quiero agradecer a todos los miembros por hacer esto posible y por confiar en esta gran mujer, si no fuera por la ayuda de todos no hubiera sido posible. 

Fijé mi mirada en mis compañeros, Rika estaba algo sonrojada y el resto tenían una sonrisa agradecida a mis palabras. 

-Bueno, voy al grano para que todos podamos disfrutar de esta maravillosa fiesta. En el día de hoy he querido preparar una pequeña sorpresa para mis compañeros y también para los asistentes. Como bien sabréis todos los fondos recaudados hoy van íntegros para diferentes organizaciones legítimas que ayudan a personas necesitadas y pensé. ¿Podríamos ayudar a mas gente de alguna otra manera?. Y creo que sí. 

Un fuerte murmullo empezó a cubrir la sala, caras de sorpresa y de no entender que es lo que iba a hacer. Los nervios volvieron a mi de una forma abrupta, empezando a temblarme ligeramente las piernas. ¿Me estaban juzgando?. Volví a mirar a mis compañeros, sobre todo a Rika, la cual con gestos y una gran sonrisa me alentó a seguir.

-Durante estos meses me he recorrido las calles de Corea buscando talentos ocultos en ellas. Y decidí que diferentes grupos callejeros nos amenicen con su música durante toda la velada, al igual que otros diferentes talentos que estarán con nosotros.- Inspiré y expiré fuerte intentando calmarme.- Todos han venido sin ánimo de lucro, solamente para poder hacerse visibles. La mayoría de los aquí presentes hoy, tenemos el poder. El poder de cambiar la vida de estas personas que no son visibles por su falta de recursos. Me explico mejor. Igual en el día de hoy veo a un pintor callejero y me fascina realmente su arte, puedo comentárselo a algún conocido que se mueva por ese mundillo y así proporcionarle una pequeña ayuda. Con todo esto no quiero decir que estéis obligados a hacerlo, solo que disfrutéis y los observéis. Igual hoy de aquí sale algún nuevo prodigio.- Me reí con nerviosismo y todo el mundo comenzó a aplaudir vitoreando mi idea.- Agradezco mucho su atención y pido disculpas por haberles robado todo este tiempo. Disfruten de la fiesta y como siempre, os avisaremos cuando empiece la subasta de las obras de nuestro gran fotógrafo V. 

Bajé del escenario avergonzada y con miedo por la reacción de mis compañeros, los cuales rápidamente me rodearon. 

-¡Es una maravillosa idea MC!.- Exclamó Rika abrazándome.- Nunca se me había ocurrido eso, es maravilloso poder ayudar aún a más gente. ¡Supe que sería genial tu aporte de ideas en nuestra organización!

-¡Oh!.- Sonreí aliviada.- Gracias Rika. Y gracias a todos por aceptarme y dejarme cometer estas locuras.

Durante un rato estuvimos hablando del mismo tema, observando a los diferentes artistas que había invitado y valorando sus aptitudes. Parece que a todos les gustó esta pequeña sorpresa.

La fiesta continuó y para mi grata sorpresa muchos de los artistas callejeros llamaron la atención de los invitados de la fiesta, ofreciéndoles tarjetas de contacto. El catering fue a la perfección, la comida esta riquísima y los postres triunfaron. Tuve que dar alguna pequeña entrevista a los dos reporteros invitados hablando un poco sobre mi llegada a la RFA y sobre la propia fiesta. Muchos invitados me paraban también a hablar, algunos me conocían por mi padre y otros solo querían saber un poco más de mi. 

A media tarde unos bailarines callejeros se adueñaron de la atención de todos. Eran fantásticos con unos movimientos impecables. Alguna gente se empezó a unir a ellos amenizando la fiesta y cuando empezaron a tocar una canción movida Zen me invitó a bailar.

Durante un rato estuvimos disfrutando con diferentes bailes y coreografías creadas al momento, por suerte Zen sabía meterse bien en cada papel. Mis pies empezaban a pedirme un descanso y decidí parar antes de que me matara el dolor. 

Me alejé con el albino hacia un balcón para tomar aire del exterior, necesitaba un poco de calma después de todo el día.

-Ya está empezando a anochecer.- Sonreí acercándome a la barandilla.- Creo que la fiesta a salido bien. ¿Tú que opinas Zen?.

-Creo que salió espectacular.- Se posicionó a mi lado, sacó un cigarrillo de su cajetilla y lo prendió.- Hacía mucho tiempo que no lo pasaba tan bien. Has tenido una idea maravillosa que encantó a los invitados.- Me sonrió dando una calada. 

-Me alegra poder contribuir positivamente en lo que vosotros habéis trabajado tanto.- Suspiré.- Pensé en el último momento que no iba a gustar.

-Eres maravillosa MC.- Fijó su mirada en mi.- En todos los sentidos.

-Vosotros si que sois maravillosos por apoyar a Rika.- Sonreí y le robé su cigarro.- Necesito un poco de esto ahora.

-¿Pero tú fumas?.- Preguntó extrañado. 

-No, me gusta cuidar mis pulmones.- Reí.- Pero hoy lo necesito, he estado bajo mucho estrés. 

La puerta se abrió de golpe y apareció un pelinegro de mirada grisácea intimidante. Se acercó decidido a nosotros con una ligera cara de enfado.

-¿Qué estáis haciendo los dos aquí solos?.- Preguntó.- ¿Y tú que haces con eso en la boca?

-¿Te importa?.- Pregunté retorica.- Porque yo creo que no. 

-Zen, te están buscando dentro unos productores interesados en tu interpretación.

-¿En serio?.- Sonrió ampliamente.- Entonces debo ir a buscarlos rápidamente. ¡Luego nos vemos MC!

Zen entró corriendo dejándome sola con el malnacido de Jumin. Me suena a estrategia para lograr que se fuera.

-Debería de entrar yo también.- Apagué la colilla en un cenicero y me dispuse a entrar pero agarró fuerte mi mano.

-Quédate conmigo.- Dijo imponente acercándome a él.- Tenemos que hablar.