• Capítulo 21 ↨

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P.O.V. MC:

Tres días habían pasado del evento de mi padre y no había recibido ni un solo mensaje de Jumin. Nuestra foto desapareció de su perfil y las pocas veces que cuadrábamos en el chat de l RFA sutilmente parecía poner distancias. No voy a negar que todo esto me dolía, más de lo que había pensado. Ayudar a este hombre me había traído muchas cosas buenas y malas a la vez. Gracias a él he conseguido el valor necesario para salir del agujero en el que me encontraba por culpa del innombrable y mi padre, pero a la vez me había empezado a... ¿gustar?. Podríamos llamarlo así, creo. Y ese beso fue mi completa perdición, sabía como hacerlo, noté algo de experiencia. Y lo peor es que lo hacía bien, o por lo menos para mi. 

-Y encima debo ir a por Jaehee a su oficina. Espero no cruzármelo.- Hablé para mi mientras salía de mi apartamento.

Al llegar a las oficinas un pequeño nudo se instaló en mi estómago. Me miraba en el espejo del ascensor acomodando mi pelo y mi ropa por si lo veía, emoción y vergüenza al mismo tiempo. Salí decidida y a la vez maldiciendo a mi yo del pasado por la decisión de la ropa. Quería ponerme algo cómodo, unos vaqueros, playeros y una camiseta de manga corta ajustada, el calor ya se hacía paso, pero después recordé que a Jumin no le gustaba mi manera de vestir, entonces así no iba a ayudar mucho.

-¡Cálmate!.- Pensé recorriendo el pasillo.- Si te quiere, lo tiene que hacer según eres. 

Llegué a la oficina de Jaehee sin rastros del heredero por ningún lado. La saludé con un abrazo y un beso en la mejilla mientras le decía un par de piropos.

-¡Te he echado mucho de menos aquí!.- Dijo Jaehee con emoción.

-Yo también a ti, sobre todo nuestras charlas con el café.- Sonreí.- ¿Está Jumin por aquí?.- Pregunté en voz baja.

-Estará a punto de llegar. ¿Quieres que lo llame y le diga que estás aquí?.

-¡No!.- Exclamé.- Solo era por saber. ¿Cuánto te falta para terminar?. Rika me dijo que la avisara.

-Solo tengo que acabar con estos papeles y ya estaría lista. ¡Es emocionante pasar una tarde de chicas con vosotras!

-Y más emocionante va a ser el vestido tan divino que te vamos a mirar para impresionar a Zen.- Le guiñé un ojo.

-¡Yo solo soy fan de él!. Os estáis equivocando las dos.- Rechistó.

-¡Qué si!. ¡Qué si!.- Me reí.- No te entretengas y termina, que si no nos van a cerrar las tiendas.

Me acomodé en una silla y empecé a jugar con mi móvil a diferentes juegos mientras Jaehee terminaba su trabajo. Estaba aliviada al saber que Jumin no estaba, y si Jaehee era rápida, lo más seguro es que no llegáramos a cruzarnos. Ilusa de mi.

-¿Qué haces tú aquí?.- Una voz varonil sonó en mi espalda haciendo que cada parte de mi cuerpo se estremeciera.

-J-jumin.- Conseguí responder desviando la mirada hacia él.- E-estoy esperando a que Jaehee termine, hemos quedado con Rika para ir a comprarnos la ropa para la fiesta. 

-Aja.- Su mirada era penetrante.- Se me hacía raro que quisieras verme, pero ya entiendo el motivo de que estés aquí.- Se giró.

-¡Jumin!.- Exclamé sorprendida por sus palabras.- Yo...

-No hace falta que te disculpes, todo fue un error.- Carraspeó sin mirarme.- Jaehee, termina pronto para que esta mujer pueda irse de aquí.

Entró en su oficina cerrando la puerta de un golpe. Jaehee estaba incrédula ante lo sucedido, sin decir nada. Sus palabras me habían roto, parecía que había pisoteado completamente mi corazón. Mi cara estaba seria, sin rastro de emoción. Quería ponerme a llorar en ese preciso instante pero no iba a dejar que nadie me viera así, tan rota. ¿Para él no significó nada nuestro beso?. ¿Por qué hizo todo lo que hizo?. ¿Quién se creía que era para jugar así conmigo?. Mierda, sabía que eran los efectos del alcohol y que seguramente todo lo hizo involuntariamente, pero no había necesidad de ser así.

-¿Te encuentras bien MC?.- La suave voz de mi amiga me sacó de mis pensamientos.

-Claro que sí.- Le miré con una sonrisa.- Tremendo capullo no va a conseguir hundirme.- Levanté la voz mirando hacia su puerta para que se enterara.

-Desde aquel día noto mucha frialdad entre vosotros.- En su cara se mostraba una expresión de pena.- Ya terminé con todo, cuando quieras podemos irnos.

-¡Perfecto!.- Me levanté de un salto de la silla.- Dame un momento, vete agarrando tus cosas.

 Me dirigí hacia la puerta de su oficina con algo parecido a un brote neurótico, estaba muy enfadada y se lo iba a dejar claro. Empujé la puerta abriéndola de par en par y el levantó su mirada hacia mi, una loca en la entrada de su oficina que solamente la faltaba salir humo por las orejas.

-¡Eres un auténtico capullo!.- Exclamé con ira.- ¿Te gusta hacer eso con las mujeres?. ¿Seducirlas para luego ni mandarles un mensaje y tratarlas como basura hasta que te de un calentón?. ¡Qué sepas que conmigo eso no funciona!. ¡Confié en ti y me dejé llevar pensando que tu sentías lo mismo que yo!. ¡Qué estúpida fui por confiar en un hombre que se piensa que con dinero todo lo soluciona! ¡Capullo!.- Cerré de un portazo sin dejar que me contestara. 

Jaehee me miraba con sus cejas arqueadas y su bolso en la mano. Me limité a hacerle un gesto para irnos mientras reprimía mis lágrimas, sabía que si hablaba lo más mínimo iba a salir una cascada de mis ojos. Mientras el ascensor bajaba le mandé un mensaje a Rika diciéndole nuestro punto de encuentro.

En el trayecto Jaehee sintió curiosidad y le expliqué por encima lo sucedido y dejé salir el dolor que me provocaba. Lo insulté de todas las maneras que sabía, produciendo al final que ella estallara en una sonora carcajada.

-Deberíais hablar las cosas MC. Te puedo asegurar que nunca vi a Jumin tan bien como lo he visto estos meses contigo. Igual solo es un malentendido.

-¡Estás loca! Yo con ese ser repulsivo no tengo nada de que hablar. Me ha dejado muy claro todo hoy. No me he librado de un asqueroso para juntarme con otro.

-¿De qué ser repulsivo habláis?.- Escuchamos la voz de Rika acercándose.

-Peleas de enamorados.- Contestó Jaehee despreocupada.

-¿Jumin y MC?.- Sonrió.- Son el uno para la otra.

-¡No estamos enamorados!.- Rechisté con molestia.

Jaehee le hizo un breve resumen de lo sucedido y las dos empezaron a conspirar en mi contra. Rika me aseguraba que Jumin era buen chaval, pero un poco raro y Jaehee hablaba de el brillo en los ojos que nos salía cuando estábamos juntos.

-¡Iros a la mierda!.- Exclamé rendida.- Entremos en la tienda ya, que yo quiero tener para mañana un vestido que rompa corazones.

-¡Uy!. Alguna quiere provocarle un paro cardiaco al futuro heredero.- Dijo Rika dándole suaves toques con el codo a Jaehee.

-Eso sería perfecto. Así no tendría que soportarlo nunca más. 

Sempiterno [Jumin Han x MC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora