prólogo

475 23 10
                                    

Aun recuerdo la vez que te vi en aquel callejón oscuro, temblabando del miedo y a la espectativa. Pude sentir cada parte de mi cuerpo romperse al ver en la situación en la que te encontré.

Sé que en el pasado fui un completo idiota contigo, pero la vida se encargó de demostrame lo equivocado que estaba. Hoy, después de dos años de tu partida, aún me aferró a los momentos que pase contigo en vida, como si fuera mi vida, y es que en cierta forma así es. Tu recuerdo hace que quiera seguir adelante. Este mundo tan cruel no merecía a una chica tan extraordinaria y llena de luz como tú, pero a la vez tan rota y destrozada. Este mundo se encargo de destruirte, mi niña linda. Hice todo lo posible para que tú te quedarás, pero estabas tan rota que te cortaste muchas veces con tus vidrios.

Todo el tiempo que estuviste conmigo fueron los momentos más felices de mi vida. Un año y tres meses, cariño, en los que me hiciste vivir de nuevo. Yo no merecía que tú estuvieras junto a mi. Fui un idiota contigo, y aún así tú siempre estuviste ahí, sonriendo. Llenando mi vida de luz.

Tú me salvaste... Y yo no pude salvarte a ti.

"En memoria de Elizabeth Ortega"

Oh, bichito, cuánto te extraño.

Acarició su lápida con la yema de los dedos, sintiendo un horrible dolor en mi pecho.

—La extraño mucho—hable después de un rato, con la voz entrecortada. Bill me miró, acercándose a mi para abrazarme.

—Todos la extrañamos, Tom. Nada volvió a ser lo mismo después de ella.

Tragué saliva, sintiendo mis mejillas humedad. Entiendo tus razones, mi dulce niña. Pero eso no lo hace menos doloroso. Abrazo el cuerpo de Bill, aún viendo su tumba.

—Si yo fuera...

Bill me calló, negando con la cabeza.

—Nadie pudo evitarlo, Tom. Nadie.

Negué con la cabeza. Tal vez yo si hubiese podido evitarlo. Tal vez si hubiese puesto más empeño ella fuese tomado la decisión de quedarse. Pero ahora eso se quedaba en un simple tal vez.

Un Año Y Tres Meses Donde viven las historias. Descúbrelo ahora