El Consorte Real ||Omegaverse Luzuplay||

Décimo Sexto Amanecer

⊰⁠ ⊹ Atentado ⊰⁠ ⊹

Narrador Omnisciente:

Poco después de los saludos aquel sacerdote comienza a mostrarle el templo al Omega con un poco más de detalle, cosa que Auron agradecía totalmente, el moreno era devoto a su propia diosa, pero no le molestaba aprender sobre otros dioses o religiones, incluso le beneficiaba, aún no había olvidado aquella idea de curar la maldición de Luzu.

Mientras caminaban el moreno se quedo viendo un símbolo tallado en la pared, se trataba de un círculo dentro parecía haber líneas curvas que se enlazaban unas con otras rodeando a lo que parecía ser el sol.

-¿Lindo no? Es el símbolo que representa la unión entre la diosa Darin y el Dios Zuva.

Auron se quedó callado un momento, para después voltear a ver a aquel sacerdote -¿Diosa Darin?

El sacerdote asintió con la cabeza -La diosa del cielo, ella fue la esposa y única amada del dios del sol.

Pronto aquel sacerdote le pregunto a Auron si conocía sobre la historia del dios del Sol, ante la negativa del moreno aquel chico comenzó a contarle la historia del Dios Zuva con una sonrisa mientras seguían caminando.

-Cuando la tierra fue creada estaba en la completa nada, no había Luz, calor o vida que pudiera crecer aquí, la única habitante en esta eterna oscuridad era la diosa Selene.

-La diosa de la Luna -Agrego Auron, a lo que él sacerdote asintió con la cabeza.

-Fue ella quien uso parte de su poder y de una pequeña llama creo al Dios Zuva, pero era inestable y débil, por lo que fue necesario darle la mitad de sus poderes para el él pudiera nacer como un Dios, para su suerte, esto funcionó y el dios del sol fue creado.

Auron no sabía esta parte de la historia, en casa los sacerdotes solo les enseñaban sobre que la diosa luna fue la primera en aparecer en este mundo y fue ella quien creo el mar y la noche, incluso intento darle vida a criaturas nocturnas pero nunca funcionó, fue hasta que el dios del sol llegó y la ayudo con la creación.

-Dado a que el Sol fue creado gracias a la Luna, corría peligro de desaparecer si estaba cerca de ella mucho tiempo, la magia siempre regresa con su dueño, fue por eso que lo primero que hizo junto a la luna fue separarse, pusieron horas y lugares para nunca estar en el mismo al mismo tiempo, dando como resultado el día y la noche.

Auron ladeó la cabeza, eso también lo escucho en casa, le dijeron que la Luna no podía estar cerca del sol por mucho tiempo, el sol era inestable y si estaba cerca de alguien tan calmado y frío como lo era la Luna podría ocasionar que el sol explotase.

-La vida comenzó después de que estos dos dioses comenzaron a existir, Zuva daba vida, fiestas, alegría y emociones fuertes, todo lo bueno que trae el día, aún que eh de admitir que apesar de eso el Dios Zuva era bastante explosivo y duro de tratar.

Auron alzó una ceja, al parecer ambos dioses eran contrarios, pues mientras el sol representaba todo eso, la Luna daba muerte, rezos, desahogos y tranquilidad, incluso se describía que ella era misericordiosa, sabía y calmada, como una madre amorosa.

-Entonces debería tener cuidado al hacer mis rezos -Comento Auron con media sonrisa.

Aquel sacerdote sonrió -Oh, claro que debes ser cuidadoso con tus rezos, pero no te preocupes mucho por la actitud del Dios, él solía ser así, por lo menos antes de conocer a su esposa, ella fue la única que pudo ablandar el fuerte corazón del Dios Zuva, la que hizo que fuera más amable y accesible, es gracias a ella que el sol nunca exploto.