Cuarto amanecer

555 81 125
                                    

⊰⁠ ⊹ Supresores ⊰⁠ ⊹

Narrador Omnisciente:

Aquel Alfa de ojos azules y cabellos castaños, comenzó a acercarse a aquel bonito lobo, jamás había visto lobos por el país y menos por esta área, por lo que le parecía bastante extraño encontrarse con uno ahora, así que no pudo evitar acercarse a aquel magnífico animal.

Tan pronto el lobo de pelaje oscuro noto al Alfa, detuvo sus movimientos, mirándolo con atención ¿Quién era ese tipo? No debía confiarse, tal vez otra mala persona que quería dañarlo, por lo que quiso alejarse con cautela, sin embrago volvió a detenerse casi de inmediato cuando noto las feromonas del chico, uvas y vino, ese olor, era uno que ya había olido antes.

Ante esta acción por parte del lobo, Luzu decidió usarla como una oportunidad, así que continuó acercándose, hasta que solo los separaban unos pocos metros.

– Oh, no me tengas miedo ¿Si? No te haré daño, solo quiero verte más de cerca – Dijo el chico de ojos azules con una voz dulce.

Tras este comentario, junto a las feromonas tan deliciosas que desprendía este Alfa, hicieron que Auron perdiera un poco el sentido común, por lo que simplemente se dejo llevar un poco, acercándose él al castaño, con la cabeza baja.

Luzu miro esto con una sonrisa, alzó una mano lentamente hasta llegar a la cabeza del lobo, acariciándolo un poco y rascando detrás de sus orejas, cuando el Alfa sacio su pequeño capricho, soltó una risa por lo bajo, haciendo que Auron alzará la mirada, notando el pequeño sonrojó y las pequeñas arruguitas que se le formaban en los ojos al reír, haciendo que se quedará un poco embobado, pensado que Luzu tenía una risa muy bonita.

– Sabes, es raro ver lobos como tú por aquí ¿Eres mascota de alguna de las Omegas que están aquí? – Preguntó mientras se sentaba frente al Lobo, cruzando sus piernas, mirándolo aún con brillos en los ojos.

Así que este Alfa también era parte del castillo, tal vez era un noble como Juan y estaba allí para ver a una de las Omegas, el lobo ladeó la cabeza con curiosidad, tal vez lo mejor era decir que si era mascota de alguien, por lo que termino asintiendo con la cabeza.

Luzu abrió los ojos con sorpresa – ¿Puedes entenderme? – Auron nuevamente asintió con la cabeza – Oh, entonces a parte de ser un lobo muy bonito, eres inteligente –

Auron miro al castaño con algo de nervios ¿Un lobo bonito? ¿En verdad pensaba que era bonito? Era la primera vez que se sentía extrañamente especial al escuchar un cumplido como ese, se sentó al lado del Alfa, sin embrago volteo la cabeza y la mirada a otro lado.

Luzu dejo salir una media sonrisa, para después mirar al río que estaba de frente – Este río es bastante especial para mí, vengo aquí cuando estoy estresado o cuando quiero poner mis ideas en orden, es el mejor lugar que pude encontrar en donde podría estar completamente solo, es difícil llegar hasta acá, me sorprende que un lobito pequeño lo encontrará –

Dicho esto bajo sus manos, poniéndolas atrás de su espalda, mirando de nuevo al lobo – Pero estoy dispuesto a compartir mi lugar especial contigo, solo por qué fuiste capaz de llegar hasta acá sin problemas, eso y por qué te veías bastante lindo jugando y correteando mariposas ¿Qué dices? ¿Compartimos el lugar? –

Ante este comentario, la pena volvió al cuerpo de Auron, en verdad estaba apenado por su comportamiento de niño pequeño, se suponía que era un adulto y además príncipe, no debería estar jugando así con el agua, debía comportarse, aún que lo que más lo apenada era que alguien lo vio haciendo cosas tan vergonzosas, de no ser por qué estaba en su piel de lobo, seguro su sonrojo habría echo aún más grande, haciendo que asemejara a un tomate.

El Consorte Real ||Omegaverse Luzuplay||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora