All of us must die

𝟔. 𝐏𝐞𝐥𝐞𝐚

Hogwarts - 1971

Las vacaciones de invierno habían concluido, trayendo de regreso a todos los alumnos de Hogwarts. Con ello se reanudaban las clases y todas las actividades extracurriculares dentro de la escuela. Antes de regresar a la normalidad, James y Sirius, ayudaron a su amiga a llevar sus cosas de regreso a su habitación.

La primera semana de clases le tocaba a Arabella compartir con los Slytherin.

— ¡Gracias a Merlin! — la voz de Ophelia fue la primera que se escuchó en cuanto la Stark entró al salón — Te extrañé tanto — ambas niñas se fundieron en un cálido abrazo, sin querer soltarse.

— Yo también — murmuró Arabella, aún aferrada a su mejor amiga.

— Mmm ¿hola? — la voz de Dolohov se hizo presente — Nosotros también te extrañamos ¿sabes?

Aunque pareciera increíble, aquel grupo de Slytherin había desarrollado cierto cariño por la heredera Stark. Ahora la incluían en todos los planes o actividades que hacían como grupo, a pesar de ser Gryffindor por igual y que tuviera un carácter pesado (la mayoría de las veces). Los niños si la habían extrañado.

— Hola, chicos — al primero que abrazó fue a Dolohov — Yo también los extrañé — siguió Narcissa, luego Cassius, Severus Snape, después fue con Apolo quien volvió a besar su mejilla y por último Barty, con quien se fundió en un fuerte abrazo.

Los meses pasaban de volada, en un abrir y cerrar de ojos ya se encontraban en el mes de junio, a dos días de salir del colegio y regresar a sus respectivos hogares.

— No quiero ir a casa — le confesó Sirius a Arabella mientras caminaban por el pasillo — Me da miedo regresar... — se fundieron en un tenso silencio. En el que Black se arrepentía de lo que había dicho y Stark pensaba en que decirle.

— ¿Por qué no vienes a mi casa? — el ojigris la miró asombrado — Si, puedes pasar el verano con nosotros.

— ¿De verdad?

— Si

— ¿De qué hablan? — Potter había llegado con el cabello despeinado como siempre y el uniforme mal arreglado.

— Sobre las vacaciones.

— Ah, ¿te quedarás en tu casa, Anni?

— No lo sé, tal vez viajemos — se encogió de hombros.

El revuelo y la emoción de los alumnos de Hogwarts, era evidente por los pasillos. Todos hablaban sobre sus vacaciones, lo que harían, con quienes estarían, cuántas veces se verían durante este período, etc.

Arabella se dispuso en escribirle a sus padres sobre llevar a Sirius en las vacaciones, dándoles una lista de las razones por la cual era una buena idea que el niño los acompañara. Obteniendo un si, al día siguiente. Por otro lado, Sirius Black se encontraba nervioso, iba a conocer a los padres de su mejor amiga y le daba miedo no agradarles o que lo dejaran ahí cuando se enteraran de que era un Black. Al igual, le daba miedo ir (en algún momento) a casa de los Potter por la misma razón, o a la casa de Remus o a la de Peter. Estaba muy seguro que por su apellido no sería bien recibido en ningún lado.

— Nos vemos, chicas — habló Arabella en cuanto cerró su maleta. Fue a abrazar a Dorcas y le dio una mirada lejana a Marlene de despedida.

Bajó corriendo las escaleras para ir a la habitación de sus amigos.

— ¿Ya están? — fue lo primero que les preguntó al sentarse en la cama de Remus.

— Yo ya, faltan los demás — le sonrió James — ¿Quieres que te ayude a bajar tus cosas?