New Akatsuki Family

Capítulo X

Kakashi

Íbamos de vuelta a la cabaña, realmente fue una fortuna que Sakura y Narumi hayan decidido comenzar a explorar la cueva en caso de emergencia, ese hermoso lago estaba bien escondido en la montaña y podría ser un buen lugar para arreglar como un tipo búnker, había elementos que ayudarían en un ataque hacia nosotros de parte de Akatsuki, hoy más que nunca pude notar lo peligrosos que pueden llegar a ser y que aunque estamos muy bien escondidos, eso no nos libera de que podemos ser encontrados. 

―¿Oka-san, se encuentra bien?―Escuche la dulce voz de Sakura, en este tiempo que he compartido con ella, pude notar que su hogar era un muy disfuncional, sus padres no llegaron a tener ese afecto que se tiene con los hijos y esto creo un tipo desvinculo de Sakura hacia ellos, y al parecer lo compenso con él, a los ojos de ella, yo era su madre. Y para mí ella es mi hija.

―Sí, Sakura. No te preocupes―Le sonreí, aunque ella solo podía ver mi rostro.

Y al parecer no era el único que pasaba la misma situación, la relación de Hidan y Narumi era muy similar, había notado que la niña tenía una desconexión de sus emociones al mencionar a sus padres, fingía que no le importaba lo que sucedió en el pasado con ellos, pero era obvio que le afectaba, solo debías prestar mucha atención. Evitaba el tema y si no, le restaba importancia, su relación con los demás era buena, pero con Hidan era diferente, veia en él lo que perdió con sus padres, una conexión única y una forma de tener lo que una vez perdió, se esforzaba por mantener ese nuevo vínculo y que Hidan se sintiera cómodo con ella para que la amara, y Hidan, aunque lo negara, parecía comenzar a querer un poco a la niña, bueno mucho, en realidad demasiado, era de mano dura con la "crianza" y entrenamiento de ella, pero en sus ojos se veia que él la veia como su niña, su hija.

―Muy bien―Me tensé, había olvidado que iban hacia la cabaña―¿De quién es el cuarto más grande?

―El de nosotras, usamos ese cuarto para las dos, así no ocupamos mucho espacio―Escuche a Sakura que ayudaba a Shizune a cargar unos pergaminos, guiándolas a la habitación.

―Entonces, llamaré a uno por uno para revisarlos y decirles como va su estado, los demás se quedarán acá en la sala, no quiero que se muevan si no les doy permiso, ¿entendido?―Vi que miraba muy específicamente a Hidan, él solo hizo un puchero sabiendo que ella lo decía por él.

―Sí.

Me senté en uno de los sofás tocando mi vientre, realmente había crecido bastante, se me comenzaba a complicar, caminar o hacer cosas tan básicas como limpiar o ayudar a Sakura a entrenar, todos habían dicho que serían dos, y no es que a él le disgustara que fuesen dos, pero, no sabía si sería un buen padre para un solo bebe, ¿entonces sería bueno para dos? 

―Muy bien, Itachi-san, pasa por favor―Shizune salió de la habitación llamando a Itachi, él solo se levantó aparentemente tranquilo, pero en su mirada podía leer la preocupación y ansias de como iba con su embarazo.

―Agh, esto es muy agotador―Hidan como siempre siendo impaciente―Un momento―La manera tan abrupta en la que se levantó nos asustó a todos―¿Dónde está mi mocosa?

―En tu vientre, idiota―Dios, Daidara y Hidan nunca iban a cambiar.

―Hablo de la otra―Konan y yo nos contuvimos la risa al ver como se miraban entre ellos, pero a la vez alzamos una ceja, su mocosa, eh―Ni una sola palabra, ¿dónde está?

―Venía justo detrás de nosotros―Vi que Konan también se preocupaba, había comenzado a tomarle cariño a las niñas.

―Iré a buscarla―Hidan estaba decidido a salir, pero falto una mirada de Konan para que se detuviera.