K.O || Yuleria

32

Abrí los ojos despacio y miré alrededor de la habitación, dándome cuenta que es la de Valeria. Alargue mi mano para ver la hora. 4:20am, marcaba los números en la pantalla. Me senté en la cama, este movimiento haciendo que la sabana resbalara por mi cuerpo y dejara mi torso desnudo a la vista. Me pase las manos por la cara y mire a mi izquierda, viendo la espalda bronceada de mi novia. Me estire y deje un beso en esta riendo leve al verla encogerse y murmurar algo inaudible para mí. Me levanté y fui en busca de mi bulto sacando una ropa para poder correr. Y en extremado cuidado de no hacer ruido entre al baño e hice mi rutina mañanera.

Al salir Valeria se encontraba dándole la cara a la puerta y sonreí caminando para taparla, ya que hacía frío y la sabana se había movido y había dejado a la vista su cuerpo desnudo de la cintura para arriba. Después de hacer esto salí a la cocina con mi iPod y audífonos en mano. Para desayunar.

Levante la vista del celular al escuchar como abrían la puerta principal y mire entrando un pedazo de pan a mi boca. Riendo al ver a Sofía con sus tacones en mano y entrando en puntillas. Mire la hora en el reloj de la cocina. 4:50. — Vaya horas de llegar Sofía — Ella me miro como si hubiera sido descubiertas con las manos en la masa.

— ¿Qué haces aquí? — Pregunto en un susurro y me encogí de hombros.

— Valeria, me invito — Ella asintió, caminando para sentarse a mi lado y me levanté para echar desayuno en un plato y ponerlo frente a ella — Gracias — Asentí con una sonrisa mientras servía jugo de naranja en un vaso y agua en otro. Le pasé el de naranja y apoyando mi cintura de la isla comencé a beber agua.

— ¿Cómo te fue? — Ella subió sus pulgares en respuesta de que le fue bien ya que tenía su boca llena.

— Me fue increíble, gracias por preguntar — Iba a decir algo, pero la suave y soñolienta voz de Valeria me interrumpió.

— ¿Yuri? — Apareció en el pasillo con la sabana arropando su cuerpo mientras estrujaba su ojo izquierdo y sonreí porque no había mejor vista que esta, de Valeria con su pelo desordenado y echado a un lado, mientras me buscaba — ¿Qué haces aquí? — Pregunto al ver a Sofía.

— Es mi casa — Reí al escucharla y esto hizo que Valeria levantara la vista a mi dirección y caminara hacia con un pequeño puchero en su boca. Abrí mis brazos y ella se refugió en ellos escondiendo su cara en mi cuello — Aww, me dan nauseas. Son tan tiernas — Sentí la sonrisa de Valeria en mi piel cosa que me hizo sonreír — Me iré a dar un baño. Nos vemos luego Yuri — Di un asentamiento en despedida y Sofía desapareció tras la puerta de su habitación.

— ¿Por qué no estas en la cama?, hace frío. Me desperté al sentir tu espacio vacío — La voz algo adormilada de Valeria se hizo escuchar en la cocina.

— Tengo una rutina cielo, la cual debo cumplir — Dije suave mientras acariciaba su espalda por encima de la sabana haciendo que soltara un suspiro.

— Es muy temprano — Apoyo su barbilla en mi clavícula y mire hacia abajo para encontrarla mirándome con un puchero que me hizo reír y besar la punta de su nariz al mismo tiempo que sentía como ella besaba mi barbilla.

— Lo sé — La abrace por la cintura y ella con su brazo libre abrazo mi cuello ya que con la otra agarraba la sabana para que esta no cayera — ¿Quieres acompañarme a correr? — Sabia cuál sería la respuesta, pero aun así hice la pregunta. Ella soltó una pequeña carcajada.

— Estás loca si piensas que iré a correr a las cinco de la mañana — Reí asintiendo.

— Esta bien. Volveré en dos horas y media. Ve a dormir — Asintió y me dio casto beso para después volver a su habitación y dormir.