IMPREVISTOS

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- ¿Es una broma verdad? - Seokjin no podía ni quería creer todo lo que Jungkook le estaba contando.

-Lamentablemente no Jin, está pasando por un trauma debido al aborto y hay muchas ideas erróneas en su cabeza.

-Siento mucho lo de su bebé, y lo digo en serio, pero no puede estar por ahí pensando que otra persona tiene a su hijo.

Jungkook tomo la taza de te y se la ofreció a Seokjin.

-Lo sé – Jungkook se sentó en cuclillas frente a Seokjin que se encontraba sentado en el pequeño sofá individual – ya estamos trabajando para solucionar esto, no tienes que sentir miedo...

-No puedes decir eso, claro que lo tengo, tengo miedo de que se vuelva más loco e intente hacernos daño, pero puedes estar seguro de que no me quedare con los brazos cruzados, no le tendré lastima y aun con este vientre puedo golpearlo.

Jungkook rio ante el ataque de ira de Seokjin.

-Estoy seguro de eso, se que eres un omega muy fuerte.

-Necesito averiguar como diablos entro al departamento, no quiero volver y estar como loco pensando que en cualquier momento va a volver

-Sobre eso, te quedaras aquí el tiempo necesario hasta que sea seguro, y no es negociable Seokjin.

-Bien, pero mi ropa y todas mis cosas están allá.

-Te comprare nueva ropa y todo lo que necesites.

Quizás estaba demasiado cansado para discutir con Jungkook o tal vez le gustaba la forma tan protectora en la que actuaba, Seokjin decidió no discutir y acepto todo lo que salió de la boca del alfa.

Quizás estaba demasiado cansado para discutir con Jungkook o tal vez le gustaba la forma tan protectora en la que actuaba, Seokjin decidió no discutir y acepto todo lo que salió de la boca del alfa

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Estaba en un departamento que no era el suyo, en una cama que no era la suya. No se sentía incomodo sin embargo había algo que no lo terminaba de convencer. Observo la pequeña luz que venia de la pequeña lampara en forma de luna, era realmente linda pero no le daba la tranquilidad que necesitaba para poder cerrar sus ojos y dormir.

Cerro sus ojos por quinta vez en la noche para intentar dormir, pero como todas las veces anteriores un par de ojos verdes lo perseguían. Miro el pequeño reloj de la mesa de noche, dos y cuarto de la madruga. Quería dormir y necesitaba dormir. Y solo había una forma de lograrlo.

Lentamente y evitando hacer ruido salió de su habitación y se dirigió a la de Jungkook. Al entrar pudo observar al alfa dormido tranquilamente. Maldito idiota, estaba ahí descansando tranquilamente y él no podía ni cerrar los ojos. Sin pensarlo mucho se metió en la cama. Sintió cuando el cuerpo de Jungkook se movió en la cama para después ser abrazado delicadamente, su mano sobre su vientre y su nariz acariciando su cuello.

-Puedo olerte – bajo su mano al vientre del omega y lo acaricio – y a él también.

- ¿Por qué nos mandaste a la otra habitación?

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