IV. 🔮

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Bajo de un auto y está justo frente a mi, sus ojos están fijos en los míos, me observa de arriba abajo, parece que sostenemos una conversación.
—Pero no sé cómo te llamas ¿Qué tal si empezamos de nuevo? —usa un tono divertido y sonríe, hace mucho que no escucho su voz.
—Soy Edward Munson —tiende su mano, miró de ella a su rostro y lo único que puedo pensar es en lo familiar que es para mí, me apresuro a tomarla pero todo se desvanece.

Despierto con mi frente llena de sudor, enciendo la lámpara para buscar mi libreta y complementar mi dibujo: hay dos autos y una parte del restaurante.
—Edward, Edward Munson —lo plasmó en mi libreta, es su nombre —Eddie... —susurro.

Fue un poco más claro este sueño, necesito seguir explorando esto.
—Buenos días, papá —preparé unos huevos, es viernes y en general Charlie se va a beber cerveza después del trabajo.

—Hola hija —se sienta en la pequeña barra de la cocina esperando a que sirva su desayuno.

—Hoy tardaré un poco —aviso.

—¿Qué harás? —cuestiona con algo de angustia.

—Estudiaré en la biblioteca y luego iré a una charla sobre ciencia en la universidad pública —explico. Es real lo de la charla, solo que no iré.

—Oh... ten cuidado con las personas si se te acercan o te ofrecen algo —se que es difícil para él, sé que se preocupa.

—Tendré cuidado. —

{...}

Como es usual no hay mucho movimiento en la biblioteca, mientras ordeno los estantes pienso en mi último sueño, es como si una pieza se encajara cada vez. Ahora su nombre retumba en mi mente al igual que su mirada.

Se me ocurre que de alguna forma puedo averiguar sobre él teniendo su nombre y apellido, tiene que existir de algún modo. No sé muy bien cómo empezar.

Quizá pueda hacerlo por las publicaciones de los periódicos, quizá sea alguien reconocido, empezaré por Los Estados Unidos, no estoy segura qué lugar es ese estacionamiento con el que he soñado últimamente, no parece un lugar el cual haya visto antes.

Me aventuro a buscar, claramente en orden alfabético en la hemeroteca, llevo un buen rato aquí, hay muchas personas llamadas Edward en este país. Pero no desisto y para mi sorpresa hay una publicación de un periódico de Indiana. Encuentro un titular bastante particular.

"El Diablo está suelto en Hawkins.
Este pueblo pequeño de indiana ha sido protagonista de sucesos extraños, desde las denuncias de niños desaparecidos, laboratorios secretos y asesinatos sin explicación como el caso de la familia Creel, ha llevado a sus habitantes a creer que el terremoto ocurrido la noche del 27 de marzo de 1984 no ha sido solo un desastre natural sino que le atribuyen como un castigo divino por los actos de un culto satanico llamado 'Hellfire Club' siendo su líder Edward 'Eddie' Munson a quien se le acusa principalmente por la muerte de la adolescente Chrissy Cunningham..."

—Pero... qué mierda... —

Detalló las imágenes del artículo y es la fotografía de un grupo de chicos usando camisetas iguales con el nombre del club Hellfire, y allí está él, el tipo de mis sueños, aunque se ve distinto a como lo recuerdo en los recientes, aquí se ve más joven y con el cabello largo, sus ojos son inconfundibles a pesar de que es una fotografía algo borrosa.

PRISONER - Eddie MunsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora