La Promesa (Final)

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El ruido de la puerta abriéndose de una patada levantó a Becky de su sueño.

H: Dónde estan, hija de puta?! Heng la agarró por la camisa.

B: Oye culero con mi madre no te metas. De qué estas hablando, Heng? Detrás de el, había tres policias que revisaban el cuarto de Becky.

H: No te hagas! Dónde estan mi mujer y mi hijo?

B: QUE?! Freen y Samuel desaparecieron?

H: No te hagas la actriz que no te queda el papel! Dime donde estan o te llevo ahora mismo a la comisaria. Becky puso sus manos hacia alfrente.

B: Pues entonces llévame porque yo no se nada acercate de donde estan Heng. Este la miró dudosamente y luego se dirigió a uno de sus agentes.

H: Encontraron algo? Los tres agentes movieron la cabeza y Heng se dirigió a Becky. Dónde está tu hermano?

B: Tenía un viaje de negocios. Puedes corroborarlo con mi madre y mi padre. Heng silbó y los agentes salieron del cuarto.

H: Más vale que aparezcan hoy mismo Rebecca porque aunque no tengas nada que ver te voy a incriminar a ti y pasarás el resto de tu vida en la cárcel. Salió del cuarto como alma que lleva el diablo. Becky se acostó de nuevo y espero a escuchar el sonido de la puerta principal. Cuando la cerraron fuertemente sonrió.

B: Ya están a salvo, mi amor. Los veré pronto.


F: Ricardo por favor déjame hablar con tu hermana. Han pasado ya 8 días desde que nos fuimos. Ya debe ser seguro hablarle.

R: Freen, qué más quisiera que decirte que si, pero no se puede. Tu esposo te sigue buscando. Constantemente habló con mi padre y me dice que Heng está como loco buscándolos.

F: Hay algo que no me estas contando y lo noto en tu cara. Heng le hizo algo a Becky?

R: Mejor enfócate en Samuel ok. En unos días voy a volver a la ciudad para calmar las sospechas de Heng. Intentaré traer a Rebecca conmigo.

F: Ricardo, has hablado con ella desde que nos fuimos?

R: No. No me contesta las llamadas y tampoco puedo ser muy insistente porque Heng puede estar vigilándola.

F: No puede ser. Heng está loco, Ricardo. Y si la secuestro o la está torturando? Yo me muero si le pasa algo a Becky. Las lagrimas brotaron de sus ojos incontrolables. Richie la abrazo.

R: Tranquila, Freen. Recuerda que Becky es fuerte. Todo va a estar bien. Ya verás que pronto va a estar aquí con ustedes. Samuel entró corriendo a la casa.

S: Mamá, me llevas a la tienda a comprar un té con leche por favor? Freen limpió sus lagrimas y se empezó a reir.

F: Pequeño, no seas tramposo. Pronto estará la comida. Tal vez mañana podamos comprarte uno. Samuel cruzó los brazos e hizo un puchero idéntico al de Becky. No, eso no va a funcionar esta vez. Mejor vamos a la cocina y me ayudas a hacer la ensalada. Freen agarró su mano y se llevo a Samuel dejando sólo a Richie. Richie reviso su celular.

R: Espero que estes bien Rebecca. Samuel lo llamo.

S: Tio Richie! Dile a mamá que el salmón es lo mejor del mundo. Richie sonrío.

R: No tengo dudas que ese niño es tu hijo, hermanita. Caminó hacia la cocina. Pues claro que sí, Sam. También es el favorito de mi hermana.


H: No se porque insistes en hacer esto más difícil para ti. Solo dime donde están. Becky tosió fuertemente luego de recibir el tercer golpe a su estomago.

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