Senté a ____ en mi regazo, la acomode en mis piernas y seguí con mi trabajo, ella estaba quieta mientras que yo trabaja y podía sentir el olor de su perfume. Olía a caramelo.
──Sa...sanemi...── la mire y puse mi mentón en su hombro.
──¿Que pasa bebé?── pregunte y bese su cuello.
──Es que...dios...¿Puedes quitar tu teléfono?──.
──¿Mi teléfono? Pero si está en la mesa── me puso roja y se puso de pie.
──Mejor....voy a...voy a pedir algo para tomar...── salió rápido de la oficina y mire mi entrepierna.
──Aahh, tendrá que acostumbrarse── murmure y seguí en mi computador.
Paso maso menos una hora y ____ no volvía, me levanté para ir a buscarla y cuando abrí la puerta ví a Kioko y me sonrió.
──Hola señor, le traje unos papeles que le envío su padre── extendió los papeles hacia mi.
──Dejalos en mi escritorio, tengo que buscar a alguien── ella asintio y se hizo a un lado, salí de la oficina y comencé a llamar a ____.
No me contestaba y escuché una risitas en una de las habitaciones, al abrir la puerta ví a ____ con unos trabajadores mientras bebían café y se reían.
──Aver, aver, tengo otro chiste── dijo uno de ellos mientras tomaba un sorbo de su café ──¿Porque va riendo la escoba?──.
──No se ¿Porque?── pregunto mientras sonreía.
──Porque ba-rriendo── ____ empezó a reírse al igual que los demás ──¡Oh jefe sanemi!── todos se quedaron callado y se pusieron de pie, ____ me miro algo asustada.
──Sanemi...yo── levanté mi mano y ella guardo silencio.
──Tranquila, lo bueno es que estás aquí y estás bien, vamos── la tome de la cintura y la apegue a mi.
──¡Nos vemos señorita ____, nos alegro mucho haber hablado con usted!── todos hicieron una reverencia y ella se despidió con una sonrisa.
Mientras volvíamos uno de los empleados se acercó corriendo a mi.
──¡Jefe sanemi!── me voltie y tomo un enorme bocado de aire ──¡Tiene una junta importante ahora, tiene que estar presente!──.
──¿Justo ahora? Mierda, vuelve a mi oficina y espérame── bese su mejilla y luego me fui junto al empleado.
Mire a ____ y ella siguió su caminó hacia mi oficina.
──¿Dónde está Masachika?──.
──Está en el piso de abajo, la impresora se rompió de nuevo──.
──Bien── llegué a la habitación y di un suspiro antes de entrar, en la habitación habían muchos hombres mayores que yo y solo dos mujeres ──buenos días, damas y caballeros── me senté y me acomode en mi silla.
──Por lo que tengo entendido ¿Eres el hijo mayor de Shinazugawa?── asenti ──vaya, no eres idéntico a el──.
──¿Hablaremos de negocios o de mi?──.
Comenté y apoye mis hombros en la mesa, comenzamos con la reunión y solo prestaba atención a cada uno. Aveces me arrepiento de haber venido, solo hablan de invertir y invertir.
Tome mi teléfono y por debajo de la mesa le escribí a Masachika. Tardo en contestarme pero lo hizo.
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Apague mi teléfono y seguí escuchándolos.
𝑷𝒐𝒗'𝒔 _____
Regrese a la oficina de sanemi, pero escuché sonidos en la oficina y pensé que había alguien, abrí la puerta y vi a uno chica de espaldas mientras tenía algo en sus manos. Era...¿El abrigo de sanemi? Estaba oliendo lo mientras la escuchaba soltar cada suspiro de satisfacción.
Cerré la puerta y la pie, al abrirla ella estaba acomodando unos papeles.
──Amm, hola── ella me miro de mala gana y fingió una sonrisa.
──Hola y adiós── paso por mi lado y luego cerró la puerta.
Si sanemi hubiera venido conmigo y la hubiera viste seguro la despide por estará haciendo eso, me acerque a su abrigo y vi que tenía una mancha de labial rosa, trate de limpiarla pero no pude.
Deje su abrigo a un lado y me senté en el sofá. Estuve en silencio un largo rato, escuchaba el sonido del reloj y entre en desesperación por no saber que hacer ahora.
Alguien entro a la oficina y me gire para ver al amigo de sanemi hay parado.
──¡Oh, hola señorita!── dijo sonriendo y se sentó en el otro sofá ──¡Nos volvemos a ver!── sonreí al igual que el.
──Hola ¿Cómo has estado?──.
──Eh estado de maravilla ¿Y usted señorita?──.
──Solo dime ____──.
──Bien, ____, puedes decirme Masachika o Kumeno, como desees──.
──Claro, Masachika── sonrió.
Nos quedamos hablando un largo rato, ni me di cuenta cuando tiempo paso.
──Disculpa la pregunta── el me miro y ladeo la cabeza ──¿Porque tienes una cicatriz en tu mejilla? Y..¿Porque sanemi también tiene muchas cicatrices?──.
──Bueno...digamos que sanemi antes era un chico que le gustaba pelear, y se peleaba con cualquier que le miraba mal o le decía algo. Recuerdo que fuimos a una fiesta y hay fue donde se lastimo todo el cuerpo, al igual que lastimaron a su hermano── se cruzó de brazos y bajo la mirada
──¿Tanto se lastimo?──.
──La mayoría son porque jugaba fútbol americano y se lastimaba, pero si, se peleó feo y lo lastimaron, pero lo bueno es que protegió a su hermano menor──.
──Es..¿Muy violento?── asintió ──¿Demasiado?── volvió a asentir.
Me costaba creerle, no se veía tan violento y nunca ví señales de que lo fuera, debe ser que trata de controlarse un poco para no mostrarse violento frente a mi.
La puerta se abrió y Sanemi tenía cara de dormido, estaba muy cansado. Masachika se puso de pie y se despidió de mi y de sanemi.
──¿Estás bien?── sanemi se acercó y se arrodilló para luego abrazarme por la cintura.
──Estoy cansado...necesito dormir un poco── bostezó y cerró sus ojos unos segundos ──¿Nos acostamos en el sofá grande?──.
──Claro, solo un rato── el asintio y se puso de pie, lo guíe hasta el sofá y me acosté, se acostó encima de mi y apoyo su cabeza en mi vientre y cerró sus ojos.
Comencé a jugar con su cabello mientras que el dormia tranquilamente, me causaba ternura, no parece una persona que fue violenta en el pasado. Párese más un gatito que solo quiere amor y cariño.
Me quedé hay acostada mientras miraba el techo, no tenía ganas de dormir, pero lo que más daba vueltas en mi cabeza, es que aquella mujer estaba oliendo el abrigo de sanemi y eso me inquieta.
