My neighbor is a Werewolf: Legacies

Capítulo veintiocho "Orgullosos"

Pov Emily:

estamos en el receso de la escuela repasando el plan que habíamos armado para poder llevar a cabo la resucitación de Derek Hale. Todo parecía ir bien, teníamos la distracción, los elementos, los poderes necesarios que serian los de un alfa y escogimos a  nuestro tío Alek por obvias razones.

—chicos tenemos un ligero problema -dijo Eli. —no hay restos de mi padre.

—no entiendo —fruncí el ceño confundida.

—si, bueno, lo de Peter funcionó porque mi padre a pesa de que estaba rostizado como un pavo, no se cremó, mi padre le cortó el cuello —explicó —había un cuerpo, pero con mi padre...no lo hay, no podemos hacer este ritual.

—¿y ahora que podemos hacer? —preguntó Ty.

—se me ocurre que podemos hablar con la tía Genie, ella es bruja, tendrá algo que nos ayude. —propuse.

—es una buena idea —me apoyó mi mellizo.

—perfecto, iremos hoy solo que primero tengo que hacer algo. —miré a mi chico —Eli, necesito que me prestes el Jeep.

—si lo chocas te mató —me dio las llaves.

—solo te sentenciarías a muerte.

—es un buen punto —suspiró.

—¿Qué vas a hacer con el jeep? —preguntó Addi.

—voy a sacar mi licencia.

—¿Estás loca? Pero si ni siquiera pudiste terminar tu practica con papá.

—relájate Ty, voy a poder —sonreí.

Fuimos por el jeep y Eli seguidos por oos chicos en el otro auto me llevaron a la oficina para sacar mi licencia a la oficina de transporte. Cuando fue mi turno,me dirigí hacía la pista con el jeep donde toman el examen, la verdad no se me complicó tanto como creí, el entrenador estaba esperándome con un fichero en sus manos.

—McCall ¿Vienes a sacar tu licencia?

—entrenador, no sabía que también trabaja aquí —abrí la puerta de copiloto.

—tiempos difíciles. —se subió al auto. —¿Estás lista?

—nope, pero hay que hacerlo —asentí. —cuando miré al frente vi a mi padre observándome junto a los chicos. —tiene que ser una broma —murmuré.

—igual de determinada que tu padre.—Prendí el auto, acomodé las manos en el volante diez y dos y aceleré despacio, hice todo el recorrido lo mejor que pude, tire algunos conos pero al menos no choqué el auto.—bien hecho, McCall —me felicitó. —tuviste un par de errores pero, lo hiciste bien, ya tienes tu registro.

—muchas gracias entrenador —sonreí.

Salí de la pista y entré para terminar con todo el trámite, tras unos minutos de espera salí de la oficina y al ver a mi padre sonreí alzando la licencia para luego correr en su dirección siendo atrapa por sus brazos. —¡lobita, estoy tan orgulloso de ti!

—gracias, creo que sin tu ayuda no hubiera podido.

—pues me alegra que esas clases que tuvimos luego de la pelea te hayan servido —besó mi frente antes de dejarme con suavidad en el piso.

—ahora te toca a ti, Ty.

—no papá, por ahora no tengo prisa —se encogió de hombros —ya tengo uber personal —golpeé su brazo —¡au!

—por cierto, papá ¿Cómo supiste que estaría aquí?

—bueno, tu hermano me aviso —lo abrazó por los hombros. —y la verdad, quería estar aquí para mi bebé.

—vamos a casa, así se la enseño a mamá —dije haciendo alusión a la licencia.Cada uno se subió a su auto, excepto nosotros ya que vi que Eli se dirigía al copiloto —¿Qué haces?

—hoy conduces tú —sonrió subiéndose.

—okay —entré y procedí a conducir hasta casa.Cuando llegué corrí hacia adentro eufórica —¡mamá! —mi madre bajó las escaleras.

—¿Qué ocurre cariño? —preguntó extrañada.

—lo hice —le enseñé la licencia —¡conseguí mi licencia!

—oh, cariño —se acercó abrazándome con fuerza —no sabes lo que feliz y orgullosa que estoy de ti —dejó un beso en mi cabeza.

Estuvimos un rato festejando y luego los chicos usando la escusa de que quería mostrarle mi logro a los tíos, nos fuimos a casa de tía Genie.
No tardamos mucho en llegar pues no vivían muy lejos.

—¡hola mis bebés favoritos! —la tía nos abrazó a mi y a mi hermano. —¿Cómo están?

—bien, ah por cierto, ellos son Eli Hale y Addison Stilinski. —los presenté.

—el hijo de Derek y la hija de Stiles, ¿Stiles los dejó estar juntos?

—ah no, nosotros no estamos juntos —explicó la pelifresa.

Eli y yo nos miramos —¡oh Dios! —abrió los ojos como platos —¿Ustedes...?

—algo así, pero no le digas a papá, odia el tema —entramos a su casa.

—¿y por qué están aquí niños?

—pues queríamos saber si hay alguna manera de traer a alguien que se pulverizó a la vida —dije como quién no quiere la cosa.

—¿Qué?

—¡que directa! —murmuró Addi.

—¿por qué?

—¿me creerías si te digo que es por curiosidad? —sonreí nerviosa.

—claro, me voy a creer que vinieron hasta acá solo por curiosidad —rodó los ojos —si esto es por Derek —miró al Hale menor —lo siento hijo, no puedo hacer nada, todo lo que muere debe permanecer así pues, toda magia conlleva un precio.

—tía, am...¿Me harías un té? ¿Alguien quiere algo?

—ah tía, yo quiero un café, si no es molestia —Ty me siguió la corriente.

—ya se los traigo —cuando la bruja se dirigió a la cocina los tres nos miramos.

—busquen en la biblioteca libros que nos ayuden ¡ya!

Corrimos hacia el mueble y nos pusimos a revisar con rapidez todo.

—¡lo tengo! —Addi tomó una foto se la hoja con su celular y dejamos todo donde estaba, para luego acomodarnos en nuestros lugares.

Una vez la tía regresó hicimos como si nada, tomamos nuestras bebidas y hablamos de las nuevas noticias, aparentando normalidad.

—bueno, ya tenemos que irnos, fue un gusto verte —dijo Ty parándose siendo seguido por nosotros.

—se me portan bien —dejó un beso en nuestras frentes —los veré en tus dulces dieciséis Emy.

—eso me encantaría —sonreí.

—fue un gusto conocerlos, chicos —miró a nuestros amigos —se portan bien y tú —miró a Addi —tienes la misma energía hiperactiva de tu padre, sigue así.

—si, gracias.

Salimos allí y soltamos un suspiro de alivio, lo habíamos hecho y nada salió mal, milagrosamente.